3.
—¿¡ Porque no nos sueltan!? —gritó Daniela un tanto asustada.
—Si no nos sueltan... sufrirán las consecuencias... —dijo Giovana tratando de aparentar ser valiente.
—¿¿Que quieren de nosotros?? —Frida comenzó a entrar en pánico.
De entre la multitud salieron dos personas: Sayuri y Ana.
—No queremos nada de ustedes –dijo Sayuri.
—¿E-entonces? —Frida estaba confundida al igual que nosotros.
—¡Los queremos a ustedes! —dijo Ana al mismo tiempo que todos se ponían en guardia y levantaban sus armas.
—¡¡Te juro que si les tocas un sólo pelo no vivirás para contarlo!! —Saúl estaba furioso.
Carlos dió un paso al frente para luego acercarse y apuntarle a Saúl con su bat de beisball.
—Entonces, ¿Porque no nos demuestras que tan capaz eres de defenderlas?
Comencé a contar de uno en uno a los que nos estabamos enfrentando.
—¡No es justo! ¡Ustedes son más de treinta y nosotros sólo somos seis!
—¡¡Eso a nadie le importa!! —Gritó Abraham un tanto fastidiado, acto seguido le dió un puñetazo a Daniela haciendo que su nariz sangrara.
Frida comenzó a llorar y trató de correr pero no lo logró ya que la sujetaban de los hombros, yo reaccioné y le dí un codazo al que me sujetaba a mi, este inmediatamente me soltó y se dobló sujetándose el estómago.
—¡Abraham! ¡¿¡¿Como te atreves a lastimar a Daniela?!?! —gritó Saúl abalanzándose sobre Abraham para golpearlo.
Todo el grupo nos rodeó para minimizar la posibilidad de huir, con algo de esfuerzo nos liberamos de los brazos de los que nos impedían movernos.
Nos atacaron todos al mismo tiempo con las armas que tenían: tubos de cañería, palos de hockey, bate de beisball y palos.
Daniela se hizo bolita en el piso en un intento inútil de no ser golpeada, Giovana corrió a ayudarla peleando contra sus agresores y Saúl golpeaba a todos los que estaban a su alcance, Jade por su parte halló una posibilidad de huir y corrió pero Soto estiró su pie frente a ella haciéndola caer.¿En dónde estaban las personas que habitualmente pasean en las calles? ¿Y la policía? ¿Nadie iba a ayudarnos?
Yo mordía a todo aquel que intentara atacarme, logré alejar a unos cuantos hiriéndolos en los brazos con una navaja de bolsillo; la batalla no duró mucho tiempo, pronto volvimos a quedar inmóviles siendo sujetados por más de cinco a la vez.
Alguien colocó sus manos alrededor del cuello de Frida y comenzó a asfixiarla, Martha y Casandra la arrastraron de lo pies y la metieron dentro de un saco negro; golpearon con un tubo de cañería a Jade en la cabeza, a Giovana le dieron un empujón demasiado fuerte y fue a dar de cabeza contra el suelo azotaron la cabeza contra el suelo; Alondra consiguió una pala, primero fue a por Saúl, luego Daniela y cuando se acercó a mi dudó un poco.
—¿Qué estás esperando? —reí—¡Venga! ¡Hazlo de una vez!
[]
Y eso hizo, el golpe me hizo sentir un dolor agudo que se extendía desde la nuca hasta nariz, después perdí el conocimiento. Menos mal que no querían matarnos, sólo dejarnos inconscientes.
ESTÁS LEYENDO
Hospital Psiquiátrico®
RandomGanadora del segundo lugar en "De Todo" en Summer Express Awards 2017 "El hospital psiquiátrico infantil Smirnov a diferencia de los demás manicomios, éste incluye una escuela en sus instalaciones, esto le otorga a los pacientes el beneficio de segu...