¿Qué te hice?

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Blanca:

Regresamos al hotel después de reportar la desaparición de Ale y denunciar el asesinato de Gloria. Tuve que avisarle a la familia de ambas, nadie estaba en condiciones de hacerles saber lo que pasaba, ni siquiera la maestra que es nuestra encargada.

Ambas familias están de camino y me imagino cuan destrozadas han de estar; pues una hija está desaparecida en manos de un asesino serial y la otra está muerta.

Se suponía que el viaje sería para tener buenos recuerdos como grupo y resulto ser un viaje trágico.

Solo espero que Ale se encuentre bien, tengo mucho miedo de encontrarla como a Gloria. Realmente no creo poder sopórtalo.

Erik quedo de venir a ver como seguían las cosas después de ir a ver a su novia, no sé porque actúa siempre tan lindo conmigo si tiene novia, a veces creo que los hombres son unos malditos.

Está lloviendo muy fuerte por las calles ya vacías de México, así que decido que lo mejor será descansar. Mañana estarán aquí los papás de Ale para empezar la búsqueda de su hija, y claro está que nosotros ayudaremos, será un largo día.

Harry:

Entro a casa y lo primero que veo es a él bajando las escaleras.

-¿Qué haces aquí?- Es lo primero que pregunto. Pues se supone que debería de estar informándome de lo que pasa con las amigas de Ale

-Tranquilo. Solo vine a ver como estaban las cosas por aquí- dice sentándose en el sofá que está en la sala.

-Pues como puedes ver todo está bien, así que mueve tu culo lejos de aquí y mantenme informado de lo que pasé allá, no quiero fallas. Creo que sabes qué pasará si llegas a fallar, ¿o me equivoco?- me cruzo de brazos y él traga saliva sonoramente

-Claro que no, Harry. Me quedo muy clara la advertencia que me hiciste- Veo que se levanta y se dirige a la puerta.- Oye, los padres de Ale llegan mañana a primera hora, lo vi en las noticias y la buscaran hasta por debajo de las piedras. Creo que será mejor que se vayan de la cuidad-

-Para nada. Su cara estará por todos lados. Todo mundo estará buscándola porque corre mucho peligro a mi lado y no están equivocados. Ya tengo planes- me dirijo hacia la escalera y antes de avanzar al segundo escalón me volteo y le digo - Tienes 4 años a mi servicio. No los eches a perder por ella- sigo mi rumbo y escucho como es cerrada la puerta principal.

Abro la puerta de la habitación donde se encuentra Ale y la encuentro en la misma posición que cuando me fui. Siento que algo se apachurra en mi pecho al ver su rostro empapado de lágrimas.

Puedo notar su cuerpecito moverse violentamente debido al pánico que le provoca mi presencia. Trato de ignorarlo y me acerco para llevarla a mi cuarto. Creo que no es apropiado que esté aquí.

-Vamos, levántate- la tomo del brazo y ella empieza a tironearse. Era de esperarse.

-¡Déjame! ¡No me toques!- empieza a golpear mi brazo y no me queda de otra que cargarla como a un vil costal de papas.

La dejo sobre la cama y ella inmediatamente se recorre todo lo que puede hacia la parte del respaldo, puedo ver el pánico reflejado en sus ojos. Sé lo que está pensando y prácticamente me ruega con la mirada que no lo haga.

Le pongo llave a la puerta y me dirijo a la caja fuerte para guardarla. No es confiable dejarla a la vista de ella.

Me dirijo a la cama y me siento en el borde de esta misma, ella empieza a temblar y a mover la cabeza en negativa.

-Tienes solamente dos opciones.

1.-Nos metemos a bañar

2.-Repetimos tu bienvenida

Dime, ¿Cuál prefieres?- nuevas lágrimas recorren sus mejillas pero me mantengo en mi posición.

-Harry, por favor, déjame ir- dice en un tono de súplica y veo su labio inferior temblar ligeramente.

-Cariño. Esa opción no te la di. Está bien será la opción que yo quiera- Me levanto de la cama y me quito la camisa que llevo puesta, me estoy retirando el cinturón cuando escucho que dice

-Está bien. Elijo la primera opción- la miro con una sonrisa de victoria y ella solo baja la mirada hacia sus manos.

-Entonces, levántate y camina hacia el baño- lo piensa por un momento pero termina levantándose y haciendo caso a mis indicaciones

-Quítate la ropa- se voltea y me mira asustada. - Te dije que solo nos bañaríamos, y yo cumplo mi palabra-

-Pero, Harry yo cre...-

-Nada, quítate la ropa ¿o lo hago yo?- me mira unos instantes pero termina quitándose la ropa. Las lágrimas no abandonan su rostro y dudo mucho que lo hagan durante mucho tiempo.

Aprovecho la vacilación con la que retira cada prenda para mirar detenidamente cada espacio de su cuerpo.

Observo que tiene un lunar mediano en la parte izquierda de su cadera, su piel definitivamente es blanca y que en la parte inferior de su pecho tiene una mancha café, lo cual me imagino que es como un tipo de lunar.

Ella tapa su pecho con las manos por lo que veo aún mantiene su ropa interior.

-También ésa es ropa, cariño- ella me mira mal y un poco indecisa empieza a quitarla.

-Métete- deslizo la puerta y después de unos segundos ella entra. Abro el grifo y veo como su piel se eriza al momento de mi tacto sobre ella, sin embargo no dice nada.

-Yo puedo sola- dice alejándose un poco de mí. Rápidamente la tomo de la cintura y la pego a mi cuerpo. Su respiración se acelera notablemente y pone sus manos contra mi pecho. -Harry- dice casi en un susurro.

-Sé que puedes sola, pero prefiero hacerlo yo- empiezo a enjabonar cada parte de su cuerpo mientras ella solo se limita a quedarse quieta, aunque en algunas ocasiones hace el intento de zafarse de mi agarre.

Una vez que ambos terminamos de bañar salimos del baño y busque algo con que se pudiera vestir.

-Toma, es un bóxer y una camisa mía. Mañana iré a comprar algo de ropa para ti- le entrego la ropa mientras ella está parada a un costado de la cama envuelta en una toalla.

La toma y se dirige al baño. Escucho una que otra maldición debido a que la puerta no tiene cerradura. Me encargue de asegurarme de que no se fuera a encerrar en ningún lado.

Sale y la noto asustada.

-Acuéstate- le señalo la cama

-No quiero dormir contigo- me mira con odio.

-No te pregunte- respondo acercándome a ella quedando a unos centímetros de distancia.

-¿Qué te hice, Harry? ¡¿Por qué no me matas?!- sus lágrimas vuelven a aparecer, aunque dudo mucho que no hayan estado ahí anteriormente.

-¿Te acuestas o quieres que lo haga a mi manera?- baja la cabeza y pasa por mi costado para acostarse del lado derecho de la cama.

A pagola luz y me acuesto a su lado. Rodeo su cintura con mi brazo y ella empieza a tironearse, hago más firme mi agarre y solo escucho sollozos de su parte.

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** Malditos hombres xDDDDD**

Mi Triste Realidad- Harry StylesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora