EL HEREDERO DEL TIEMPO

La maldición del ángel negro

Yugi no sabe exactamente lo que pasó en ese momento, sólo recuerda que se había enfrentado a Diana y después... nada.
Aichi le había dicho que él fue quién los había salvado de una muerte segura, pero por alguna razón sabe que algo oculta, pero su amigo dice que debe ser porque había revelado un nuevo poder y está un poco exhausto.
Aunque no está del todo convencido; habían llegado al siguiente mundo,esta vez están en una de las ciudades de Japón donde ahí existe un deporte tan popular que había existido hace tiempo, un juego de trompos giratorios llamados beyblades. Varios niños jugaban hasta el cansancio y uno que otro joven para prepararse en el campeonato.
-Vaya. Llegamos a otro mundo- dijo Davis.
-Aquí no existe juego de monstruos- agregó Yugi.

Pero Nicole mostró una mirada melancólica.
-¿Sucede algo?- preguntó Kai.
Nicole sólo negó con la cabeza- no, no es nada.
-¿Qué les parece si caminamos un poco?- supuso Tai- es probable que veamos algo interesante.
El castaño se había percatado el cambio de ánimo de la chica, ya que en ese juego, le trae recuerdos tristes.

Llegando al centro de la ciudad, en un edificio muestra una gran pantalla que refleja una pelea de beyblade.
-¿Cómo se juega eso?- preguntó Yuri- Por lo que veo, es casi más que un juego para niños, puedo ver el sufrimiento en sus caras.
-Se llama beyblade- dijo Nicole sin despegar la vista de la pantalla- un juego de trompos que hace que tu espíritu sea libre, demuestra de qué estás hecho.
-¿Nicole, has jugado anteriormente?- pregunta Aichi.
-No. Pero conozco unas personas que saben jugar a eso y han participado en varios campeonatos. Pero...
-¿mmm?
Nicole bajó un poco la cabeza, esos recuerdos son una tortura para ella. Por más que trata de olvidarlo, no puede borrarlo.
Tai y Takato intercambiaron miradas, ambos saben su historia, pues ellos la conocen desde que eran pequeños.
En eso, Rika suelta un grito.
-¿Qué sucede?- pregunta Henry.
-Pues, miren en la pantalla- señala con el dedo y ven a un jugador que fue sacado de la plataforma junto a su blade.

"¡Y el ganador es Brooklyn!"

Dijo el arbitro por lo que la gente gritaron de emoción, otros de decepción, pues deseaban que perdiera ese joven llamado Brooklyn.
-Es muy fuerte- dijo Yuya.
-Posee poderes especiales- agregó Yuto serio- percibo un aura extraordinaria.
-¿No sería hacer trampa por tener esos poderes?- preguntó Tagiru.
-No a menos que tu oponente también posee lo mismo- respondió Taiki.

Nicole iba a dar paso hasta que chocó con alguien y dejó caer su blade color rosa.
-Lo siento- dijo la castaña.
-No te preocupes- respondió la chica.
Ambas levantaron la vista y sus ojos se encontraron, la chica tiene el cabello rosado y su vestimenta es un color rosa más claro china. Los ojos son dorados y filosos cómo los de un gato.
Nicole la miró sorprendida, pero después salió de shock para evitar que la reconozca, levantó su blade y se lo entregó a la chica.
-Gracias- dijo- un momento ¿no te conozco de algún lado?
-¿Eh?
-Por alguna razón te pareces a una niña que yo conocí, pero no estoy segura.
-No creo que nos conozcamos- sonríe.
-Tiene razón, de nuevo gracias- da media vuelta y se va dejando a Nicole sin aliento.
-¿Oye estás bien?- pregunta Takato.
-Por un segundo creí que me reconocería- dijo la castaña.
-Han pasado varios años, dudo mucho que te reconozca.- agregó Henry.
-Pero estaba a punto de decirle quién era realmente, pero no pude.
-No te aflijas- dijo Tai.

Haru percibe que Nicole está triste, una herida que aún no ha sanado después de tanto tiempo.
-Tengo hambre, hay que buscar algo para comer- dijo Davis.
-Vamos- agregó Tai.
**************************
Más tarde, la chica de ojos de gato se reune con sus amigos y les cuenta lo que acaba de ver.
-¿Qué dices? ¿Qué viste a una chica familiar?- pregunta uno de ellos.
-Sí. Pero no podía asegurar de qué era ella.- asintió la chica.
-Mariha, dudo mucho que esa chica se parece a ella- dijo un chico de cabellera larga y negra cómo la noche y ojos igual de amarillos de gato- recuerda que han pasado 10 años.
-Pero Rei, yo sólo...
-Mariha. Entiendo que no la puedes olvidar, pero ya es hora de qué aceptes la realidad y que no volverá- replicó otro chico de cabello negro corto con una apariencia de gato y ropa china.
Mariha no dijo nada, solo observa a Rei que trata de ocultar su tristeza.
-No menciones nada de esto, Tyson tiene que concentrase en el próximo encuentro que tendrá los G-revolution- dijo Rei serio.
-Está bien.
En la casa dónde se hospedan, hay un chico peculiar de cabellera azul y ojos cafés oscuros que miraba la luna, pudo escuchar la conversación de sus amigos.
Trata de no preocuparse por sus amigos, pero es inevitable no pensar en la persona que le fue arrebatada y tuvo que sobreponerse por varios meses antes del campeonato.
A continuación, ya en la noche, todos estaban dormidos, incluyendo él.
Poco a poco está teniendo un sueño, cuando era más joven, estaba corriendo hacia un parque y se detuvo para llamar a una niña de 5 años.
-¡Nicole!
-¡Tyson!
Ambos niños corren y juegan beyblade, después de varias derrotas y victorias, Tyson ríe.
-¡Gané! Y ahora tendrás que comprarme un helado grande.
-¡No es justo!- dijo la niña con un puchero.
En eso aparecen otros niños de la edad de Tyson, comienzan a jugar lo mismo hasta el cansancio, pero cuándo llegan a casa, se escucha una conversación muy seria, los niños espiaban detrás de la puerta dónde provenía las voces.
-No pienso dejar que se la lleven- dijo un hombre mayor.
-Sabe que no puede mantener a esa niña en este lugar- agregó otro hombre más joven.- ella es especial.
-Lo sé y es por eso que no quiero que se la lleven, Tyson y ella son cómo hermanos, sus amigos la protegen como su fuera de la familia.
-Señor, le dimos la custodia de la niña para poder encontrar a su verdadera familia pero...
-Ya sé, sus padres murieron aquél accidente y no sobrevivieron.
-Ella va a estar mejor en esa escuela, podrá controlar sus poderes.
-No. Nicole necesita de su hermano y de sus amigos...
-Pero no es su abuelo verdadero, y Tyson no es su hermano.
-Aún es muy pequeña para que lo sepa, jamás se recuperará si se entera que ella es adoptada.