Feliz Cumpleaños

7.6K 777 883
                                    

-Vamos Profesor- insistió Sean de manera pacífica.

-No- contesto Erik pasándole un frasco de mermelada de fresa a Wanda quien iba en el asiento del carrito de supermercado, la niña a su vez le paso el frasco a un Pietro rodeado de otros productos de la tienda.

-Será divertido- opinó Alex.

-Les permito que vayan a emborracharse durante todo el fin de semana en mi honor, ahora dejen de molestar- explicó con sencillez y sequedad para luego comenzar a empujar el carrito, necesitaba verduras.

-Necesita un descanso, conseguimos que Cassie1 cuide de Wanda y Pietro, Angel se ofreció a comprar el pastel, el dueño del bar dijo que a usted le daría una cerveza gratis y nos dejaría hacer el escándalo que quisiéramos, incluso la profesora Frost acepto ir- de nueva cuenta Sean intentó convencerlo.

Erik a veces se decía que nunca debió ser amable con esos mocosos. Detuvo el carrito súbitamente en el área de congelados volteando a ver a los universitarios junto a él. Trataba de imponerse más observándolos directo a los ojos; desgraciadamente su amenazante postura se vio interrumpida cuando alguien, que al parecer hasta el momento había estado agachado buscando algo en uno de los tantos refrigeradores, giro de forma brusca chocando con la espalda de Lensherr provocando que este perdiera el equilibrio para recuperarlo fácilmente al utilizar el carrito como soporte.

El mutante mayor quería ahorcar, mínimo, a quien fuera su atacante. Fue por eso que le dedicó la más fría de las miradas, mirada que desapareció al encontrarse con la confundida expresión de Charles, la cual cambio rápidamente a una de alegría desbordante.

-¡Erik!- Esa sonrisilla del otro. Siempre pareciendo tan feliz de verlo.

-Charles- el que no hubiera exteriorizado su felicidad tal como lo había hecho Xavier no quería decir que sus alumnos, metiches y observadores como solo ellos, se hubieran perdido de la satisfacción que estaba mostrando su profesor. -¿Qué haces aquí?- Erik quiso estrellarse contra la pared más próxima al darse cuenta de lo estúpida que había sido la pregunta. Estaban en un supermercado, lo que Charles hacia ahí era bastante obvio. Aun así el más bajito rio como solo él sabía hacerlo.

-Vine a comprar verduras- dijo mostrando la bolsa con brócoli y zanahorias.

-¡Profesor!- el saludo entusiasmado de Pietro y Wanda a coro se vio más intenso por el hecho de que el peliblanco comenzó a brincar en el carrito y la castaña inicio el balanceo de sus pies desde su posición sentada.

-¡Hola niños!-

-Estamos de compras con papi- explicó la pequeña.

-Ya veo- contestó Charles y entonces noto a los chicos que no apartaban su vista de él, desde su cómoda posición detrás de Lensherr. –Eh... Hola- decidió saludar. El primero en acercarse fue Sean con todo su misterio y naturaleza de adolescente incomprendido que lo rodeaba, le ofreció su mano a Charles.

-Soy Sean, él es Alex, somos alumnos del profesor Lensherr- el ojiazul tomo de inmediato la mano del universitario frente suyo.

-Soy Charles- Erik pensó que Xavier debería sentirse incomodo ante las intensas miradas que le estaban ofreciendo sus estúpidos estudiantes pero el hombre se veía fresco como una lechuga.

-¿Usted y el profesor Lensherr son amigos?- preguntó Alex. Charles dio una rápida mirada hacia el adulto junto a él y sonrió.

-Sí, lo somos- Esa forma que tenía el profesor de sus hijos de decir las cosas hacia que Erik tuviera la urgencia de sonrojarse, pero él era Erik Lensherr y por todos los cielos, él no se sonrojaba.

Matando la SoledadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora