Hospital Psiquiátrico®

48.

Anhelo: Ni de chiste voy a bajar por esas escaleras

Giovana: Tienes que hacerlo! *la empuja*

Anhelo: Casi me caigo por tu culpa Giovana!😡 Si me cayera de estas escaleras moriría!

Giovana: Nos harías un gran favor a todos

Anhelo: 😬😬

Todos bajamos esas escaleras cuidadosamente, todo estaba parcialmente oscuro, parecía muy viejo y como si nunca hubieran limpiado, no había salida hasta llegar al final, había una puerta un poco más grande que cualquier otra del hospital y estaba reforzada con acero inoxidable; el juego de llaves que tomamos del escritorio tenía una separada por otra argolla y esa era la que encajaba con esa puerta.

Al momento de entrar no se veía nada pero de inmediato percibimos un olor tan putrefacto que me tuve que tapar la boca para no vomitar, al dar unos pasos más adentro, vimos la mayor atrocidad que podríamos presenciar en nuestras vidas.

La verdad pensaba dejar el capítulo aquí pero ya basta de tanto suspenso😅😂

El piso estaba manchado de sangre, había órganos por todas partes, repisas llenas de frascos con sustancias de las cuales solo se podían distinguir masas amorfas y amarillas; personas en contenedores, algunas sin ojos, otras sin piel y otras volteadas de adentro hacia afuera, era obvio que ahí practicaban la vivisección.

La escases de luz aún era notoria y aparte de eso no veíamos nada más, era como una de esas mañanas en la secundaria cuando aún estaba oscuro y tenía que acercarme para ver a las personas, de lo contrario solo veía sombras.

Frida: Donde estamos!!😱😨😨😭

Saúl: Es... un laboratorio

Anhelo: Estará Luis aquí? Quiero ver a Luis!

Giovana: Porque tanto interés rpentino en Luis?

Anhelo: Es que en su foto del expediente se veía guapo 7u7

Saúl: Dejen de pensar en Luis, la importante es Anel

Una vez estando en la mitad del laboratorio vimos unas mesas de fierro con más montones de cosas amarillas, organos y demás porquerías; el olor se hacía cada vez más insoportabale, se había impregnado a las paredes de ladrillo mohosas.

Estabamos explorando el lugar cuando Saúl se quedó tieso parado frente a una mesa.

Yo: Muévete Saúl

No obtuve respuesta

Yo: Saúl?

Miré su cara y estaba paralizado en una expresión que no puedo describir, sus pupilas se habían hecho muy pequeñas mirando fijamente hacia la mesa y temblaban un poco, su cara estaba pálida; miré la mesa para ver que había probocado esa reacción, entrecerré mis ojos para enfocar la mirada y entonces lo entendí...

Estaba el cuerpo de Anel, se veía algo desfigurado y tenía los ojos sobresaltados, su tórax estaba abierto mostrando las costillas, ahora su cabello estaba completamente blanco exepto un mechón, yo no sabía como reaccionar, miré el cuerpo por unos segundos y Saúl salió de su trance, se tapó la boca con la mano derecha y grito dos veces sin dejar de mirar a Anel; Anhelo y las demás intentamos tranquilizarlo.

Jade: Calmate Saúl! Van a escucharnos!!

Saúl: N-NO PUEDO! NO PUEDO!! E-ELLA ESTA...ESTA..!!!!!

Le tapamos la boca y lo intentamos alejar del cadáver pero el volvió a acercarse y besó a Anel en los labios.

Saúl: Anel... yo se que nunca me correspondiste pero aún si no me rendí, ahora te di el beso que nunca pide darte en vida y que tanto había anhelado...

Anhelo: Necrofilia! Necrofilia!

Yo: Silencio Anhelo!

Giovana Frida estaban abrazadas llorando en un rincón, Saúl seguía junto a Anel, Jade intentaba ser fuerte y mordía su mano intentando no llorar, Anhelo se apartó de nosotros y fué a llorar en silencio, yo sentí un nudo en la garganta pero no me permití llorar.

Seguí explorando el lugar hasta que vi un cuerpo dentro de un contenedor que me hizo soltar mi llanto contuvido, era el cuerpo de Daniela, lo habían disecado, abrí el contenedor para poder apreciarlo mejor, sus ojos no estaban y un dedo se había desprendido de su mano.

Yo: LOS ENFERMOS SO ELLOS NO NOSOTROS!! ELLOS HACEN ESTAS ATROCIDADES!!

Lloré pero no de tristeza, si no de furia, como era posible que todas esas enfermeras y doctores nos dieran un mal trato por estar enfermos y ellos quizás esten peor.