"El Elemento Perdido #3: Tierra" ⚠️ Disponible Hasta El 31 De Diciembre⚠️

"CAPÍTULO 6"

Nathan y yo salimos del portal, aún seguía un poco aturdida por todo lo que había sucedido. Fue una fortuna que él y Daniela llegaran pocos segundos después, ambos estuvieron de acuerdo en que salir de ahí era lo mejor para mí, y quizá para todos los demás. Katrina estaba frenética, ya de por si el asunto de Adrián la tenía contra la pared, el haber descubierto que su hija podía salirse de control en cualquier momento, no fue de mucha ayuda. Lena quiso hablar conmigo pero Robert no la dejó acercarse a mí ni por error, y ella no puso resistencia alguna a las ordenes de su marido.

Nathan tuvo el portal listo en la habitación que era de las chicas. Si salíamos por la entrada principal o cualquier entrada, todos se me echarían encima. Apenas y fui capaz de percibir que habíamos llegado a donde los Zerkjis. Muchos se acercaron a nosotros y cuando se dieron cuenta de quiénes éramos, llamaron a Eric de inmediato. Vi las pequeñas formas corriendo hacía mi a través de la lluvia, Nathan me sujetaba del brazo como si fuera a caerme en cualquier momento, y realmente lo agradecía pues me sentía como una idiota en todo el sentido de la palabra.

—Oh dios mio, ¿pero qué te pasó? —Dëni me miró de pies a cabeza y me dio un fuerte abrazo— ¿Por qué tienes todos esos cortes?

Percibí el olor a lilas y supe que era ella. La abracé muy fuerte, no quería soltarla pues de una manera u otra me hacía sentir segura.

—Dëni —Nath la apartó—, hay que hablar adentro.

—Vaya sorpresa James —Eric no parecía estar muy contento de vernos—. Pasen al comedor.

—Vamos Alex —Dëni me tomó de la mano—, pediré que traigan algo para curarte.

Entramos al castillo y todos nos observaron sorprendidos, esperaba no estar dando el mensaje equivocado, no había ido ahí porque trajera buenas noticias, era todo lo contrario. Nos fuimos directo al comedor. Vanessa llevó una bandeja con agua y Sebastian traía algo que eran como vendas, pero que me curaran no era algo que fuera mi prioridad.

—¡Padre! —Georgiana apareció en la entrada, estaba empapada— Dicen que Alexia Vasilith volvió, ¿es verdad?

Nath se hizo a un lado para que pudiera verme y parecía que estaba viendo a una celebridad. Dëni se acercó a ella y puso sus manos en los hombros de la niña.

—Linda, ve a tu cuarto y cámbiate de ropa —miró a Eric nerviosa—, podrás ver a Alexia más tarde.

—Pero Dëni... —comenzó a protestar.

—Te han dicho que vayas a tu habitación Georgiana.

Eric la miró fijamente pero la niña no pareció ni siquiera intimidada; lo miró de mal modo y salió corriendo de ahí.

—Bueno —Eric se sentó en una de las sillas frente a mí—, soy todo oídos.

¿Y por dónde iba a empezar?, cada parte era peor que la otra. A Eric no le agradaría saber que Adrián había sido perdonado y que yo tuve ese arranque de ira con Katrina. Lo pondría a pensar de nuevo, lo pondría a pensar de nuevo que yo era un peligro.

—Dame tu mano Alex —Dëni me habló en voz tranquila—, vamos a limpiar esto.

—El Consejo decidió perdonar a Adrián —comenzó Nath—. Volverá al trono en unos días.

—¿Y tengo que estar sorprendido? —preguntó Sebastian— Todos sabíamos que eso pasaría.

—Además —Nath me miró como si no estuviera seguro de seguir pero ya qué más daba—, Adrián dijo ante el Consejo y todos los miembros de las cortes que Alexia no es su hija.

Dëni dejó de limpiar cuando escuchó a Nath. Eso también no era algo de lo que todos pudieran sorprenderse. Adrián iba a usar todo lo que tuviera a su favor, no importaba si eso significaba pisotear a todos.