Angels Beats

Capítulo 20

- ¿qué esperas? - pregunto con ansias.

- no se cómo se hace.

- bien - dijo irritada -. Lo haré yo primero.

Sacó una pequeña navaja de no se donde y se hizo un corte un la palma de la mano. Comenzó a salir sangre negra, luego extendió el brazo y formo un puño.

- yo, Amber Bolingbroke, hija de Amel de la gran casa soberana, juro cuidar de mi nuevo vasallo. - una gota de sangre cayó al piso y se evaporó instantáneamente. - tu turno. Repite mis títulos si quieres que se haga bien.

Me pasó la navaja y repetí lo que ella hizo. Un hilo de sangre comenzó a brotar de mi mano, dolió pero no dije nada.

- yo, Daniel Ramirez Vazquez, juro servir a Amber Bolingbroke, hija de Amel de la gran casa soberana por toda mi vida y no hablar de el encuentro visto.

La gota de sangre cayó y se evaporó igual que la otra. Amber sonrió.

- bien, ahora eres mi vasallo. No te borraré la memoria. Daniel Ramirez Vazquez, estaré encantada de que estés a mando.

Me estiró la mano y yo la estreché, su sonrisa se ensanchó más.

- bien, y ¿qué tengo que hacer ahora?

- nada, por ahora. Solo... - me tomó del hombro y lo presionó con una fuerza impresionante, capaz de romperlo.

Solté un grito de dolor, era punzante y desgarrador. Muy fuerte. El apretón duró unos cuantos segundo más, y luego cesó pero el dolor siguió ardiendo en mi hombro.

- lo siento.

- ¿lo sientes? ¿qué fue eso? - pregunté algo desquiciado.

Su mirada arrepentida me indicó que viera mi hombro. Me quedé sin palabras. En mi hombro estaba una pluma negra tatuada. Era hermosa y perfecta.

- ¿qué es esto?

- mi marca, nadie que me conozca te tocará un cabello. Mi forma de protegerte. - explicó.

Me sentí mal por lo que le dije, ella tenia sus motivos, y era para protegerme.

- lamento si te dolió mucho.

- no te preocupes. Me iré a los dormitorios ¿te quedas aquí?

- si, todavía tengo asuntos que arreglar esta noche. - su aura se volvió oscura de nuevo.

Y luego desapareció. Regresé a los dormitorios.