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Febrero, 2021.

Esquivé a las personas de los pasillos sin apenas disculparme con ellas por haberme chocado. Por mi mente solo pasaba Jungkook, su manera de salir de allí y lo muy preocupada que me encontraba por él. No encontré a Sonhyun por ningún lado y, ya que no me veía capaz de preguntarle a nadie más, me dispuse a ir directamente hacia el camerino en el que había estado anteriormente. Estaba segura de que era el único sitio donde él pudiera estar. La puerta estaba cerrada así que él se había encerrado ahí sin pensarlo ni dos veces.

Apoyé mi cabeza sobre la puerta sintiendo cómo la vista se me nublaba al escuchar a duras penas los sollozos de mi novio. Me estaba matando por dentro. ¿Tanto habíamos sufrido de verdad? ¿Era idiota sufrir por alguien a quién querías? ¿Estábamos haciendo algo mal?

—Jungkook, soy Haneul —dije como pude después de armarme de valor para abrir la boca.

—No quiero que sufras —la respuesta entrecortada de Jungkook tardó en llegar. Negué con la cabeza queriendo tirar la puerta abajo.

—Tampoco quiero que sufras, Jungkook —dije cansada. Quería que acabara todo de una vez—. ¡Ábreme!

—¿Me odiarás? —Preguntó entreabriendo la puerta un minuto después. Empujé con cuidado buscando abrirla.

—¿Cómo podría odiarte, tonto? —Exclamé estallando a llorar. Le rodeé con mis brazos y caímos sobre la puerta cerrándose de golpe.

Ambos nos abrazamos con tanta fuerza que comenzamos a llorar de nuevo. Lo único que se oía en esa habitación eran los sollozos de ambos y las respiraciones entrecortadas. Cada vez me abrazaba más y más fuerte como si no quisiera que me escapara de sus brazos, como si hubiera deseado que jamás me hubiera ido. Y me sentía culpable, tanto que me sentía fatal de haber vuelto, de haber entrado en su vida. Acaricié su espalda buscando calmarle.

—¿Cuánto has sufrido? —Pregunté separándome de él para mirarle a los ojos. Llevé mis manos hasta sus mejillas para secar algunas lágrimas. Me estaba rompiendo por dentro—. Me rompe el corazón que llores...

—Perdóname Haneul, por hacerte llorar —negué con la cabeza—. Perdóname por nunca haberte llamado, hablado y perdóname por dejarte sufrir sola...

—Yo tampoco lo hice Jungkook, no tienes que disculparte —le acaricié las mejillas—. ¿Por qué no dejamos de recordar el pasado? ¿Por qué no empezamos a pensar en que lo malo ya no está porque estamos juntos? —Porque, aunque me sintiera mal, no podía alejarme de él aunque sonara egoísta. Juntamos nuestras frentes.

Cada vez que Jungkook lloraba, sentía que el mundo iba a acabarse. Durante mi vida no lo había visto muchas veces llorar pero, las que lo había hecho era porque le dolía muchísimo. Como esa vez que lloró porque su padre recaía una y otra vez, fumando de nuevo, volviéndose agresivo. Saber que estaba llorando por mí me hacía sentirme la peor persona del mundo. Sabía que le había dolido mucho que me marchara de su vida.

—Te amo muchisisisisisimo Kim Haneul y me alegro muchisisisisimo de que estés aquí —sonreí ante sus inesperadas palabras. Aunque me sintiera mal, él hacía que todo estuviera bien, por eso nunca me podría alejar de nuevo de su lado aunque doliera—. Nunca más te vayas sin mí...

—Ya te dije que nunca lo haría y si lo hiciera, te llevaría conmigo hasta el infinito y más allá —colocó sus manos sobre mis mejillas para fundirnos en un beso.

Era contradictorio porque, a pesar de haber estado llorando por recordar el pasado, no podía evitar sentirme bien por saber que al menos ahora podíamos arreglar el dolor. Porque jamás podríamos estar separados y porque sé que Jungkook siempre me perdonaría por haberme ido y haber hecho la peor elección del mundo dándonos dolor a ambos. En cuanto nuestras miradas volvieron a reencontrarse, Jungkook limpió las lágrimas que recorrían mejillas. Jo, ninguno de los dos merecíamos llorar, teníamos que estar felices de volver a estar juntos. Olvidar el pasado.

Remember Him ↠ Jeon JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora