Hospital Psiquiátrico®

19.

No es bueno pensar detalladamente en las cosas, por ejemplo en la rutina, todos los días es lo mismo en este hospital, nos levantamos, nos dan el medicamento, asistimos a la "escuela", comemos, nos dan el medicamento, vamos a terapia, nos dan el medicamento y dormimos, todos los días llenos de medicamento que hasta duele la cabeza, quisiera hacer algo diferente pero no puedo, estaré aquí quizás por el resto de  mi vida haciendo lo mismo; aun así las personas fuera de aquí hacen lo mismo, la adictiva "rutina" envolvente, si mi vida fuera un libro y alguien lo estuviera leyendo en este momento, le diría que intentara hacer algo nuevo todos los días, no importa qué, solo tiene que ser algo diferente al día anterior, todos tienen la libertad de hacerlo.

De todas maneras, la rutina no es lo único en lo que me he puesto a pensar, también el tiempo, cada minuto, segundo, hora que pasa, nos hacemos más viejos, el tiempo no perdona, en una hora podrías estar desperdiciándola acostado o pensando como yo, mientras te tardas 5 minutos comiendo, podrías haber hecho algo más interesante como amarrarte las agujetas, alimentar a tu perro, etc.
El tiempo parece apresurarse para que pronto llegue su aliada, "la muerte" nuestro corazón es un reloj, cada segundo palpita, el reloj hace tic tac y el corazón hace tun tun, la diferencia es que el corazón se detiene y el reloj no.
La muerte es inevitable, egoísta, prematura, inesperada, traicionera, a veces le toca a las personas que aún no debían irse, que tenían cosas pendientes que hacer y terminan vagando eternamente en medio de los dos mundos, en cualquier momento puedes morir; si estás comiendo te puedes ahogar, si estás viendo el teléfono puede explotar, aún si solo estás parado, se te puede caer el techo encima, si estás en la calle te pueden asesinar, te puede tocar una bala perdida, puedes tomar una sobredosis de medicina accidentalmente, si estás en una cirugía puede que los médicos cometan un error fatal, etc, etc, etc, etc. La muerte está en todos lados, en todos, y no podemos hacer algo al respecto;

Así de miserables somos en esta maldita sociedad.