❀ 015

203 16 25
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Febrero, 2021.

El frío de febrero se hizo presente al la vez que la noche. Decidimos volver al piso casi dando por finalizado nuestra tarde juntos que, a pesar de ser corta, fue maravillosa. Millones de emociones se mezclaban en mi interior además de la culpabilidad porque, el hecho de saber que él me escondía cosas del pasado por no hacerme sentir culpable, me hacía ver que ambos habíamos sufrido mucho en silencio. Sonará irónico, idiota o lo que sea, porque, parece como si ninguno de los dos pudiéramos vivir sin el otro pero, no es así. Lo que Jungkook y yo teníamos era algo especial, algo que, por mucho que intentara explicar, nadie jamás lo entendería si no tenía algo igual.

Por el camino nos mantuvimos en silencio caminando dados de la mano sin saber que más aportar después de lo maravillosa que fue la voz de Jungkook cantando una de mis canciones favoritas y dándome a entender lo mucho que había mejorado su inglés todo este tiempo que habíamos estado separados. Como acto de nerviosismo, me encontraba toqueteando mi collar pensando en nuestra conversación de antes y lo mucho que la había fastidiado por mis pensamientos de miedo que poco a poco debía ir eliminando.

Aquel silencio únicamente fue interrumpido por el portero que se despedía de nosotros ya que le tocaba el turno a otro diferente que estaba casi que entrando por la puerta, el otro nos saludó y con la misma nos dirigimos al ascensor en busca de llegar al piso. Se me hacía un poco incómodo el silencio, porque quería hablar pero no sabía que era lo que exactamente debía de decir. Me miré en el espejo colocando un poco mi pelo y suspiré de manera que a penas se notara "¿Por qué eres tan estúpida, Kim Haneul?" Pensé mientras me observaba. Entramos en el piso después de bajarnos del ascensor y le miré en busca de saber que haríamos.

—¿Cuándo llegaste? —Preguntó con interés para después mirarme cautela como si llevaras pensado por un rato si deberías de preguntarlo. Por un momento sentí que la atmósfera entre ambos había cambiado, quizás, ir aquel lugar donde miles de sentimientos se encontraban para él fue mala idea.

—Hoy por la mañana.

—¿Necesitas ducharte? —Entonces entendí la pregunta. Estuve dispuesta a negar con la cabeza pero, desde que había llegado no había tenido ni tiempo de ir un momento a darme una ducha y la verdad es que lo necesitaba.

—Me gustaría mentirte para no molestar pero, realmente la necesito —le aseguré provocando una sonrisa en él al darse cuenta de que estaba cediendo— pero no tengo ropa de recambio...

—No importa, yo puedo prestarte algo de ropa —dijo convenciéndome del todo para ducharme allí y ser molestia por una vez.

Fuimos a su cuarto dónde me sacó unos pantalones cortos negros que según Jungkook le quedaban algo pequeños por lo que podrían quedarme bien, una camiseta blanca y un suéter gris —gracias a Dios tenía en mi kit de supervivencia ropa interior de recambio por si de imprevisto me bajaba el periodo— me tendió esa ropa junto a unos calcetines altos para que no pasara frío. Me dirigí al baño en lo que él mirabas algo más en el armario. Era un gran baño el que tenía en su cuarto; con una ducha de cristaleras algo transparentes de azulejo marrón simulando madera bastante grande fue lo que más me cautivó además del doble lavabo blanco con armarios de madera blanca clara con un gran espejo que recorría los dos, casi hecho para un matrimonio además de la taza y un pequeño armario para las cosas del baño.

Remember Him ↠ Jeon JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora