Gemelo Correcto

No dejo de ser un idiota

Narra Sheldon

Me adapté más rápido de lo que esperaba.
Dani no entraba en confianza conmigo, aún si era yo quien ha estado cuidando todo estos días. Le habían dado el alta.

Yo tenía que medicarla de acuerdo a lo que me habían dicho los doctores. Su mamá siempre dstaba trabajando y como sus padres se separaron, su papá desapareció por un tiempo.

Yo, como buen vecino, me había ofrecido para cuidarla. Dani tenían sus momentos: a veces se sentía mal, tenía fiebre o se desmayaba.

En ese momento se estaba bañando y yo la esperaba del otro lado de la puera por si algo pasaba, tratando de no imaginarme cosas. A veces pensaba que sucedería si se desmayaba en la ducha y tenía que cargar la desnuda.

- Sabes que no tienes que hacer esto ¿cierto?. Nadie te paga.

- Tranquila, lo hago por lástima- del otro lado se escuchó como cerraba la ducha. Después caí en lo que havos dicho y maldecí internamente.

Dani abrió la puerta con un toalla enroscada en el cuerpo, estaba furiosa. No llegué a mirarla que ya me había abofeteado.

- No necesito tu lástima- me empujó con su hombro y se fue a su habitación; sentí una punzada de dolor, sus palabras estaban cargadas de odio.

- Dani - llamé  a su puerta- sabes que no fue en serio, soy un idiota. Por favor.

- ¡Vete!- gritó y tiró un almohadón contra la puerta. Su voz se escuchó rota, la había hecho llorar.

{ . . . }

No puedo ser mas idiota. Ella pensaba que estaba allí por lastima y era todo lo contrario,  yo la amaba.

Hace un año había dejado esa personalidad de capullo porque no necesitaba ocultar mis sentimientos, hace un año le dije a Dani que la quería, o algo asi. Estaba drogado, en una fiesta, pero se lo dije. 

Todos los días que la veía en el hospital me enamoraba mas y mas, y me dije que luego de que ella despertara le diría que la amaba y las cosas estarían bien. Pero cuando ella despertó, me di cuenta de que estaba perdida, que todo a su alrededor había cambiado y no podía soltarle la bomba en ese estado. 

Entonces decidí ser eso que ella necesitaba, eso que no había cambiado, porque ella se hubiese derrumbado si veia que todo habia cambiado de golpe.  Tenía que fingir ser el idiota que siempre fui, otra vez.