Capitulo 16

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Estaba sumergida en el silencio, en el odio, en el desconcierto y en la venganza,  ¿Quién podía haberle hecho tanto daño a mis padres antes de morir?.
Por parte me sentía culpable porque sabía que el asesinato de mis progenitores estaba relacionado con la muerte de Dukan, ¿Pero quiénes habrán sido?

Habían pasado unas semanas y decidí quedarme en la casa de mis abuelos en Estados Unidos, necesitaba pensar y atar cabos para averiguar quién había hecho semejante atrocidad.

Valeria se había quedado conmigo como buena amiga y no se separaba de mi lado, mientras que Pol regreso a España por tema de trabajo, eso si, me llamaba dos veces al día. Nuestra relación era solamente de amigos aunque los dos nos deseamos con locura, pero yo no tenía mi cabeza como para tener un enredo pasional.

Hice muchas averiguaciones por Internet para saber más sobre la mujer que vino a la consulta de mi madre unas semanas antes de morir, estaba prácticamente convencida que ella tenía algo que ver.

De repente recordé que mi madre tenía un fichero con los datos de todos sus pacientes y decidí ir a su despacho en busca de información.

Tenía su nombre porque lo escuché a través de los medios de comunicación, se llamaba Linda Fernández Fernández. La noche que se presentó en mi casa sentí que Dukan discutía con ella y la llamaba "Linda", tonta de mi, creí que le decía así en modo cariñoso pero resulta que era su nombre de pila.


Entré en el despacho, encendí la luz y comencé a buscar entre los cajones y los archivos. Dentro de una de las cajoneras veo una llave roja que estaba suelta, me llamo mucho la atención y la cogí, pensé que a lo mejor era la llave del enorme armario que tenía en la oficina. Efectivamente era la llave maestra que abriría la puerta de mi esperanza. Busque los nombres por orden alfabéticos y encontré la ficha personal de esa mujer. Allí decía la dirección de su casa y un poco más de su vida, sus hijos, sus edades y cuatro cosas más, no tan importante. Pensé para mis adentros, "Que tía más estúpida, ¿Por qué daría toda su  información? Si ella venía a hacerle daño a mi madre lo lógico sería que se presentará con un perfil falso." En fin hay gente que no le da para tanto la cabeza.

Saque una foto con mi teléfono iPhone y guarde todo inmediatamente, antes de que alguien me viera. Menos mal que mi madre tenía su consulta en la planta baja de la casa de mi abuela.

Lo que no entendía era porque la policía no había registrado su consulta, quizás allí habría algo oculto que podía desvelar el asesinato.

Pues viendo el poco interés que llevaba la policía en el caso, decidí tomar rienda en el asunto, fui precavida y utilicé guantes de látex para no dejar huellas frescas, lo hice por la noche cuando todos dormían. Cerré la puerta y cuando me giré me doy un susto de muerte, Valeria estaba parada detrás de mi con los brazos cruzados y me dijo:

-¿Qué demonios hacías allí dentro?, ¿Y qué haces con guantes?

-Vayámonos de aquí y te lo explicaré todo.

Nos marchamos de allí y nos fuimos a la habitación de Valeria, allí le conté con lujo y detalle lo que quería hacer. Al principio no le gustaba la idea, decía que era muy arriesgado.

-¿Qué tal si es cierto que ella los mato? Pondrás en peligro tu vida.

-No soy tonta, tengo una arma -Valeria se quedó con la boca abierta -No te asustes aquí en Estados Unidos es normal que la gente lleve armas, mientras que este legalizada.

-Me da mucho miedo Priscila y si te mata.

-No pasará nada... yo tengo que hablar con ella, además yo se defenderme.

La mirada de Priscila (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora