Sweet » Park Jimin [Types of Love #3]

diez

El auto se detuvo frente a la casa de YooJung y los cuatro bajaron.

—Muchas gracias por el día de hoy, Jimin.—dice YooSung con su sonrisa mientras estaba parado entremedio de YooJung y MinJung, a lo que Jimin le sonríe, asintiendo con su cabeza.

—Me caes bien.—MinJung sonríe, mostrando todos sus dientes con auténtica felicidad mientras elevaba sus pulgares.

—Tu también me agradas, campeón.—Jimin le desordena el cabello mientras el menor sonríe.

—¿Que les parece ir adentro? En un rato voy.—Les dice la mayor a los dos menores. Ellos asienten. —Aquí esta la llave.—YooJung saca del bolsillo de su chaqueta las llaves de la casa y se la entrega a YooSung.

—Adiós, chicos, nos vemos.—Jimin se despide de ellos y ellos se alejan corriendo.

—Gracias por el día de hoy, Jimin. Lamento si te molestó el que los llevara o algo.—dice jugando con sus manos, un poco insegura.

—No me molestó, linda.—Suelta una pequeña risa, a lo que YooJung se sonroja. Nunca le dicen de esa forma.—Además, son una ternura y muy educados, son iguales a ti.

Y era cierto, los pequeños no habían causado ningún problema. Los tres eran muy similares en cuanto a personalidad. Eran tranquilos, pero siempre estaban dispuestos a divertirse.

—Tsk, con el tiempo verás que son algo revoltosos.—dice riendo.

—Ya lo veremos.—sonríe y la mira por unos segundos, haciéndola sentir nerviosa. A sus ojos, YooJung es muy bonita. — ¿Qué día tienes libre?

YooJung lo pensó por un momento.

—Mm... El miércoles.—responde y Jimin sonríe. Ese día, su última clase era a las 5 de la tarde.

—Bien, nos vemos el miércoles a las seis y media y en el puente Banpo. ¿Te parece bien?—pregunta con sus manos en los bolsillos delanteros de su pantalón.

YooJung sonríe.—Me parece perfecto.—Y asiente con su cabeza.

—Entra a tu casa, hace frío y te puedes resfriar. —dice haciéndole un ademán con su mano para que entrara, a lo que ella asiente.

—Gracias por el día de hoy, Jimin.—Ella asiente dando unos pasos hacia atrás y luego se da vuelta con una sonrisa, caminando en dirección a su casa.

Jimin se quedó parado durante unos cortos segundos.

¿Ir o no ir?

Lo peor que podía pasar es que comenzará a ignorarlo.

Trotó con un poco de rapidez hacia ella y tomó su mano, volteándola.

—¿Qué...?—Y se ve callada, pero no por sus labios encima de los suyos, si no por el beso que había dejado en su frente y, por lo tanto, la cercanía que tenían.

—Buenas noches, Yoo. Descansa.—dice con su voz un poco más grave. Estaba utilizando su acento de Busan.

YooJung sonrió y lo miró.

—Duerme bien, Jimin.—Y besó su mejilla para luego darle la espalda y entrar a su casa.

Jimin sonrió con sus mejillas coloradas y caminó de vuelta a su auto cuando vio que YooJung cerró la puerta de su casa.

Fue un buen día.