El Regalo de esa noche

Pudin

Mi cabeza solo piensa en una cosa ahora; pudin, pudin, pudin, pudin. Busque por toda la cocina los utensilios necesarios para preparar un delicioso e inofensivo pudin. Ahora solo debía esperar.

- ¿Qué desastre es este? – mire a Loki en la puerta - ¿Qué estás haciendo?

- Pudin – respondí enseñando los dientes.

- ¿Pudin? – repitió.

- Si, de chocolate.

- Pudin – volvió a decir.

Había olvidado su fascinación por las cosas dulces.

- Alcanza para ti ¿si quieres?

- Loki sacudió la cabeza – ¿Si tú quieres compartir? – dijo desinteresado

- La verdad no quiero – Loki arrugo el entrecejo – pero no puedo dejarte con esa cara de niño antojado.

- Loki respiro hondo - ¿Necesitas ayuda con algo?

- Le eche un vistazo sorprendida antes de sacudir la cabeza – puedes bajar un par de platos de la alacena.

Loki se acercó a esta, mientras yo iba a la nevera. ¿Qué fue eso? ¿Ni siquiera protesto? aun cuando el comentario lo molesto, ha estado actuando extraño estos últimos días.

- ¿Sabes algo de Logan? – pregunto.

- Dice que están cerca, ya han atrapado un par de testigos – mire en la parte baja de la nevera – pero estará aquí para cuando él bebe nazca.

- Solo falta un mes – dijo.

- Así es – me estire para alcanzar él tuvo de crema, me detuve con un pequeño golpe en mi barriga, me quede quieta unos segundos, acaricie mi estómago.

- ¿Alex? – llamo Loki detrás de mí. Él bebe volvió a patear - ¿Oye estas bien? – parecía que en cualquier momento saldría, una larga mano se posó sobre la mía – está moviéndose – sonrió Loki. Su mano hizo presión empujándome más cerca de él.

- Sonreí - ¿Por qué solo lo hace cuando tu estas cerca?

- ¿Quizás por qué me quiere más? – respondió.

- Ya quisieras – reí. Arrastro su mano junto con la mía por mi vientre. Es casi como si él o ella quisiera estar aquí también. En el corredor se escucharon las pisadas en retroceso de alguien, aproveche de apartarme, observe a Loki confundida, me correspondió la mirada – vamos a comer.

Disfrutamos el pudin en silencio, al terminar tome ambos platos para lavarlos.

- Loki se apresuró quitarme ambos potes – Yo lo hare.

- ¿Por qué no me dices de una vez de que se trata?

- ¿De que estas hablando? – pregunto confundido.

- ¿Por qué actúas así?

- Loki sonrió para si mismo - ¿Te molesta?

- Incluso en este estado no para de reírte de mi – gruñí, me apresure a salir. Loki sujeto mi mano - ¡Suéltame!

- No me estoy riendo de ti.

- No me mientas – dije sin mirar.

- No lo hago – sus dedos masajearon en círculo mi mano – mírame – me negué – Alexa, por favor – susurro. Volví a sentir como golpeaba, casi como si me lo exigiera. Gire lentamente gire la cabeza – jamás lo haría.

Su mirada me esta matando, desearía besarlo, desearía que él me besara ansió tanto sentirlo tocando mi piel.

- Está bien – susurre rendida.

- Deslizo su mano hasta mis dedos y luego la dejo ir – bien – regreso a lavaplatos.

Iba de regreso a mi habitación, me detuve al ver a Jean hablando con el profesor, ambos se estaban sonriendo. El profesor alerto a jean de mi presencia.

- Hola, íbamos a la cocina por un aperitivo – dijo Jean sin dejar de sonreír.

- Preparé pudin – dije mirándolos con cautela.

- Grandioso – dijo el profesor – adoro el pudin.

- Yo también – sonrió Jean.

Ambos se marcharon con esas enorme sonrisas en el rostro. 

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