En el tercer piso se encuentra Anggelo buscando la habitación que le han indicado en donde se encuentra Nicole, al encontrarla ingresa sin siquiera tocar la puerta, y ahí acostada con los ojos cerrados se encuentra ella. La luz de sus días, el sabor de su vida. Se acerca en silencio y besa los labios que tanto le habían hecho falta.
⸺He perdido la mitad de mi vida. ⸺susurra mientras se sienta a su lado⸺ ¿Cómo es posible que te hayas metido tan dentro de mí? ⸺lleva la delicada mano de la joven a sus labios. Se da cuenta de los rasguños y la sangre en ellos, se siente frustrado, quiere golpear al maldito causante de la tragedia que casi le cuesta la vida a su pequeño ángel.
⸺Bo. ⸺susurra la joven aun con los ojos cerrados⸺. ¿Has venido?
⸺No princesa, ⸺miente⸺ soy tu cerebro que se está burlando de ti. ⸺sonríe ante sus palabras y vuelve a besarla en los labios.
⸺Entonces de verdad que besas muchos mejor en mis sueños. ⸺la joven aún sigue media aturdida por los remedios que le han dado. El hombre no enciende la luz y la habitación es alumbrada solo con unas luces escondidas en cada esquina.
⸺Entonces sigue soñando conmigo mi amor. ⸺decide que lo mejor es salir, ir a buscar a Donkor y ver cómo sigue Ariadne y contarle que ya vio a Nicole. Al salir de la habitación se encuentra con un hombre que se dirige a él.
⸺Καλησπερα, ποιος ειστε; ⸺el joven lo mira sin entender una sola palabra de lo que le ha dicho y se golpea mentalmente por ser un caso perdido en aprender el idioma.
⸺Perdone, yo no hablo griego y tampoco lo entiendo. ⸺se disculpa, esperando que el hombre que tiene frente a él por lo menos si entienda un poco de italiano.
⸺Buenas tardes. ⸺vuelve a saludar esta vez⸺. Soy Niko Matzaraki, ⸺tiende su mano, la cual Anggelo no deja de mirar. Él es el padre de la mujer que tanto ama, el hermano de su mejor amigo y el desgraciado que hizo sufrir tanto a su jefa. El hombre es un poco más alto que él. Su vestimenta es una camisa ancha de color negro y un pantalón del mismo color, se le hace extraño el pañuelo negro que lleva encima de su cabeza. El joven puede apreciar los rasgos de su rostro e identificar algunas similitudes con su pequeña⸺. ¿Y usted es? ⸺pregunta aun tendiendo su mano como saludo que aún no ha sido correspondido.
⸺Soy Anggelo Risso. ⸺devuelve el saludo en el momento en que reacciona⸺. Amigo de Nicole y asistente de la señora Ariadne Menegaki. ⸺el hombre se figa en los tatuajes que aparecen en los dos últimos botones abiertos de la camisa que lleva puesta. Su mirada también va a la mano firme que le regresa el saludo y aprecia los dibujos que aparecen al levantarse la manga. Ese joven no le da un buen presentimiento y si por él fuera no se acercaría a Nicole. A pesar de que aún no puede hacer nada, algo le dice en su interior que la joven que no ha podido sacar de su cabeza los últimos días, no es hija de Manu, así que con conocidos que tiene dentro del hospital mandó hacer unas pruebas de DNA para salir de la duda.
⸺Entonces con usted hablé por la mañana. ⸺el hombre termina con el agarre y entrelaza sus brazos por encima de su pecho. Queriendo intimidar al joven que tiene ante él, algo que por supuesto no funciona⸺. ¿Cómo es posible que un hombre sea asistente de una mujer? ⸺pregunta menospreciando el puesto.
⸺No veo donde está el problema. ⸺responde mientras intenta mantener la calma. Muchas veces le han hecho la misma pregunta, pero es la primera vez que lo dicen con tanto desprecio. Le habían dicho que los griegos son machistas, pero nunca imaginó el grado⸺. Cuando te encuentras con la mejor en su área, no te importa ni siquiera ser su empleado doméstico, con tan solo estar a su lado y aprender. ⸺dice lleno de orgullo. Para Niko esas son palabras de alguien muy enamorado y ciego, pero el joven que tiene frente a él es solo un niño y Ari... "eso... ¡Ari está aquí!" reaccionó.
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CODIGO DE LEALTAD
RandomAriadne Menegaki hace dieciocho años que huyó de su pueblo natal, donde hasta el día de hoy las tradiciones son la ley. En ese lugar dejó a su familia, a su gran amor, y también a su infierno. Hoy, dieciocho años después, su pasado regresa en el ro...