Enough ; Chenmin | Xiuchen

036

Lo que se debe borrar de la mente.

Yixing jugaba con su peluche favorito mientras Jongdae miraba por la ventana esperando el regreso su mamá de quien sabe donde.

Estaba preocupado. Su cuerpo estaba todo lo preocupado que era posible para un niño. Había quedado sumamente espantado cuando Yixing estornudó y de su nariz comenzó a salir sangre. Rápidamente lo limpió y lo calmó pero sabía que necesitaba a su mamá. Cuando después Yixing tuvo un ataque de tos y también un hilo de sangre rodó por la comisura de sus labios, Jongdae supo que su mamá debía estar ahí con ellos. Ya eran las 11 de la noche, y lo único que podía hacer Jongdae era asomarse por la ventana y darle un peluche a Yixing que le sirviera como distracción.

No tenían teléfono. Su mamá ni siquiera tenía muchas cosas en esa casa. Tenía dos habitaciones. Una donde los encerraba a él y a Yixing cuando lloraban y otra donde tenían prohibido entrar. Jongdae estaba seguro de que era porque no los quería dejar ver televisión.

—Dae —lo llamó Yixing y el mayor quitó su cara de preocupación para colocar una sonrisa. Siempre tenía que sonreír para Yixing, era lo único que importaba en su vida, lo único bueno que había en sus días—, ¿estoy enfermo?

Jongdae rascó su cabeza, dudó de su respuesta.

—Un poco.

—¿Y dónde está mamá? —preguntó porque siempre preguntaba eso.

—Salió, lo sabes —respondió Jongdae porque siempre respondía eso, porque tenía que aguantarse las ganas de decir "quizás esta noche nos abandone".

—¿Y si me muero? Nunca había escupido sangre —Jongdae negó y se sentó al lado de su hermano menor.

—Yo te estoy cuidando. No te va a pasar nada, ¿acaso no te sientes bien conmigo?

Yixing desvió la mirada y se encogió de hombros, abrazó a su peluche fuertemente.

—Me gustaría que mamá estuviera aquí.

A Jongdae también le gustaría que su mamá estuviera ahí.

Incluso más de diez años después a Jongdae le hubiera gustado que la persona que más odia en el mundo hubiera estado ahí para evitar todo lo que pasó.