Pureza del corazón (Luhan)

XIII

Nyonba mira los ojos del capitán de los Mugiwaras con atención, ninguna sombra de titubeo o malas intenciones se refleja en su mirar.

- Luffy...- es lo único que la azabache puede pronunciar.

- Hebihime- le llama la peliplateada- Es mejor que pienses en una respuesta- los ojos azules de la emperatriz pierden un poco de su brillo- Y tú Monkey D. Luffy- este la mira seriamente- Es mejor que pienses mejor lo que estás diciendo.

- No tengo nada que pensar- dice para luego sonreír- Lo que digo es de verdad.

- Nyonba- habla Hancock eliminando el nudo en su garganta- Cuando Luffy tiene una decisión en su cabeza nunca la cambia, ya deberías saberlo.

- ¿Estás dispuesta a aceptar?- le pregunta ignorando sus palabras, lo sabía muy bien- ¿Teniendo en cuenta todo lo que podría pasar?

Mira a su amado fijamente, este le devuelve la mirada y sonríe con calidez, encendiendo cada fibra del ser de la shichibukai, estaba dispuesta a luchar por ella y por él, la persona que más le importaba en el mundo, al igual que sus dos hermanas, ellos significaban mucho en su vida, pero el azabache frente a ella, era el único hombre que había logrado desvanecer sus defensas, entrando en lo más profundo de su ser, en lo más profundo de su corazón.

- Mi vida ha estado llena de dolor, inseguridad, crueldad, he tenido que luchar para sobrevivir, cuidar de mis hermanas, gobernar este país y sobretodo, evitar que el mundo, el gobierno mundial se entere de mi pasado para no regresar a ese lugar, para no soportar todas esas humillaciones, todos esos abusos, todos esos momentos en los que nos recalcaban a cada segundo que lo único que éramos sería lo que nos perseguiría toda la vida, lo que nos priva de nuestra libertad... Estoy dispuesta a enfrentar al mundo entero por el simple hecho de querer ser feliz, de sentirme amada y no menospreciada, de sentirme yo misma, de poder tener momentos en los cuales me sienta libre...- ambos espectadores escuchan con atención a la emperatriz, el azabache se encontraba serio de repente- Acepto casarme contigo Luffy- responde sonriendo con un sonrojo sobre los pómulos de sus mejillas.

- ¡¿Lo dices en serio?!- se acerca a ella corriendo.

- No podría mentirte- admite sin dejar de sonreír.

- Las cosas se tornarán mucho más complicadas desde ahora Hebihime- habla la mujer que le ayudó en el pasado.

- Soy consciente de ello Nyonba- dice borrando su sonrisa, oscureciendo su semblante- Los momentos de paz serán nulos a partir de ahora.

- ¡Estoy feliz!- exclama Luffy emocionado- ¡Tengo que darle la noticias a mis nakamas!

- Y yo a mis hermanas y amazonas- dice la pelinegra- Para comenzar a planearlo todo.

- ¿Van a casarse ahora mismo?- pregunta con asombro Nyonba.

- Quisiera que fuera antes de que mis nakamas se fueran.

- ¡Faltan como tres días!- chilla Hancock- Además yo debo partir antes por la reunión.

- ¿Están diciendo que van a efectuar esa boda pasado mañana?, ¿El día antes de que Hebihime se marche?- pregunta perpleja la peliplateada.

- ¿Es muy apresurado?- pregunta nerviosa Hancock esperando recibir un consejo- ¿Lo posponemos para dentro de seis meses?

- ¡Es demasiado tiempo!- se queja Luffy- Además yo me encontraría con ellos en Saboady.

- Nyonba...

- Es tú boda y tú decisión Hebihime- responde- Pienso que es muy apresurado para que lleven a cabo esa festividad tan importante, pero en otros aspectos los tiempos y acontecimientos no lo permiten como lo desean.