Love Live! The Legend Returns

43: Feathers

  Después de muchas quejas por parte de Riko, y gracias a una muralla de almohadas en medio de la cama, ella y Yoshiko pudieron dormir en paz. Aunque no duró demasiado, ya que fueron despertadas por Chika.

  —¡Riko-chan! ¡Yoshiko-chan! —gritó Chika, desde la ventana de su casa, que se encontraba justo en frente del balcón de la habitación de Riko.
  —¿¡Q-q-qué!? —exclamó Yoshiko levantándose de repente.
  —Chika-chan vive al lado, ¿No lo recuerdas? —dijo Riko, intentando calmarla.
  —Oh, lo había olvidado... Pero espera, ¿Por qué nos está despertando ella?—

  —Lo mismo me estoy preguntando.—

  Riko se apartó de la cama, dirigiéndose a la ventana. Del otro lado estaba Chika, aún con su ropa de dormir, y con una cara muy alegre.
  —¿Qué pasa, Chika-chan? —preguntó Riko.

  —Estuve pensando en algo, y quiero preparar una sorpresa para µ's.—
  —Era de esperarse que dijeras algo así, ¿Qué quieres hacer?—

  —Algo como una nueva canción, y cantársela de una forma inesperada, tal como ellas quieren hacerlo para Alisa.—
  —¿¡Nueva canción!? —exclamó Yoshiko, acercándose a la ventana.
  —Aún hay que hablarlo con las demás, pero me parece una buena idea.—

  —Entonces... —dijo Riko, tomando su celular—, es momento de llamarlas.—

  Mientras tanto, la hermana menor de Honoka, Yukiho, se encontraba en un asiento del aeropuerto. Se miró varias veces en un pequeño espejo que llevaba encima; no había cambiado mucho, ahora que se ponía a pensarlo. Seguía utilizando el mismo peinado, tal vez con el pelo unos centímetros más largo, pero su cara era casi igual.
  Pasaban varios minutos, y comenzaba a ponerse ansiosa, moviendo las piernas y jugando con una bolsa de dulces que había llevado para su amiga.
  —Disculpa —dijo la voz de una chica, detrás de ella—, ¿Te conozco?—

  Yukiho se dio vuelta inmediatamente, y quedó sorprendida por lo que vio. Una chica de su misma edad, rubia con un tono claro y cabello hasta por debajo de los hombros; tenía ojos color azul claro, que se veían hermosos; y estaba vestida de blanco y celeste. Definitivamente era Alisa, pero no fue eso lo que sorprendió a Yukiho.

  El brazo izquierdo de Alisa estaba enyesado, pero ella no parecía preocuparse por eso; apenas vio la cara de Yukiho, la reconoció y la abrazó con su brazo sano.
  —Te extrañé, Alisa. —dijo Yukiho, devolviendo el abrazo.
  —Yo igual, Yukiho. —respondió.
  —Perdón por preguntar esto —continuó Yukiho, separándose de ella—, ¿Qué te pasó en el brazo?—
  —Es una larga historia, ¿Quieres que te cuente en el camino a casa? —a Alisa realmente no le importaba la situación de su brazo, pero a Yukiho sí, ya que quería bailar junto a su amiga de nuevo.

  —¿Quieres venir a mi casa antes? —sugirió Yukiho—. Hay algo que quiero mostrarte. Ah, y te he traído algunos dulces. —le comentó, entregándole la pequeña bolsa que traía en sus manos.
  —Oh, gracias, ¿Son de tu tienda?—
  —Sí, los preparé especialmente para ti.—
  Las dos salieron del aeropuerto y tomaron el bus que se dirigía en dirección al templo, al llegar sólo tendrían que caminar unos metros. Se ubicaron en los asientos del fondo, y conversaron mientras Alisa disfrutaba de los dulces.
  —Entonces —dijo Yukiho—, ¿Cómo te ocurrió eso en el brazo?—
  —Oh, es menos grave de lo que parece, pero te explicaré desde el principio. Cuando volví a Rusia, continué tocando la guitarra, aunque con ayuda de mi hermana; llegué a cierto punto en que me invitaban a fiestas para cantar. Siendo sincera, me recordaba a cuando nosotras lo hacíamos.—
  —Ni tú ni yo queremos recordar eso, así que procede.—
  —Está bien. En estas fiestas solía ayudarme Eli, pero regresó a Japón así que tuve que seguir por mi cuenta. Y en estas fiestas, los escenarios no eran como los de un auditorio, eran muy simples y algunos no muy buenos. Uno de ellos en específico, tenía el suelo deteriorado y mientras cantaba, se rompió parte de la madera, haciendo que caiga hacia adelante, para el lado del público. Me golpeé fuertemente la pierna y brazo izquierdos, aunque afortunadamente, en la pierna solo sentí dolor por unas horas.—
  —¿Y no hiciste nada al respecto? Deberían mejorar las condiciones del lugar.—
  —Debí hacerlo, pero no lo hice. Y la razón por la que regresé a Japón es porque el tratamiento del yeso en Rusia, iba a tardar demasiado. Aquí, en cambio, cuesta menos y según lo que me dijeron, en pocos meses estaré en perfecta condición.—
  —Aún así, lamento escuchar eso. Es que yo esperaba que bailemos juntas de nuevo; es que ahora... ahora hay gente que quiere vernos, y que quiere que la veamos.—
  —¿Querías que seamos Feathers una vez más?—
  —No me trae buenos recuerdos, pero sí, resumiendo, es eso lo que quiero.—
  —Lo siento, es triste que mi lesión haya arruinado tu sorpresa.—

  El bus se detuvo y las chicas bajaron; seguida de Alisa, Yukiho caminó en dirección a las escaleras del templo.
  —No arruinó nada. La verdadera sorpresa, está al final de estas escaleras. —dijo Yukiho, situándose delante, haciendo señas a Alisa, indicándole que suba.
  Primero, Alisa la miró con algo de curiosidad, pero luego de unos segundos comenzó a subir. Yukiho iba detrás de ella, ansiosa por ver su reacción.
  —¡Harasho! —exclamó Alisa, completamente boquiabierta.

  Harasho... Uff qué lindo...
  ¡Vengo con nuevas preguntas respecto al nuevo fanfic!
  Hay varios lectores, amigos y miembros del servidor de Discord que me enviaron sus personajes, ya se formó el grupo de nueve principal, y un grupo rival de otras cuatro chicas. Éstas cuatro chicas tienen personalidades y diseños interesantes, que sería un desperdicio dejarlas como personajes secundarios.

  Se me ocurrió esto y quiero saber su opinión: Dos fanfics paralelos, con las historias de los dos grupos. Con actualización semanal cada uno y votaciones respecto a quién es la waifu de cada grupo y sobre qué grupo quieren que gane las competencias. Así tanto escritor, miembros del proyecto y lectores de este, pueden participar de cierta forma.
  A esto lo llamaría: Love Live! The Virtual Project.