Remember Him ↠ Jeon Jungkook

❀ 017

Febrero, 2021.

—¿Se puede saber qué has hecho como para estar toda la noche fuera? Espero que hayáis...

—¡Eh! ¿La primera vez que nos vemos después de tanto tiempo? Ay mamá, somos jóvenes pero tampoco adolescentes —bromeé interrumpiéndola. En parte me esperaba algo así en cuánto Jungkook saliera por la puerta, mi madre era muy cotilla.

—Bueno cariño, eso tampoco es malo pero, me parece una decisión adulta de ambos —dijo con una sonrisa orgullosa mientras nos sentábamos en el sofá del salón. Me sentía algo observada y, estaba totalmente segura de que tendría que contarle con lujo de detalles lo que habíamos hecho—. Entonces, ¿qué hicieron?

Comencé a contarle cada una de las cosas que pasaron —obviamente omitiendo el detalle de la ducha ya que, aparte de incómodo, es algo bastante íntimo como para estar contándolo— mientras ella me escuchaba atenta deleitándose de nuevo por la genial pareja que hacíamos según ella. Una vez terminé de contar con algunas interrupciones por su parte ante mi monólogo para no olvidar ni perderse ningún detalle, el silencio se hizo presente por unos instantes.

—Me alegra ver que, a pesar de los años, seguís terriblemente enamorados —mi corazón comenzó a latir con intensidad ante esa palabra. Enamorados, era cursi pero, tratándose de mi relación con Jungkook, pensar en estar enamorados, era realmente fascinante—, estuve segura de eso después de que cumplierais dos años juntos, bueno, para qué mentir, después de ver lo contenta que estabas siendo su novia, brillabas Haneul, ni siquiera te imaginas cómo te veías y echaba de menos verte de esa manera.

Sonreí ante las palabras de mi madre sintiéndome la niña más afortunada del mundo de tenerla. Sus palabras me llenaban el corazón, me hacían ver que, a pesar de los años, todavía quedaban esperanzas para poder vivir una vida con Jungkook, porque, desde que nos conocimos no pude evitar pensar que mi futuro y el de él estaban cruzados y, aunque suene cursi, era una de las pocas metas que tenía en la vida, era lo único que no quería perder.

—¿Sabes? Yo también me alegro de que sea así porque, aunque suene cursi, quiero continuar con esto, tener algo como lo que papá y tú tenéis; una relación duradera y verdadera, una familia, la vida hasta que se os acabe juntos y es complicado de tener tan claro con a penas veinticuatro años y media vida por delante pero, tengo claro que no me quiero separar de él —añadí sin tapujos, olvidando que era mi madre y lo avergonzada que podría sentirme pero, ¿acaso era mentira? Para nada y tratándose de él, nada debería de avergonzarme.

—Es tan precioso lo que acabas de decir Haneul —admitió ella con los ojos algo brillantes haciéndome sentir algo culpable de que se emocionara. Me rodeó con sus brazos fundiéndonos en un abrazo y haciéndome recordar lo mucho que estos me reconfortaban—. Yo también deseo que eso pueda pasar, Jungkook es un gran chico, alguien que merece la pena compartir vida y también desearía que a demás de hacerte feliz, haga feliz a mis nietos —bromeó con la voz entrecortada provocando que me emocionara por un momento. No quería llorar pero, me sentía en ese instante, algo débil.

—Estoy segura de que así será —zanjé separándome de ella para limpiar algunas lágrimas que bajaban por sus mejillas. Rió avergonzada y la acompañé porque me parecía divertida la situación.

—Me has hecho ponerme sentimental, ya eres una chica madura que no necesita a mamá —sonrió añadiendo esas palabras. Seguramente, esa sensación ver que un niño crece para una madre, es un tanto emocional—. Quiero que le digas eso a Jungkook, lo mismo que me has dicho para que se dé cuenta de lo que quieres y después de eso quiero que vuelvas afirmándome que de nuevo sois pareja, no pienso aguantar que como bobos tarden años en volver a salir cuándo ambos lo desean, es más, estoy segura que tienes ganas de gritarle que lo amas y no sabes si es lo correcto por ese hecho —la maldita me conocía demasiado. Agaché la cabeza sintiéndome algo cohibida.