PROMESA (KuroKura)

20. Ellas...

Veinte- avo capítulo

Un relato bastante inquietante con varias conjeturas.

El otro lado del escenario es revelado y mucho más...

¿qué sucederá ahora con su perturbadora compañía? Aliada o...

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--Pobre, debe de estar llorando ahora mismo. – Dijo con pesadez y sin expresión la mujer de huesudo cuerpo y vestido de camarera. Su aspecto no era el mejor, pero ahora al menos parecía totalmente presta a decir todo lo necesario.

Luel la miró desde el espejo retrovisor de su nuevo auto, el cual Kuroro se encargó de robar rápidamente--con suma cautela y precisamente con mucha desconfianza-- Su amarillenta dentadura brilló bajo la luz de la lámpara mientras decía: – Pero dijiste que Neón se encuentra inconsciente ahora mismo.

--Sí. – Ella respondió aun con el rostro demacrado y estático. –Entonces cuando despierte, seguramente empezará a llorar.

--¡Pero dijiste que no despertará a menos que se encuentre contigo! – Replicó, Luel sin ningún indicio de mantener la calma.

A la expectación de cuatro personas, quienes permanecieron en silencio. Su nueva invitada, parecía ser la pieza clave y a la vez. Un nuevo reto en medio de todo aquel caos...

Después de la partida de los cinco vagones restantes de aquel titán, que se llevó en su interior a tres miembros de la araña, Kurapika y a sus amigos. Una mujer de muy deficiente aspecto se presentó en su frente, ella tan agotada y deteriorada, se bajó de su motocicleta con una única petición.

--Bien, hemos conseguido un auto nuevo. Llevamos tu motocicleta en la parte de atrás y además estoy conduciendo hacia donde sugeriste... -- Kuroro habló con un tono sombrío.

--Llévenme con Neón. – Ella suplicó con los ojos desorbitados, claramente con un infinito miedo así como impotencia.

Sin dudar, no se atrevieron a decir nada ante aquella espeluznante imagen, casi todos sino fuera por un joven con aspecto andrógino. Lilianne, se separó del abrazo de sus dos mejores amigos y aun manteniendo distancia, dijo. – Disculpe señorita, pero nos gustaría saber su nombre. – Siempre tan tierno, concluyó con una tímida sonrisa.

Palabras suficientes para despertar la curiosidad de todos.

--Me dicen Nina...-- sus agrietados labios se movieron y emularon de mala gana una sonrisa.

Nadie pareció relajarse, pues no podían negar que ella era espantosa.

--Entonces la poderosa adivina Neón Nostrade, desarrolló nuevas habilidades después de recuperar su poder. – mencionó Kuroro y sonrió afablemente mientras aceleraba más el auto.

--Usted es el novio del mejor amigo de Neón...mmm... ¡Kurapika!— Nina respondió.

Ahora todas las miradas se clavaron en Kuroro y Luel no pudo evitar carcajearse sonoramente. Listo a decir una que otra imprudencia.

--Me honra saber que me considere de esa manera, señorita. – Por su lado, Kuroro no dejó que nadie dijera nada. –Pero me gustaría saber más de su conexión con la señorita Nostrade... Nina... si es que se llama así certeramente...

El día anterior.

23h: 00 (Once de la noche)