CAPITULO 29

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Donkor.

"Él me violó". Esas tres palabras no han dejado de retumbar en mi cabeza produciéndome una sensación que no puedo expresar con palabras.

―¡No mi vida! ―me niego aceptar lo que dice― No logró hacerte tal daño mi amor. ―aseguro arrodillándome frente a ella con mis manos encima de sus rodillas.

―Él lo hiso... ―sus palabras son pequeños pedazos de vidrio que cada vez que salen de su boca se entierran en mi corazón haciendo que este sangre y duela intensamente―. Hace dieciocho años él lo logró, en ese momento no hubo nadie que me protegiera de las manos de ese maldito. ―No puedo responder ante esas palabras, solo aprecio a la mujer que tanto amo, como en estos momentos se estremece y estoy completamente seguro que la razón son los recuerdos que reviven.

Comienza su narración, recuerda cómo se encontraba en el lugar al que acudía con el idiota de mi hermanito para despedirse de todo lo que habían vivido en ese lugar. Unas horas antes había visto a Niko e Iliajtida marcharse a su luna de miel y lo único que ella deseaba era llorar y llorar para dejar ir a su amado. ―mis manos dejan la piel de Ari para aferrarse a la cama. Odio que ese imbécil la haya marcado haciéndola suya, pero mi odio crece por lo desgraciado que se comportó con ella al dejarla sola y por tantos años―. Cuenta cómo llegó ese hijo de puta, el como la tocaba e intentaba besarla...

―Ari... ―ruego a que se detenga pero no estoy seguro si es por ella y todo lo que vuelve a sentir al recordar lo vivido o es por mí al no saber si soportaré no ir por ese maldito y terminar lo que dejé a media.

―Nunca había pensado hasta en ese minuto que la muerte podría ser una salvación. ―sigue narrando, ignorando por completo mi suplica―. Al darme cuenta que mientras más obstáculos le ponía para que no lograra su cometido o gritaba, él más lo disfrutaba, excitándose de una manera enferma. ―mis ojos no se apartan de su rostro, no dejo de preciar como sus rasgos están endurecidos y sus ojos solo reflejan un vacío―. Por un tiempo pensé que Nicole podría ser hija de él, ―acepta― pero a pesar de eso... no podía ni siquiera imaginar en que podría terminar ese embarazo. Porque a mi hija la amé desde el primer segundo que supe de ella sin importarme quien era su padre. ―no puedo creer que mi mujer sea tan valiente, el solo hecho de que fuera solo una adolescente y cargara con tal experiencia no la echó a la depresión, sino que quiso salir adelante por ellas dos.

―No pienses en eso Ari, por favor...―suplico tomando lugar a su lado para poder abrazarla―. Ya todo pasó. ―beso su frente pero ella enfadada se aparta de mí.

―Todo esto, ―mueve su mano mostrando nuestro alrededor―. Nunca pasará Donkor. ―mi nombre sale con enfado de su boca llevándome a un tiempo no muy lejano donde Ari no quería ni verme, lo que me hace sentir inútil―. No nos dejarán tranquilos hasta que o ellos o nosotros terminemos bajo tierra. ―insiste y es la primera vez que escucho en su voz tal desesperación y enfado a la vez.

―No hables así amor... ―ruego, no dejo de abrazarla porque es la única manera en que mi paciencia aun me mantenga cuerdo. Estoy aguantándome las ganas de salir de esta habitación e ir al encuentro del hijo de puta que destrozó hace años la vida de mi mujer y hace unas horas volvió a intentarlo. ¡Maldición...!

―¡Tú no comprendes! ―dice con desprecio― tú no sabes cómo es que alguien te toque sin que tú lo desees, ni siquiera puedes imaginarte cómo se siente alguien después de ser abusada, no podía ni siquiera dormir por meses. Veía en los ojos de todos los hombres que se acercaban a mí los de ese animal. Por años tuve que ir a terapia y te confieso algo que ni siquiera a Katerina se lo he mencionado nunca ―solo asiento porque mi boca se niega a dejar salir cualquier palabra ¿Y qué podría decirle?―. No sé si lograré... ―tengo la certeza de saber a lo que se refiere y puedo comprender el porqué de su manera de hablarme. Reconozco que nunca podré ponerme en su lugar pero tampoco la dejaré hundirse en esos recuerdos que tanto daño le hacen.

CODIGO DE LEALTADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora