Capítulo Treinta y cinco "El último día"

57 6 1
                                    

Capítulo Treinta y cinco

Desperte perezosamente en la cómoda cama del apartamento que habíamos alquilado en Londres. Hoy era la última noche que pasaríamos en Londres. ¿Que si tenía ganas de volver a Bradford? La verdad, no muchas. Estaba bastante cómoda aquí, y esto se acabaría en cuestión de horas. Mañana por la tarde nos iríamos, y eso sería muy pero que muy triste. Me encantaba Londres. Mucho. ¿Respecto a lo de Luke? Bueno, a noche no volvimos a sacar el tema, pero, sí era verdad que no paraba de pensar en si sería lo mejor estar con él como pareja. Tampoco lo quería herir rompiendo con él, pero como siempre Paula, eliges la opción correcta a todo, y lo tendría que solucionar yo solita. Había pensado en estar con él, y que la llama se encienda por sí sola enamorandome como una tonta de Luke, como él hacía conmigo. No sé si podría, pero lo mejor era disfrutar del último día aquí, sin más preocupaciones por ahora.

Me levanté y me dirigí a la cocina, donde se encontraba Luke ¿cocinando? Vale. Me eché a reír en cuanto lo vi junto a los fogones cantando. Se giró repentinamente con una cara divertida.

-Eh, ¿de qué te ríes?-preguntó divertidamente.

-De nada, de nada-contesté divertida.

-¿Ah, no?-preguntó imitando esa famosa frase nuestra. Reí negando.

Vino corriendo hacia mí y puso rápidamente mermelada de fresa en mi mejilla, no me dio tiempo a reaccionar.

-Eso para que no te rías de mí y de mi perfecta voz-reímos. Lo miré. Después miré hacia un bote de mermelada de arándanos. Lo miré de nuevo.

-Vale.

Pasaron unos segundos. Cogí el bote rápidamente y lo perseguí por toda la cocina hasta pescarlo. Eché la mermelada en su pelo. Reímos, y esto desencadenó una pequeña pelea mañanera entre risas y risas.

(...)

Mirándo tiendas era de lo que se trataba la mañana de hoy. Tampoco podíamos llevar a Bradford grandes regalos, así que llevaríamos algún detalle. No gran cosa, no nos cabría en la maleta. Nos dirigimos a un Starbucks donde una de las camareras anotó nuestros chocolates calientes. De repente mi móvil comenzó a sonar, y rápidamente lo cogí.

*Llamada telefónica*

-¿Si?-pregunté.

-¡Buenos días rubia!

-¡Nialler!

-¿Qué tal por ahí tortolitos?-preguntó esta vez una voz femenina.

-Ey, ¡Noah! No te pases-bromeé.

-Está puesto el altavoz, os hablan Gemma, Hazza, Noah, Nialler y Aëria-dijo Harry.

-¡Ricitos! Se os echa de menos.

-¡Aquí más!-contestó la peliazul. Puse el altavoz a la vez que les informaba de que lo estaba poniendo para que también escuchara Luke.

-¡Lukes!-exclamó Harry.

-¡Ey, chicos!-saludó el rubio.

-¿Qué tal todo?-preguntó Gemma.

-Muy bien-contestamos al unísono Luke y yo, a lo que nos reímos.

-Se ve, se ve...-contestó Niall. Reímos.

-¿Me traereis un regalo verdad rubios?-bromeó Harry.

-Nos lo pensaremos-contesté.

-Vale, que poca vergüenza, pensaba que eras mi mejor amiga-reímos.

-¡Ah por cierto Luke, tus padres han llamado preguntando por ti! Van a venir unos días-informó Noah a Luke.

-Bien.

-Os echamos de menos-habló Gemma.

-Pues aquí nada-bromeó Luke.

-No se ve, no debe de haber falta de cariño...-susurró Niall con Harry. Rieron.

-Mira que sois su... tontos los dos-reímos ante la rectificación de Luke.

-¡Ese vocabulario!-exclamó Niall.

(...)

Hoy habíamos decidido comer en casa, unas pizzas y a volar. Decía Luke que esta noche saldríamos, ya que sería la última en Londres.

Nos encontrabamos descansando un rato en el sillón, al fin y al cabo, esto de recorrer la ciudad todos los días era un tanto agotador.

Veíamos la televisión, Luke se había quedado dormido mientras que yo veía Gossip Girl, dios, me encantaba esa serie. El australiano se había quedado dormido viendo uno de los episodios que había puesto de Pequeñas Mentirosas, otra de mis series favoritas.

Luke se fue despertando poco a poco, despejandose en el pequeño sillón que compartíamos.

-Hola-sonreí.

-Hola-contestó él contentamente.-¿Has dormido algo?-negué.-Pues no sé cómo podeis aguantar tanto sin dormir, Noah tampoco se duerme.

-Te dormiste porque te parecía aburrida la serie, ¿verdad que sí, Luke?

-Um... ¡voy a ducharme!-se incorporó rápidamente a lo que yo reí.

(...)

-¡Al fin acabaste! ¿cómo es que Luke Hemmings tarde tanto en arreglarse?-bromeé. Río.

-Pues más te vale darte prisa tú, que tanto dices que tardo...-rió.

-¿Y si tardo?

-Entraré ahí y te sacaré.

Vale, eso ha sonado un poco acosador.

-Pues pongo el pestillo.

-Pues tiro la puerta.

-Pues no podrás.

-No sabes de lo que Luke Hemmings es capaz.

-Pues vale-tras unos segundos comenzamos a reír.-Vale me voy a duchar-comenté entre risas.

(...)

Deslicé por mis piernas mi pantalón ajustado color negro, para después ponerme la blusa verde y mi collar de la tortuga. Unos zapatos Superga de suela alta negros y una cazadora de cuero negra. Me maquillé y me alisé mi pelo no sé para qué.

Salí del baño. Las luces estaban apagadas. Tan sólo un conjunto de velas rojas en forma de corazón sobre la cama.

-¿Luke?-pregunté algo asustada. Lo llamé otras cuatro veces pero nadie contestó.

Dios, esto da miedo, susurró mi subconsciente. Me dirigí hacia las velas, en ellas había una hoja de papel doblada de color rosa. Su aroma a rosas llegó hasta mí. La abrí lentamente algo asustada.

Querida Paula,

¿Te acuerdas de mí? Sí, lo supongo. Te echo de menos, aquí en Bradford me aburro si no estás... ¿Vuelves mañana verdad? Y pensar que esta iba...

----------------------------

Hooooli, buah este cap si que es corto lo sieeeento. Es que había que dejarlo un poco interesting pa' que enganche ¿no? Weejejejejeje. VOTOS Y COMENTARIOOS PLS. Graaaacias a los que lo haceis de nueeevo.

Strong {Zayn Malik}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora