Cal ya se encontraba dormido, perfecto. Me levante haciendo él menor ruido posible para no despertarlo; Cal tenía él sueño ligero algunas veces.
Me había acostado con la ropa puesta de una vez: unos pantalones de mezclilla, una playera blanca, mis tenis negros y una lampara de mano. Llegué hasta él pasillo sin hacer ruido, ni despertar a Cal. Cerré la puerta cuidadosamente y continúe en modo sigiloso hasta salir del edificio.
No había ni una sola alma afuera; me escabullí entre las sombras para no ser visto. Encontré la entrada al bosque.
Entro, no entro.
No. Ya he llegado muy lejos y tengo que responder a mis dudas. Entré al bosque sin saber cuáles eran mis, exactamente, dudas.
***
Árboles, árboles y más árboles. Había caminado ya bastante y no había encontrado nada. Lo tenía claro: me habían timado.
Me volví para regresar a los cuartos, pero antes de que pudiera salir, de nuevo ocurrió.- derecha. - ¿no se te ocurrió que podías aparecer antes? Seguí sus indicaciones.
***
¿Es enserio?
Me encontraba justo donde había entrado. La mugre voz me trajo hasta acá. Ya había tenido suficiente. Estaba enojado, frustrado.
Me regresé a los dormitorios.Cal seguía dormido, gracias a Dios, pero sentía que algo no andaba bien. Revisé todas mis cosas, las cosas de Cal, pero todo estaba como lo había dejado. Fui al baño, me di una ducha - había quedado un poco sucio de la larga, y sin sentido, caminata - me refresqué con eso, y mi mente se despejó, pero aún tenía inquietud.
No presté atención y mejor decidí tratar de dormir un poco antes de la escuela. No me haría nada bien quedarme dormido en clase de mate, física o artes y leyendas.
Doy vueltas en la cama pero no puedo dormir. Me doy por vencido y salgo del cuarto.
- ¿de nuevo no puedes dormir? - pregunta una voz tras mis espaldas. Me doy la vuelta. Brenda.
- algo así.
Me dejo caer en él piso, y Brenda me imita.
- que mal. ¿puedo hacerte compañía?
- si, supongo.
- bueno, la verdad, ya lo estaba haciendo. - ríe levemente y yo dejo escapar un suspiro. - ¿qué tienes?
- nada solo... - me debato si le digo o no. - estoy algo cansado.
- ya.
Nos sumergimos en un silencio, de esos que no son cómodos pero tampoco incómodos. Después de un rato, ella apoya su cabeza en mi pecho y me abraza, no la aparto, de alguna forma me tranquiliza. Estuvimos así hasta que me dormí, nuevamente en él piso.
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Angels Beats
ParanormalTodo parecía normal en la vida de Daniel; amigos, escuela, aburrimiento. Hasta que su vida queda enlazada con la de una chica misteriosa que parece tener más que secretos. Secretos que podrían cambiar solo las vidas valientes y que valen la pena.