Fluoxetina. (F r e r a r d)

Capítulo 11.- What are we?.

Y así la habíamos llevado durante una semana. Como los casi "adolescentes calientes" que éramos, estábamos de manita caliente.

Salíamos al parque o a las canchas. Nos tomábamos de las manos nos dejábamos besos demasiado cerca de nuestros labios, abrazos por la espalda, me encantaba tomarlo de la cintura. Y al final del día, él me daba un beso en el mentón y yo en el cuello.

Era perfecto.

- Señorito Way, ¿Primer día y no pone atención?.- y ya había vuelto a la escuela. Lo cual cabe recalcar que Frank iba en el mismo salón que yo.

- Disculpa, profesor. No volverá a pasar.
- Bien, como decía los trabajos valdrán el 30% de la calificación, la asistencia 10% , el proyecto 20% y él examen 40%.- se oyó un abucheo por parte de mis compañeros.- Siganle y cambiare los criterios.
- Ya perdón, profe. - dijo una compañera.

Y lo odiaba, no me malentiendan me gusta la escuela y mas ahora que estoy por acabar el tercer año del instituto, si no que odiaba la manera en la que estábamos acomodados en las butacas. En orden de la lista. Y la manera en la que este mismo profe, el profesor de Biología, Matt Peliesser me miraba como si fuera un bicho raro.

- Entonces cállense, que ya va a iniciar la clase, saquen el material, empezaremos por "¿Qué es la biología? "...- se Voltea un momento al pizarron mientras escribe el titulo, momento que aprovechó para mirar a Frank, que esta casi a la mitad del salón. Le mando un beso fugaz, haciendo que se sonroje y me lo devuelva. Tierno.

No escucho al profesor, a pesar de que amo la materia odio al profesor. Solo me dedico el resto de la clase a observar como Frank escribe en la libreta, donde un dibujo mio esta de portada.

- ¿Hacemos el trabajo juntos?
Es la voz de Frank la que me despierta. Hace un rato salimos del instituto, mientras caminábamos pasamos junto al parque "conocido" si recuerdan de que parque hablo. Y lo convencí de que nos quedaremos, al menos un rato.

- Frank, acabamos de salir espera al menos un rato para despejar mi mente y del evidente odio que el maestro de biología ya me tiene.
- ¿Como es que alguien te puede odiar desde un inicio?.
- Es que soy genial.
- Como digas , diva.

Reí, enserio que no me voy arrepentir de haberlo conocido. Pero la duda del lo que nosotros "Somos" aun me ronda por la cabeza -Frank, que es lo que piensas de nosotros.
- ¿De qué?
- Pues nosotros. ..ya sabes esto.
- Oh, ya. No lo sé.
- Es lindo, es lindo tenerte aqui.
- Eres un cursi de primera Gerard..
- Y tu eres un rompe momentos de escenas románticas.
- Perdón, pero si te lo digo enserio.
-¿Enserio de que ?
- Que no lo sé. Y no es que no me interese pero realmente es muy poco tiempo el que nos conocemos
- Son semanas, ¿no?
- Casi el mes.
- Pero Frank, tu me haces bien. Eres lindo.
- Ya deja de sonrojarme, maldita gorda.- carcajee.
- Y Admítelo, también piensas qué soy lindo.
- Que va. Te pareces a Adele antes de bajar de peso.
- ¡Hey! ¡Yo no soy rubia!

Reímos al mismo tiempo, y ¿Saben? Dejaré esto por ahora, no hay prisa por saber que somos, con que él esté así conmigo es más que suficiente.
- ¿Entonces si lo hacemos?.- lo miré con picardía.- el trabajo imbécil.

Suspiré.

- ¿Cuàl de todos?
- El de biología .

-¿Cómo te fue en la escuela?
- Neh, como todos los días a diferencia que ahora tengo que escribir y portar un uniforme.-

Después de un rato Frankie y yo decidimos irnos, prometiendo hablarnos más tarde para lo del trabajo. Nos despedimos como ya saben, Entrando a mi casa me encuentro a mi mamá en la sala, recibiéndome.

- Espero que ya no te vayas a ningún final ni a una regulación.
- Claro que no. Además es mi último año.
- Más te vale , sino juro que en las boletas te voy a jalar las orejas frente a todos.

La quería retar, y lo hubiera hecho si no fuera que ella en verdad cumple lo que dice, así que no me arriesgué y solo asentí.

- Me iré a cambiar. ¿Y Mikey?
- En la escuela recuerda que se metió a Básquetbol. Tiene taller hoy, así que llega cerca de las dos.
- Ah, que flojera.
- Por eso te saliste del curso de verano, ¿No?
- No me gusta eso. Bueno para practicar así como Mikey,no.
- Vete a cambiar, Way.
- Ya voy.

Fui a mi habitación, cambiándome en cuestión de minutos para al final recostarme en mi cama. Por alguna razón siempre llegando me sentía totalmente cansado.

Me quedé ahí, viendo el techo, pensando nuevamente en la actitud de Mikey de hace una semana. Él no es así, lo aseguro. ¿Quién le habrá dicho tantas porquerías?, Él había mencionado esa tarde que iba a visitar a alguien
¿Pero a quién?. Necesito averiguarlo para romperle toda la cara, porque nadie controla a mi hermanito de esa manera.

- ¡Gerard baja ya!

- La biología es una ciencia, su objetivo de estudio es el ser vivo o cualquier cosa que tenga vida, esto incluye células y organismos...¡Gerard, hazme caso!
- Ay, perdón.

Estaba en un tipo de trance, estaba pensando en varias cosas que al final dejé de poner atención al trabajo.

- Ya llevo tres horas aquí u no hemos avanzado más que la introducción, esto vale puntos, Gerard.
- Perdón, es que no me puedo concentrar. Estoy pensando en muchas cosas.

Frank se me quedó viendo un momento, cerrando la libreta y el libro, haciéndolos a un lado.

- ¿Otra vez? Deja ya eso, se te va a quemar el cacahuate.
- Que gracioso.- estiré mi brazo hasta tomar su mano apretándola suavemente.- estoy tratando de encontrar a quién hizo a Mikey pensar así.
- Deberías dejarlo así.
- No estoy de acuerdo en eso.
- ¿Porqué?
- Es mi hermano, y las personas con las que se juntan no deben ser buenas influencias.
- ¿Y no sería más fácil preguntarle?
- Oh, ¿porque no se me ocurrió antes? Es obvio que no me lo va a decir. Además...
- Ya, ya. Me aturdes. Yo te voy a ayudar, ¿Vale?. Pero ya no te angusties me angustias.
- Está bien.

Solté su mano, acercándome a él lo tome de las piernas haciendo que este rodeara sus piernas en mi cintura. Llevándolo de mi mesa de estudio a mi cama, quedando arriba de él. ¿Era una pose comprometedora? Demasiado, pero vamos, ya no éramos taaan niños, ya cumplíamos quince este año.

- ¿Qué haces, depravado?
- ¿Ahora soy yo el depravado? Quién era el que me quería tocar las piernas, ¿Eh?
- Eso ya fue.
- Me pregunto cómo serán las tuyas.- tomando la base de su Jean, siendo detenido al instante.
- Alto ahí loca...
- Ya, era broma.

Rodeo sus bracitos a mi cuello, apegándose más a mi cuerpo.

- Me haces sentir vivo.
- Tú me haces sentir querido, mi Frankie.

Colocó su rostro en mi cuello, y empezó a llorar. ¿Porqué llora?.

- Frank, ¿Qué pasa?
- Nada, no es nada.- sabía que mentía. Pero no quise preguntar más porque sabía que sería en vano así que apreté más el abrazo. Dejando besitos en su cuello. Después de unos minutos se tranquilizó.
- ¿Mejor?
- Gracias
- No hay nada de que agradecer. Ahora vamos a terminar ese trabajo.
- Vale.- dijo con una sonrisa enorme. Que no me pude resistir.

Y le di un pequeño beso en los labios, uno rápido, uno de piquito. Que eso no impidió que su cara se pusiera toda roja.

- Vamos levántate.- jalo de sus brazos, dejándolo frente a mí. Sin esperar que rápidamente me diera un beso un poco más largo pero de igual manera solo juntando nuestros labios. Separándose y viéndome con ojos brillosos.

- Él deber llama.

Sólo sonreí. Después de unas horas más terminamos el trabajo y despidiéndose de mí, en la entrada de mi casa con otro pequeño beso, pero con el mismo sentimiento de que me empieza a querer, como yo a él.
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Felices fiestas patrias.!
Bueno, ojalá les guste el capítulo y sí, hay un pequeño besito por ahí. Pero es que creo que ya era tiempo no? Bueno, en fin. En el próximo capítulo les diré algo súper importante acerca de esta historia, pero de adelanto es que tendrá una segunda parte. La sorpresa será para la próxima.
Los quiero a todxs. Gracias por las 800 leídas. 💓