Capítulo Veintidos "No cambiéis"

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Capítulo Veintidos

Un estruendo proveniente de la parte de arriba llegó hasta nuestros oídos. Subimos corriendo las escaleras. Llegamos al cuarto de Olliver para encontrarme con una horrible escena. Mi hermano estaba lanzando cosas de su cuarto frágiles por toda la habitación. Estaba llorando pero a la vez furioso. Peter observaba la escena aterrorizado.

-¡Olliver!-.Grité dirigiéndome hacia donde estaba. Cogí sus manos ensangrentadas intentando impedir que haciera algo más. Comenzó a llorar de nuevo. Se soltó de mi agarre para después posar su cabeza sobre sus rodillas sin que se le pudiera ver el rostro angustiado. Lo abrazé.

-¿Pero qué está sucediendo aquí?-.Preguntó mi padre entrando corriendo en el cuarto.-Olliver...-.Masculló preocupado. Se sentó junto a él.

-¿Qué pasa?-.Preguntó esta vez Peter.

-Dejádme-.Susurró furioso.

-¿Pero te has vuelto loco? ¡Mira lo que has hecho!-.Dije observando toda la habitación detenidamente llena de objetos rotos.-¿Qué pasa Olliver?-.Pregunté. Negó cabizbajo.

-Pues que joder, ¿y si te pasa algo papá? ¿qué haré yo? Yo no estoy para encargarme de ellos ¿y si nos llevan con mamá? Yo no iré, pero tampoco  quiero dejarlos sólos. Erika te dejó tirado, porque sí. Joder, qué injusta es la vida-.Explicó.

-Olliver, tranquilo, no me pasará nada. Y si sucediera lo contrario, volveríais a Alemania-.Contestó mi padre.

-Yo no quiero irme-.Dije.-Tengo aquí amigos de los que no me podré olvidar así porque sí-.Añadí.

-Y no nos iremos, Paula. Mañana tengo una entrevista muy buena de trabajo que no puedo rechazar, así que si me aceptan evidentemente permaneceremos unidos aquí-.Dijo mi padre. Asentí.-Olliver, tranquilo, todo irá bien-.Añadió.

Y es que nunca había visto llorar de esa manera a mi hermano. Eran lágrimas que contenían rechazo, furia, desconfianza. A saber qué locura se le estaría ocurriendo a su mente desorientada llena de preguntas sin respuesta. ¿Qué le estaba pasando a esta familia? ¿Es que yo era la única que permanecía normal? Mi padre cansado, mi hermano enfadado y Peter raro. No había persona que los comprendiera. Pero sólo pedía una cosa, no cambiéis por favor.

Entre mi padre y hermano menor recogimos toda la habitación de nuevo. Curamos las heridas de Olliver y decidimos irnos a acostarnos.

Ya en la cama, llevaba una hora intentando conciliar el sueño, pero eso no iba a ser posible al menos durante un par de semanas. ¿Y si Olliver se estaba volviendo loco? Me estaba preocupando. ¿Pero y si mi padre le manda al psicólogo? No lo soportaría. Olliver no era así. Todo desde que llegamos a Bradford era diferente. ¿Cómo había podido ser tan rastrera mi madre? Además de revelar tal cosa a mi padre le cuenta que tiene una nueva familia. ¿Es que no tiene compasión? Qué vergüenza de mujer. Casi hubiéra preferido morir con esta mentira. Sin preocupaciones acerca de ese tema. Estaba aterrorizada. ¿Y si me la encontraba paseando por las calles de Bradford? Intentaría pasar desapercibida. ¿Pero ella? No la conocía apenas, ni ella me conocía casi. A decir verdad, quizá si quiera me llegaría a conocer. Al fin, tras un largo tiempo de meditación quedé completamente dormida entre las sábanas de la cama.

♡♡♡

Lunes. Dah. Genial. Uno de mis días favoritos (ironía). Me levanté de mala gana. Todavía los sucesos de ayer ocupaban mi estúpida cabeza. Me duché con pelo rápidamente. Saqué de mi armario lo primero que encontré. Una camiseta blanca para abrigarme un jersey azul marino, unos vaqueros claros y unas Converse del color del jersey. Me hice una coleta y me maquillé un poco. Cogí mi móvil junto a mi mochila y bajé. Se me había quitado el apetito por completo. Necesitaba despejarme. Decidí ir al estúpido instituto andando, no sin antes mandar un mensaje a mi padre. Todavía no lo podía creer. Había pasado de verdad. Incluso a noche probé a frotar mis ojos para ver si era una maldita pesadilla. Pero no. Nada de esto era una mal sueño. Era real. Mi madre era real, ella vivía.

Al fin llegué, donde Noah, Harry, Gemma y Niall esperaban charlando.

-¡Hola!-.Saludaron casi al unísono.

-Hola-.Saludé desanimadamente.

-¿Y esos humos? ¿Te has despertado mal hoy o qué?-.Preguntó bromeando Harry.

-¡No!-.Contesté de malos humos. Él elevó sus manos en señal de tranquilidad. Suspiré. Todos me miraban extrañados.

-¿Qué pasa Paula?-.Preguntó Noah. Negué cabizbaja. Y callaron hasta llegar cada uno a su clase. Pero antes de llegar a ella, alguien me cogió de la mano y me arrastró hasta una zona con poca gente.

-Zayn...-.Bajé la cabeza rechazando el beso. Frunció el ceño.-No estoy de humor...-.Mascullé.

-¿Qué te pasa cielo?-.Preguntó algo preocupado. Todavía permanecía su herida en la boca que tántos recuerdos transmitía. Suspiré. Y comenzé a contarle todo lo sucedido ayer.

-Y por eso estoy de mal humor...-.Terminé por decir. Acarició lentamente mi mejilla, clavando sus ojos miel en los míos.

-Cielo, no te preocupes, no pasará nada, estoy aquí para protegerte, tienes que ser fuerte ¿entendido?-.Intentó consolarme. Asentí. Me besó. Una media sonrisa se dibujo en mi rostro.

-Te quiero-.Susurré. Sonrió.

-Y yo-.Contestó. Me agarró de la mano y justo a tiempo llegamos a la primera hora de clase.

¿Cómo podía amarlo tanto? Zayn aparentaba otra cosa, pero por dentro era el mejor chico del mundo. Él era tierno, cariñoso, protector, y muchas más cosas mencionables. ¿Por qué la gente lo tomaba cómo una mala influencia? Yo lo conocía, no era así. Lo defendería pasase lo que pasase. Todavía recordaba aquel día en el que...

*Flashback*

Fuí hacia la pizarra y subí el escalón para llegar hasta ella, a un lado de ese escalón largo del fondo estaba la mesa del profesor. Me acerqué a la pizarra. Cogí una tiza. Noté como la mirada de Zayn se posaba en mí. Dejé la tiza. Me dirigí hacia mi mesa de nuevo. Me iba a caer bajando el escalón y Zayn a la velocidad de la luz me cogió. De manera que quedé apoyada en sus fuertes brazos.

-¡Ai! Uff gra... gracias...-.Dije tímidamente y me incorporé lentamente.

-¿Estas bien?-.Preguntó riendose.

-No ayudas-.Contesté.

-¿Te... te has hecho algo?-.Preguntó.

-Bueno... no, me... me has cogido...-.Dije.

-¿Segura?-.Preguntó de nuevo.

-Sí, gracias, tampoco es para tanto-.Dije y rió.

-Es peor lo tuyo...-.Dije mirando su puño lleno de heridas.-¿Qué te ha pasado?-.Pregunté. Se lo miró.

-Eh...-.Dijo.

La gente empezó a entrar en clase y se sentó en su mesa.

*Fin del flashback*

Seguramente ya lo habría dicho pero... lo amaba, amaba a Zayn demasiado, si nuestra relación llegara a un punto de inestabilidad, procuraría arreglarlo, si nuestra relación sufriera una de esas pequeñas crisis, la superaríamos juntos, tendríamos que ser fuertes. Porque no soportaría vivir sin él.

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¡Hola! Acho, no me había fijado en las leídas que tenía, son unas cuántas, ¡qué ilusión! Pero me gustaría tener aún más VOTOS y COMENTARIOS plsss. O si no, pues, recomendáis poorfi. Byeee loveees ♥♡♥♡♥♡♥

Strong {Zayn Malik}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora