El Regalo de esa noche

El sueño de Loki

Entre a la habitación secando mi cabello con una toalla después de haberme dado un relajante baño, la deje caer y tomé mi lugar en la cama junto a Alex que leía un libro o fingía hacerlo.

- ¿Qué tienes?

- Nada – respondió con un torpe movimiento de cabeza. La obligué a bajar el libro, Alex suspiro antes de mirarme— ¿Extrañas Asgard?

 Esa pregunta me tomo por sorpresa

 - ¿Por qué lo preguntas?

- Llevas casi un año aquí y todo es muy diferente la vida que solías llevar, no tienes sirvientas ni los lujos de antes.

- ¿Tú no extrañas tu vieja casa?

- Es diferente, en ese lugar yo estaba completamente sola – respondió. Guarde silencio, es verdad que ella ya llevaba tiempo sola antes de que yo la conociera – ahora veo que tu evasión significa un sí – dijo desanimada.

- Yo no he dicho eso – tomé su rostro para que me viera a los ojos – todo es muy diferente, pero ese nunca fue mi verdadero hogar.

- Quizás eso sea lo que tú piensas.

- Sé que no era así Alex.

- No vamos a pelear por esta tontería – reclamo ella cruzándose de brazos.

- Estoy de acuerdo – dije. 

Me recosté dándole la espalda. No estoy seguro de cuanto tiempo paso en el que nadie dijo nada.

Todo está oscuro, aún puedo sentir como estoy de pie y como algo me impulsa hacia adelante. Puedo ver luz al final del pasillo y como esta ilumina las paredes del corredor y también puedo ver la silueta de dos figuras. Al fin llego a la luz, esta me ciega unos segundos hasta que finalmente puedo vislumbrar mi alrededor, todo se ve borroso y en un matiz blanco extraño. manos, estoy encadenado, miro por sobre los dos guardias. Tengo ante mí a Odín mirando tan severamente como siempre lo ha hecho.

- ¿Por qué estoy aquí? – pregunto. Odín se queda en silencio, sigue mirándome y siento que es con odio - ¡RESPONDEME!

- Estás aquí para pagar por tus crímenes – respondió.

Mire en todas direcciones, hay borrosas siluetas de lo que parece ser un público con enormes sonrisa y ojos ennegrecidos.

- ¿Mis crímenes?! Mis Crímenes No Son Nada En Comparación A Los Tuyos! – Odín seguía mirándome en silencio. Las paredes están contrayéndose, en un segundo Odín paso de estar sentado a estar parado frente a mi en el bifrost - ¿Qué hacemos aquí?

Odín se acerco al borde y señalo a las estrellas. Mire por sobre su cabeza, veo midgar, o sea la tierra, puedo ver a Alex despertándose y no encontrándome, está buscándome está pasando el tiempo y ella no me encuentra, mi hijo esta creciendo. Alex ya no me está buscando, esta enfadada, ya no confía en mí, ya no me ama.

- No, no, no.

- Jamás vas a volver.

- ¡NO!

Abrí los ojos asustado, Alex estaba durmiendo a mi lado, acaricie su mejilla, es real ,pensé aliviado. Me apresure al cuarto de Xiro, el también dormía, acerque una silla a su cuna. Me le que de viendo, nada nos va a separar no lo permitiré, no dejaré que me alejen de ti o tu madre jamás. Acabaré con cualquiera que lo intentey con quien sea que intete hacerles daño . Senti como una  delicada mano tocando mi hombro seguido por una dulce voz

 - ¿Qué te ocurre?

- Solo queria ver si estaba bien – respondi. Incline mi cabeza para acariciar su mano con mi mejilla, adoro su calor.