Las consecuencias de una tarde lluviosa

No todas las reuniones familiares son tan aburridas

Narra Gintoki

Tras tanto tiempo de espera, al fin mi padre se había dignado a decirme qué diantres estaba sucediendo en su vida al igual que Eithan.

El día domingo, fecha en el que acordamos reunirnos llegó.

Kagura no se encontraba en la casa ya que se había quedado en casa de Soyo que había cumplido años.

Por lo cual me encontraba solo para enfrentar a esos dos. Hijikata me sugirió que podía acompañarme, sin embargo me negué, debido a que no deseaba que estuviera implicado en esto en caso de que todo terminara mal.

Mi único acompañante era Sadaharu, el cual no tardaría en sacarlo para que paseara por el barrio y se quedara un rato abajo.

Le di de comer para continuar con la limpieza de la casa, no era algo que me agradara y que tampoco tenía habilidades, había ocasiones en los que se me olvidaba separar la ropa de color de la blanca y terminaba haciendo un caos.

El timbre sonó, inmediatamente deje de hacerlo para ir a atender a la persona que llamaba, la cual seguramente era Eithan o mi padre,

Al abrir me topo con Eithan, me saluda, mientras lo dejo pasar.

Aprovecho que abrí la puerta para dejar salir a Sadaharu. El can se va para poder hacer sus necesidades y tomar aire fresco, en lugar pequeño.

Estaba por cerrar la puerta cuando noto que mi padre viene subiendo las escaleras.

Ninguno se saluda, tan solo le permito pasar para luego cerrar la puerta.

Hemos estado por varios minutos sentados en los sillones sin decirnos ni una sola palabra.

Ya me estaba hartando este silencio incómodo, así que decidí hablar.

—alguien me dirá algo, me darán contexto de que mierda pasa en sus vidas, por que saben que estoy harto de que ambos me oculten algo y siempre termino enterándome más tarde.

Luego de tanto tiempo de estar callado decido encararlos y exigirles la verdad.

—Vengo a informarles que luego de que la última opción que tenía para ceder mi puesto como líder de la organización renuncio.

—ni lo pienses padre yo no pienso tomar el puesto, y dudo que Gin también lo desee, ¿verdad?

—me sorprende que te hayas tomado con calma la respuesta de Kamui—mencionó

—Claro que me moleste, además su padre fue a hablar conmigo para pedirme que no dejará a su hijo con tal responsabilidad.

—¿Umibozu?

No esperaba que mi cuñado se reuniera con él para hablará sobre el futuro de Kamui.

—Entonces uno de nosotros tomaremos tu lugar.

—no, ustedes son inservibles, al que tenía altas expectativas renuncio.

—¿Qué hay de tu enfermedad? ¿por eso estás empeñado en buscar alguien que te seda?

—mi enfermedad no es tan grave, solo que, la enfermedad no me permite llevar mi rutina, el doctor me recomendó vivir cerca del mal para que no me enferme más. Es por ello, que tomé la elección de que tenía que buscar un heredero para poder cederle lo más rápido posible, ustedes fueron preparados desde una edad temprana, no obstante, prefirieron otro camino cuando ya tenían el suyo.

—jugar al decimo Vongola no era lo mío—respondo mientras me hurgo la nariz

—sabes que lo que me gusta es la moda.

—sí, sí, lo que digan, luego mis esperanzas estaban en los hijos de Kouka.

—el mayor al final dijo que no y la menor me respondió que si no tenía un harem de chicos guapos como Tsuna no quería nada, no entendí a qué se refería lo único que entendí que tampoco quería.

—En qué momento le preguntaste a Kagura.

—Hace unos meses atrás, antes de que acudiera con Kamui.

—entonces vas a disolver la organización—pregunto

—Claro que no, así que se lo dejaré a mi subordinado de confianza.

—te refieres a...

—Así es, lastimosamente no pudo acompañarme ya que se quedó a cargo del negocio.

Suspiro de alivio el recuerdo de ese niño no me trae buenos recuerdos. Y tampoco tenía ánimos de hablar de él.

—Entonces no es tan grave.

—no Gintoki, para tu desgracia aun no me voy al infierno.

—y tu Eithan, que querías hablar aquel día,

—a eso, era que, si me prestas dinero porque el tacaño de mi padre no me quería dar, pero Yoshida san me prestó amablemente.

—solo era, pensé que me dirías que en realidad eras un alíen o que me hablarías de otra cosa.

Al poco rato Kagura que se encontró en el camino a su hermano hicieron acto de presencia.

Ahora todos juntos ya parecía un intento de reunión familiar.

—Entonces su padres ni siquiera se acordaban de algo tan importante que la registraron mal.

—así es, al parecer su cumpleaños no cuatro meses atrás,

—espera que tan descuidados son tus familiares para no solo equivocarse en la fecha de tu cumpleaños por uno o dos días sino por meses.

—no se supone que para eso está el certificado médico—cuestiona mi padre

—nunca lo encontraron, son tan descuidados que ni siquiera recuerdan donde se quedó ese importante documento.

—yo diría que son negligentes—comentó

—el para qué cosa de que.

—ni idea que sea eso—responde Kamui

Ninguno de los dos hermanos sabía el significado de la palabra, nota mental: poner a leer un diccionario a esos dos.

— bien ya que te vas a retirar a donde iras a vivir.

—que no es obvio me iré a vivir a Cancún.

—genial podremos visitar al abuelo.

—si abuelo.

—mendigos interesados, así me hubiera gustado verlos cuando los invite a mi picana inflable.

El resto del día transcurrió en una especie de reunión familiar en la que nos contamos anécdotas graciosas hasta que jugamos Monopoly y Kagura terminó peleándose con Kamui.

—¡hey! Dejen esa discusión para navidad—alega Eithan

—Aquí no se celebra igual que en occidente, seguro ella se irá con su novio y su hermano quien sabe a dónde.

—Yo también tengo planes, estaré con mi novia en navidad.

—no te preocupes de acompañarte a comer... espera que acabas de decir.

—que estoy saliendo con una chica.

—¿desde cuándo?

—no se los dije, desde ayer—responde

—¿espera que?

—¡no! Esto debe ser una casualidad—murmura

—¿a qué te refieres Kagura?

—Soyo nos contó que empezó a salir con el chico que le gusta por favor dime que no eres tú.

—sí soy—respondió con orgullo

—date por muerto Yato.

Kagura se lanza contra su hermano desatándose una pelea.

Esperaba que esta reunión terminara peleando con mi padre, no ver a mis sobrinos peleando.