Narra Ciel:
Después de lo ocurrido decidimos marcharnos a casa, a pesar de que Alois quería pasar mas tiempo con Nike y Erika.
Subimos al carruaje.
Alois, Hannah y Claude nos dicen adiós con la mano desdé la distancia.
Nike les dice adiós por ultima vez, cosa que me de rabia, antes de girarse.
- Que bien volver a casa, al fin...- Dice la agresiva suspirando.
- Si, la verdad es que ha sido un fin de semana intenso, pero al final a resultado bien.- Dice Nike con una sonrisa.
- Y también sabemos, que las noches de luna de sangre, Nike tiene prohibido estar separada de nosotros.- Mi prima abraza a Nike.- No dejaremos que te pase nada.
Yo cruzo los brazos y apoyo mi cabeza en la ventana. Estoy irritable y enfadado.
Me duermo hasta que Nike me despierta.
- Ciel, es hora de bajar.- Dice sonriéndome.
Bajo del carruaje y ella me sigue.
- Señor, he de decirle que el señor Lau ha venido.- Dice Sebastian sonriendo.
Suspiro, el que faltaba para acabar de irritarme.
- ¿Quién es Lau?- Pregunta curiosa Nike.
- Es un conocido.- Digo antes de ir hacia la puerta, donde me lo encuentro.
- Buenas tardes, conde.- Dice feliz mientras que la mujer que siempre esta con el me muestra una carta, aparentemente de la reina.- Tenemos que hablar.
- Antes de todo.- Digo cogiendo de la mano a Nike.- Te presento a Nike, mi prometida, y a Hikari, su hermana. A mi prima Erika ya la conoces.
- Es un placer.- dicen Hikari y Nike a la vez.
- Yo me llamo Lau y ella es Ran-Mao. Un placer.- Dice Lau cogiendo la mano de Nike y besarla.
¡Se puede saber que se cree! Abro la puerta de la mansión.
- Adelante.- Digo seco.- Si tienes algo que decir, cuando antes mejor.
Lau asiente y nos dirigimos a mi despacho.
- Sebastian, prepara el te.- Digo entrando en el despacho y sentándome en la silla.
Al parecer Nike y las demás están descansando o en la biblioteca.
Lau me da la carta y la leo.
- Ya veo... Así que las cosas se han descontrolado por aquí mientras yo no estaba.- Digo un poco mas calmado.
Sebastian aparece y nos sirve el te.
- Si, y la reina quiere que lo resuelvas. Pero como no podía contactarte, a trabes de unos conocidos, la carta llego a mi.
- De acuerdo, yo me ocupo.- digo dando el ultimo sorbo de mi te y dando por finalizada la reunion.
- Mantenme al tanto.- Dice antes de marcharse junto a la chica.
Sebastian entra para avisarme de la cena.
- Señor, la cena esta preparada.
- No tengo hambre. Me voy a descansar.- Digo y el no me replica.
- De acuerdo, guardare su parte para mas tarde.- Dice y se marcha.
Hoy no tengo ganas de nada, sera mejor que me vaya a la cama.
Me dirijo a la habitación y abro la puerta.
Nike esta sentada en la cama mirándome fijamente.
Entro y cierro la puerta detrás de mi. La verdad es que no tengo ganas de esto. Pero... Me siento en la cama.
-¿Ciel, te pasa algo?- Dice Nike. ¿Se ha dado cuenta?
- Nada.- Digo seco.
- Esa no es la cara de alguien a quien no le pasa nada.- Dice seria.- Sabes que puedes decirme lo que sea.
- No es nada.- Digo girando la cara. No aguanto su mirada penetrante por mas tiempo.
- Ciel.- Dice cogiéndome la cara para que la mire.
Me sonrojo y alejo su mano.-¡Deja de preocuparte ya por mi!- Digo enfadado.-¡Vete con Alois o Lau ya que al parecer yo soy un niño malcriado!
Nike me mira impactada.- Ciel...
-¡Esta noche dormiré en otra habitación!
Voy en dirección a la puerta y cuando estoy a punto de abrirla... Nike la cierra con fuerza y apoya su cara en mi hombro.
- Si es por lo que dije durante la pelea...- Comienza a llorar.-¡Lo siento!¡Estaba confusa y no quería matar ni morir por lo que dije lo que hizo falta para lograr mi propósito!
Sus palabras hacen eco en mi. Soy tonto. Y por ello mi hombro esta lleno de lagrimas de la mujer que amo.- Tal vez... Si soy un niño malcriado... pero por tu amor.- Digo girándome hacia ella y acariciando su cabello.
Levanta su cabeza. Sus ojos hinchados de llorar hacen que quiera pegarme por idiota.
Limpio las ultimas lagrimas que quedan en su rostro. Ella coge mi mano y la besa.- Aquí la única que es una niña malcriada por tu amor. Soy yo.
La beso.- Vamos a la cama.
- Pero no llevo mi pijama.
Cojo dos de mis camisas largas y le extiendo una.- Ten y vamos a dormir ya, que no puedo mas.
Me giro y ella se cambia.
Me toca la espalda y me giro.- Creo que los ángeles buenos de verdad existen, pues veo uno delante mío ahora mismo.- Me doy cuenta que lo he dicho en voz alta y me giro para cambiarme.-¡Gírate!
Se gira y yo me cambio.
-¡Jeje! Ahora la que ve un ángel caido soy yo.- Dice guiñándome un ojo.
No se la suerte que llego a tener.
ESTÁS LEYENDO
Basto con soñarte
FanfictionNike es una linda chica de dieciséis años, ojos verde esperanza y pelo color rosa pálido. La cual un dia se encuentra con un peluche abandonado en un descampado, al cual decide acoger y cuidar. Un dia cuando invita a su mejor amiga Hikari a pasar l...