Mi Triste Realidad- Harry Styles

¿Couvade?

           

Daniel:

-La herida no fue tan profunda como pensé, ya está lavada y desinfectada. Ahora solo tienes que mantener reposo y pronto sanaras- Levanto mi maletín del suelo y empiezo a guardar mis herramientas de trabajo.

-¿Cuánto crees que tarde en sanar?-

-Más o menos de 6 a 8 días. Depende mucho de tu cuidado- Veo que hace una mueca de desagrado, pero no me dice nada.

Estamos en la sala de su casa. No quiso subir a su habitación porque ahí está Ale y no quiere que esta entre en pánico. Lo veo un poco pálido, creo que no está comiendo bien.

-¿Harry, estas comiendo bien?- Sinceramente me preocupa su estado de salud

-Si. Lo que me ha pasado es que tengo constantes mareos y nauseas, así que todo lo que como prácticamente lo devuelvo a la media hora. Tendré que hacerme estudios o algo de esas mierdas.

No puedo evitarlo y termino riendo ante la idea de mi querido primo.

-¿Qué es tan gracioso, idiota?- Me mira molesto, creo que piensa que no tomo en serio su salud.

-No seas imbécil, Harry. Lo que tú tienes es eso que le llaman "Síndrome de Couvade" lo cual significa que tienes los síntomas del embarazo de Ale- él me mira con cara de pocos amigos y sé que piensa que estoy loco

-Deja de decir estupideces- Veo una débil sonrisa bailar en sus labios para después lanzarme un cojín. -¡Oye! Casi me vuelas la cabeza, idiota- Él solo ríe por mi pequeña actuación.

-Eres un idiota, ¿Sabias?-

-Claro, somos primos; eso viene de familia-

-Imbécil-Se levanta apoyando todo su peso en la pierna izquierda. Podrá caminar pero muy despacio, pues la herida a pesar de no ser profunda es de cuidado.

-Me voy. Tengo que recibir el embarque de marihuana y cocaína que llega hoy de New York. Cuídate y trata de reposar para que la herida sane más rápido. Cualquier cosa me hablas al celular- Me acerco a él y le doy un ligero apretón en su hombro, creo que es mi manera de despedirme de él.

-Sí, lo que digas- Avanza hacia las escaleras y empieza a subir lentamente.

Salgo de la casa de Harry y me dirijo al muelle para poder recibir la mercancía que llegará el día de hoy. Se suponía que la recibiría él, pero por obvias razones no podrá hacerlo.

Llego al lugar acordado y veo a los hombres de mi primo listos para recibirme. Me estaciono y bajo del auto, guardo las llaves en mi bolsillo y me acerco a Thomas.

-¡Hey, Thomas! ¿Qué tal?- Es un hombre que pasa los 60 años. Es un hombre de mediana estatura, pelo negro y unos ojos color gris impresionantes. Desde que tengo uso de razón ha estado a servicio de la familia incondicionalmente.

-¡Daniel! Que gusto verte por estos rumbos, tenía mucho sin verte muchacho.

-Harry fue herido y no pudo venir, así que tuve que venir yo en su representación-

-¡¿Qué?! ¡¿Harry herido?! ¡¿En dónde?! ¡¿Esta bien?!- Definitivamente este hombre es como un padre para nosotros.

-Sí, Thomas. Está bien, ahora se encuentra reposando en su casa, limpie y vende su herida. Estará como nuevo en un par de días. La policía nos alcanzó y uno de ellos impacto a Harry en un club, pero logramos salir de esa.

-Ese muchacho es tan terco. Ya le había advertido de esos clubes, pero no hace caso- Se rasca la nuca y puedo ver que su preocupación disminuye gracias a mis palabras.

-Yo también ya le dije, pero creo que han pasado algunas cosas que necesitas saber. Por ejemplo: Hace unas semanas rapt...-

-Señor. La carga ya está lista para ser recibida - fui interrumpido por Carlos, quien nos informó de la llegada de la mercancía.

Harry:

Entro al cuarto y no la veo por ningún lado. Estoy por entrar en pánico, cuando escucho un golpe sordo que proviene del baño; rápidamente me dirijo hacia el lugar y veo a Ale tirada en el piso. Con un poco de dificultad la tomo en brazos sintiendo dolor en mi pierna derecha, la recuesto en la cama y voy en busca del alcohol, mojo un poco de algodón y lo coloco en la entrada de su nariz.

Ella empieza a mover ligeramente la cabeza y abre poco a poco los ojos.

-¿Qué me paso?- se sienta y empieza a agarrar su cabeza con ambas manos

-No lo sé. Cuando llegue estabas tirada en el piso del baño. Lo más probable es que te hayas desmayado, pero esto no pasaría si comieras en forma- Me levanto y voy a guardar el alcohol junto al algodón

-Esto no pasaría si tú no me tuvieras aquí retenida contra mi voluntad- abraza sus piernas y veo sus ojos llorosos. ¡Oh no por favor! Ya va a empezar- Déjame ir, Harry. Por favor, no te denunciare pero déjame ir, te lo suplico- Quito mi pantalón y ella abre bien los ojos al ver la venda que cubre mi pierna manchada de sangre.

-Ya duérmete- me coloco un pantalón de chándal y me quito la camisa, pues acostumbro a dormir sin ella.

-No tengo sueño- se retira hasta el otro extremo de la cama y yo solo me digno a fulminarla con la mirada. Odio cuando huye de mí.

Estoy por meterme a la cama cuando siento un ligero mareo y nauseas, deprisa me dirijo al baño y Ale solo me observa con miedo y asombro.

Estoy inclinado en el retrete, mi estómago ya no tiene absolutamente nada para devolver. Me levanto y me cepillo mis dientes. No entiendo porque también yo tengo estos malestares de embarazada y no creo ni una chingada lo que diga Daniel sobre el síndrome de no sé qué madres. Salgo del baño y ella está sentada en el borde de la cama mirando hacia donde estoy.

-Creo que tú me pegaste esa enfermedad- Dice Ale con un poco de vacilación en su voz

-Oh, cariño. Claro que fui yo, solo que no es ninguna enfermedad- Ella me mira confundida y eso me divierte en cierto punto. Sonrió y puedo notar el enojo reflejado en su cara.

-¿De qué hablas?- su voz es casi inaudible pero alcanzo a escucharla.

-De que si no hubiera sido por mí, no estarías embarazada- Puedo ver que su respiración se detuvo por unos segundos para después ser acelerada y pesada, sus ojos están más que abiertos y me miran buscando una pizca de humor en mis palabras.

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<3 <3 <3 <3