Stup!d Prøject

38

- Kim Tae Hyung.

La voz algo aguda lo hizo erizar su piel en señal de incomodidad y de suspenso.

- D-Dariana...

- ¿Podemos hablar?

Iban a festejar 10 meses ese día ¿Por que debía encontrarse con la mamá odiosa de su novio?

- Claro que sí.

- Vamos a mi casa.

Dijo la chica enseñando el auto que se encontraba afuera de la facultad.

- Claro pero...

- Ya hablé con Jungkook, así que todo está bien, andando.

Señaló con la mano abierta el auto que los esperaba y Taehyung tragó hondo, seguro que después de esa charla, todo cambiaría.

- Vale.

Murmuró débilmente y obedeció.

Entraron los dos en el auto negro y salieron de ahí.

- Taehyung... Ah? Debería estar aquí, sus clases ya acabaron.

Jungkook estaba en el lugar dónde siempre se juntaban después de la clases pero, su novio no estaba ahí.

- Diablos.

Y tampoco contestaba el teléfono.

- ¿Dónde estás bebé?

Por algo tenía el presentimiento de que algo iba mal.

- Bien Kim, seré clara, deja a mi hijo en paz.

- Dariana yo no...

- Señora Jeon para ti, mira... Tal vez en un principio de trate bien pero sólo por que creí que serías uno más, pero ahora te estás volviendo en una piedra en mi zapato muy molesta, ahora sólo quiero deshacerme de ti, pero creo que no será necesario, ya que... Tú te irás solo ¿Cierto? No quiero que te metas más con mi hijo, debes saber que él merece algo mejor, pues tú mi amigo... No eres lo mejor, deberías saberlo.

Taehyung se sentía moribundo por las palabras que parecían golpes a su corazón mal herido.

Solo bajaba la mirada y asentía, había dos hombres detrás de él y la mujer estaba sentaba enfrente, estaban en casa de Jeon, sentados en el sofá.

- Yo...

- Shh, aún no termino, como sé que no quieres ver a mi hijo sufrir dentro de su casa, harás lo que te pida ¿Cierto?

- Pero-...

- ¿Cierto?

- Yo...

La mirada de Dariana era penetrante y muy filosa, pues Taehyung comenzó a temblar y los chicos de atrás que hicieron tronar sus nudillos, no ayudaban mucho a que se tranquilizara.

- Y descuida, ellos te estarán vigilando, sólo para asegurarme de que estés cumpliendo tu palabra.

Taehyung tragó hondo.

- ¿Trato hecho?

- Hecho.

Susurró con lágrimas en sus ojos y es que solo el pensar que esa mujer podía hacerle daño a Jungkook, lo ponía muy mal.

- Bien, ten una linda tarde... Cariño.

Besó su frente y lo abrazó hipócritamente.

- Nos vemos.

Taehyung se levantó y aún llorando hizo una reverencia para retirarse.

Abrió la puerta y...

- ¿Taehyung? Amor... ¿Que haces...?

Taehyung pasó de largo sin mirarlo y sin dejar que él mirase su rostro quebrado y lleno de lágrimas.

Jungkook quien de inmediato tomó su brazo preocupado, fue bruscamente a parar un manotazo en su brazo.

Con el rostro sorprendido soltó el brazo ajeno.

- Tae-...

- No vuelvas a tocarme... Nunca.

Ni el sabía cómo pudo tomar tanta valentía para decir esas palabras y sobre todo al decirlo sin pizca de broma o de arrepentimiento.

- Pero...

- Adiós Jeon.

Y de un portazo salió de ahí.

Dejando a Jungkook con la boca abierta y la garganta con un nudo.

Su corazón estaba ligeramente roto y ahora de a poco se iba quebrando más.

Perdóname Jungkook pero... Te amo.