[ Don't be so rude ] [ yuta ]

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"Papá se va a mudar con nosotras, es definitivo "

Guardo el teléfono en mi bolso. No me hace gracia el mensaje. Nada me hace gracia esta semana.

Ya es viernes y todo ha ido de mal a peor. ¿Qué maestro adelanta una semana los examenes y luego los vuelve a mover? Dejé de estudiar otras materias por la boba gramática. ¿Todo para qué? Para que nos avise en la mañana que el examen sí iba a ser hoy. Me siento con nauseas luego de intentar recordar tantas malditas reglas de uso.

Mi único consuelo es que veinte minutos más y seré libre.

Park sigue mensajeandose con Ten, esos dos ya están en algo. Park muy obvia y Ten ni lento ni perezoso.

-¿Eunri?

-¿Si? -es normal la extrañes en mi voz, no es muy usual que la delegada de la clase me hable. No he hecho nada mal esta semana.

-Toma. -extiende un par de carpetas. -Son de Yuta, ¿las puedes llevar a su casa? Llevan mucho tiempo en sala de profesores y como no ha venido en los tres pasados días, pensé que podrías llevarlos.

-¿Por qué... Yo?

-Eres su novia. -se encoje de hombros. -Informale de las actividades que se ha perdido, el examen de ahora y profesores quieren que le recuerdes que los trabajos no son para dejarlos guardados en sus cubículos. De antemano, gracias. -hace una pequeña reverencia y se va antes que pueda decir algo.

¿Ahora soy mensajera? No me jodan mas. Park deja su celular y me mira burlona.

-Ni lo intentes, no estoy de humor. -guardo las carpetas en mi mochila. -Además no soy su novia.

-Por eso tu mal humor. -toma de nuevo su celular.

Ruedo los ojos y ella me mira con una ceja alzada. Estúpida Park.

-Mejor pídele a Ten su dirección, ¿creen que soy adivina o qué? No sé dónde vive.

Mi enojo puede aminorar si no voy directo a casa. Entre ver a mamá tratar de complacer en todo a papá o ir a una casa japones, elijo cien veces la casa japonesa.

-Te la reenvíe a tu whatsapp.

-¿Ya? Wow. Increíble. Asombroso lo que hace la gente por amor.

-No soy yo la que va a ir a la casa.

-Te mueres por ir a la casa del tailandés. -intercambiamos miradas, pero terminamos rodando los ojos cuando la campana suena. -Me voy.

Tomo mis cosas y reviso la dirección, por suerte esta a casi medio camino. Cerca de mi casa, a mitad de mi camino a la escuela. Eso explica porque la vez que vino por mi doblo en dirección contraria... ¿Quería llevarme a su casa? Woah, nada dormido este chico. Pero de ese día solo tengo mal recuerdo, papá regresando no es de mis recuerdos favoritos, pero que se quede a vivir lo es menos. Aunque mamá se vea más feliz.

Tontos número de las casas, son muy pequeñas. Doy un par de pasos más y un lindo chico llama mi atención. Quizá un par de años menor, pero es muy alto y guapo ¿qué le dan de comer a los niños estos días?

El chico levanta la cabeza y busca algo en el cielo, el control en sus manos me indica que esta jugando con un dron, pues el chico sentado en el césped le da indicaciones hacia donde debe moverlo. Ambos chicos sonríen complacidos y que lindas sonrisas. Insisto, ¿qué tienen los niños de ah-

-¡Oh! -señalo al chico en el suelo. Si no me equivoco es el hermano de Yuta. -Disculpa...

Ambos chicos me miran.