Te quedas inmóvil esperando la oportunidad adecuada, cuando divisas al soldado acercarse por tu costado con espada enpuñada en mano, te mueves rapidamente y lo tumbas al suelo. No se esperaba aquello, sus ojos estaban desorbitados y se veía asustado y perdido...
Sus ojos eran negros como el onix, nunca habias visto algo igual.
Pero rapidamente tomas su espada y se la pones en el cuello a aquel gran hombre.-----------------------------------------------------------
Decides degollarle - capítulo 14
Decides perdonarle la vida - capítulo 15
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Elige tu propia aventura "El Rey Sin Rostro"
Adventure¿Alguna vez has querido ser el capitan de tu propia historia, escoger tu camino y que las decisiones que hayas elegido marcan el paso del cuento? Pues esta historia es para ti. En la misma viviras la historia y cada vez que la leas tendra una trayec...