Niko estuvo por bastante hora mirando a esa joven dormir bajo el árbol que le trae tantos recuerdos. No pudo evitar acercarse a ella. Le recordaba demasiado a Ariadne, es como volver dieciocho años atrás, a la vez que la vio por primera vez.
La joven se remueve y al percatarse de su presencia se sobresalta. El hombre la admira, no hay duda, él la conoce, la ha visto en algún momento, pero no logra recordar donde, por su parte la joven no demuestra ningún sentimiento, ni siquiera temor al tener a un hombre de tal magnitud frente a ella.
Después de una pequeña conversación entre los dos, Niko ve alejarse a la joven, se siente extraño y dolido tras las palabras usadas por la joven "Ari se ha casado y está formando una familia" ¿acaso pensaste que ella esperaría por ti para siempre? ⸺se pregunta al pesar de saber la respuesta.
Pasó toda la semana sin volverla a ver. Ella no volvió por el río y tampoco apareció por el pueblo, fue como si la tierra se la hubiera tragado.
Casi una semana después, doña Theodora lo llamó antes de partir hacia las tierras por las cuales hacia un recorrido cada mañana. Lo sorprendió, pero no se negó y en menos de cinco minutos se encontraba en la casa de sus padres.
Al llegar, todo es un caos. Gente corre de un lado a otro y la policía se encuentra con dos patrullas a la puerta de la mansión. Niko corre al interior temiendo lo peor por sus padres, se relaja de inmediato cuando los ve a los dos dando declaración de los hechos, sentados en el mesón que se encuentra en el gran patio.
⸺¿Qué sucede? ⸺pregunta un poco más tranquilo a uno de sus empleados.
⸺Alguien ingresó por la noche a la casa y la ha trazado. ⸺el hombre peor que antes corre al interior deteniéndose de golpe en medio del salón. Tres de las murallas se encuentran por completo destrozadas, las fotos y cuadros que cuelgan de ellos también se llevaron la peor parte. Con inmensas letras y un rojo bastante llamativo está escrito la palabra:
ASESINA.
Niko no puede creer lo que ve a su alrededor. El conoce a su madre y tiene la certeza de que esas palabras esconden bastantes verdades. ¿Quién se habrá atrevido a acusarla de tal manera? Alguien debía de estar lo bastante loco o muy afectado por la actitud de su madre para hacer algo así.
Una vez ya dadas las declaraciones y al terminar la policía de recoger todas las posibles pistas del supuesto "pintor" los empleados comienzan la limpieza. Padres e hijo se dirigen al despacho para encontrar quien podría ser el causante de tal desastre.
⸺¡Como se atrevieron a entrar a mi casa...! ⸺grita furiosa la dueña del hogar⸺ ¿Es que no saben con quien se meten? ⸺golpea su escritorio mientras los hombres la miran sin decir una palabra⸺. ¡¿Se quedarán con los brazos cruzados?! ⸺les dirige por primera vez la palabra y ellos se sorprenden.
⸺La policía ya ha tomado el caso. ⸺responde sin más su marido⸺ solo podemos esperar a que ellos encuentren algo. Estoy seguro de que es algún empleado que no está feliz con las condiciones de su trabajo.
⸺¡Y por eso van a tratarme de asesina! ⸺dice aún más molesta que antes al ver que su marido e hijo no harán nada más por la situación⸺. Quien sea que lo hizo va a pagar muy caro su insulto.
⸺Madre... ⸺el hombre ya se encuentra agotado con el comportamiento de la mujer que le ha regalado una vida infernal.
⸺¡Inútil! ⸺insulta a su hijo⸺ ¡mejor vete hacer algo valioso! ¡Aquí solo eres un estorbo! ⸺molesto Niko sale golpeando la puerta del despacho y se marcha. Cada día se arrepiente de volver a ese pueblo después de salir de la universidad. Lo único bueno había sido conocer a Ariadne y eso tampoco duró demasiado. De repente a su mente viene la joven que vio en el rio y no puede evitar ver las similitudes entre las dos mujeres. Él recuerda a Ari como era a esa edad, no está seguro que, si la llegara a ver ahora, podría reconocerla.
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CODIGO DE LEALTAD
RandomAriadne Menegaki hace dieciocho años que huyó de su pueblo natal, donde hasta el día de hoy las tradiciones son la ley. En ese lugar dejó a su familia, a su gran amor, y también a su infierno. Hoy, dieciocho años después, su pasado regresa en el ro...