Del odio al amor

Capítulo 2

Hay muchas palabras que uso y usaré son "argentinismos" y otras que son "rosarinismos", es decir palabras que usamos en Rosario y no en el resto de Argentina. Cuando las identifique, porque una ya las tiene internalizadas, intentaré poner un sinónimos que ayuden a entenderlas. Si se me pasa alguna siempre me pueden preguntar.

Por otro lado, hay palabras que seguiré dejando sin traducir por una custión de gusto, como por ejemplo: el nombre de Snow White, Charming, Miss, Sheriff.

puñete / puñetazo: piña, golpe de puño, trompada.

La ternura y el amor que Henry experimentaba por Regina en ese mismo instante no la sintió nunca en su vida. Puede que fuera porque su madre jamás se había mostrado vulnerable ante él, bueno, ante nadie. La imagen que el chico tenía de su madre era la de una mujer invencible, indestructible, imperturbable. Podía derrumbarse todo, pero Regina siempre aparecía inmaculada y erguida en medio del desastre, como ocurrió en Nunca Jamás. Y a pesar que nunca le faltó cariño, cuando se enteró que era adoptado y Mary Ma... Snow le dio el libro de cuentos de hadas; Henry borró todos los recuerdos del amor que Regina le brindó durante toda su vida. ¿Cómo pudo ser tan desagradecido? ¿Tan ciego?

El chico miró a la morocha que estaba acostada a su lado. La alcaldesa estaba durmiendo boca abajo, con el cabello desparramado en la almohada, la boca levemente abierta y los brazos a los costados del cuerpo. Estaba tan tranquila...tan relajada... Henry sintió como se le oprimía el pecho de emoción. Amaba a Regina con toda su alma. Ya le había fallado una vez. No lo iba a volver a hacer. Se juró que nadie volvería jamás a lastimar a su madre, él se iba a encargar de eso. Henry Daniel Mills iba a ser el paladín de Regina Mills, la iba a defender a capa y espada de quien fuera. La iba a proteger incluso de su otra madre. Ya era hora que alguien se pusiera del lado de Regina.

El adolescente pensó en la vida que llevó su madre. Una infancia infeliz gracias a una madre abusiva y a un padre cobarde, a los que a pesar de todo amó. La adolescencia trunca por el asesinato de su prometido a manos de su madre, gracias la traición (no adrede, pero traición al fin) de la joven a la que le salvó la vida. Un matrimonio obligado que continuó abriendo las heridas de una joven mujer que sólo estuvo acompañada por gente que la empujaba cada vez más cerca del precipicio al que terminó cayendo gracias a Rumpelstiltskin y sus maquinaciones. Henry abrió los ojos sorprendido. Se acababa de dar cuenta que toda su familia de sangre habían sido los máximos responsables (o como mínimo impulsores) de la transformación de Regina en la Reina Malvada.

La alcaldesa amó a su padre a pesar de lo negligente que éste fue para cuidarla, pero así y todo, lo sacrificó en favor de su sed de venganza. Nadie hizo que se aparatara de su camino. Nadie salvo Henry. Regina lo amaba tanto que por él hizo lo impensado, por él enterró a la Reina Malvada. Sólo por él, absorbió una maldición mortal y salvó a Snow y a Emma. Por él fue hasta el fin del mundo (o hasta Nunca Jamás), con un barco lleno de enemigos. Por amor a él, lo dejó marchar junto a la mujer que sin ningún esfuerzo de su parte, le había robado el amor de su hijo. Lo dejó ir y no conforme con eso, les dio felicidad, montones de recuerdos felices. Sus recuerdos. Y como si todo lo anterior fuera poco, derrotó a su propia hermana defendiendo la vida de su enemiga y su hijo recién nacido. ¿Y acaso alguien le había agradecido algo? No. Él siguió eligiendo a Emma y ésta, pensó llevárselo de vuelta a Nueva York sin importarle los deseos o los sentimientos de Regina. Y como la frutilla del postre, trajo del pasado a la mujer de su novio.

Henry apretó los dientes y cerró los ojos. Una lágrima se deslizó por su mejilla. El chico acercó la boca a la cabeza su madre y la besó con ternura. Regina suspiró dormida. Henry sonrió con ternura. "Ya no estás más sola, mamá. Te amo. Gracias. Gracias por quererme cuando Emma me abandonó. Gracias por cuidarme. Gracias por seguir queriéndome cuando te abandoné y traicioné. Gracias. Esta vez, yo te elijo a vos."