Capítulo XXXI/II

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Narra Erika:

Son las 08:30 a.m. y ya estoy despierta gracias a Alois que me hizo ver el lamentable estado de Hikari y su habitación haciéndome incluso no poder dormir bien. Bueno, creo que de momento ire donde Hikari a ver que tal se encuentra hoy.

Cuando llego a la habitación de Hikari, Nike y ella estan a punto de salir de la habitación con un montón de telas.

-Hola chicas...

-¡Hola Erika!- Dice Nike dirigiéndose a la habitación de al lado.- ¿Vienes a arreglar los uniformes de las chicas?

-Vale.

-Pues vamos que esto pesa.- Dice Hikari en modo borde.

Entramos a la sala contigua y todas las demás estan esperándonos con unos horrendos vestidos.

-Ahora entiendo el porque de arreglar los vestidos.

-¡¿A qué si?!- Dice Nike sacando una pluma y papel.- Vamos a arreglar este desastre.

-¿Lo hacemos como la otra vez?- Pregunta Hikari.

-Si, porque no.

-Vale.- Dice Nike con las gafas puestas, no se si eso es algo bueno o malo.- Tendréis que darme el uniforme una a una para que lo tunee. Mientras os podéis tapar con esos camisones que he traído.

Media hora mas tarde los vestidos ya estan listos. La falda negra larga y sosa de entes ahora es un poco mas corta y con volantes blancos en los bajos, el delantal blanco ha pasado a ser del color favorito de cada una, la parte de arriba a pasado de ser blanca y negra a negra con un lazo y volantes de su color y volantes blancos en el borde de las mangas, y por ultimo, en vez del gorro blanco ahora llevan lazos blancos con volantes.

-¿Os gusta?- Pregunta Nike satisfecha.

-¡Siiii!- Responden todas.

-Estan perfectos.- Digo antes de darme cuenta de tres vestidos que sobran.- Pero... ¿Y esos vestidos?

-Eran por si queríais uno también.-Dice Nike cogiéndolos.- ¿Los queréis?

En ese momento Hikari y yo nos miramos cómplices. 

-¡Es hora de enseñarles lo que son vestidos de sirvienta!- Decimos a la vez mientras nos desnudamos.

-Eso es, ¡Vamos a enseñarles quien manda!- Dice Mire ayudando a Nike a cambiarse.

Nuestros vestidos de manga larga son cortos con volantes blancos en los bajos. El de Nike es rosa con el delantal y la diadema con volantes blancos, el de Hikari es azul con el delantal y la diadema con volantes negros, y el mío gris con el delantal y la diadema con volantes negros.

-Chicas,  actuamos de acuerdo a nuestro atuendo.- Dice Hikari con una sonrisa comprometida.

-¡Vale porque no!- Dice Nike tan inocente como siempre.

-De acuerdo, pero tienes que añadir un -sama cada vez que digas el nombre de alguien.

Salimos de la habitación y nos dirigimos al jardin para desayunar. 

-¡Buenos días!- Dice Nike tomando asiento al lado de Ciel.

-Buenos días...- Todos se quedan mirando nuestros uniformes.- ¿Y esto?

-No me gustaban los uniformes así que los he tuneado y, como ha sobrado tela he hecho unos para Hikari, Erika y yo.- La sinceridad es el punto fuerte de Nike, pero no la sutileza.

-Sabia que los modificarías y por eso los deje así. ¿Para que pagar cuando tu lo vas a hacer mejor?

Nike se sonroja y los demás asentimos.

-¡Gracias Ciel-sama!- Mierda lo ha dicho.

Ciel se sonroja hasta las orejas y yo me parto de la risa. Comemos tranquilamente, pero la parte interesante empieza,cuando justamente al terminar de desayunar Sebastian trae un paquete de Lau. 

-¿Que es?- Pregunta Alois apoyado en la cabeza de mi primo.

-Nada, hasta que te apartes de mi.

-Pero a Nike le dejas...- Dice este haciendo puchero.

Aquí es cuando me entra la intriga por el paquete y cojo a Alois sentándolo encima de mis rodillas.

-Así estas contento ¿No? Ahora abre el paquete.

Ciel abre el paquete y todos nos asomamos a ver. ¡Por todos los diablos! Esto no acabara bien...

Basto con soñarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora