[ Don't be so rude ] [ yuta ]

E N D

Lo último que dijo fue "esto te va encantar", pero por mucho que ame sus manos cubriendo mis ojos no puedo sentir mucho amor al hecho de caminar a oscuras y con la incertidumbre de no saber si me voy a caer o golpear con algo.

-Listo. -deja un beso en ni mejilla, sobresaltándome.

Quita sus manos de mis ojos y mi visión es más lenta que mi audición.
Porque lo primero que distingo son sonidos de cornetas y una melodía de cumpleaños.

Me quedo de pie, observando a todos. No miento, todos mis las personas que quiero estan aquí.
La mano de Yuta envuelve la mía justo en la parte donde cantan mi nombre y me abraza desde atrás susurrando "feliz cumpleaños" cuando los confetis vuelan por el aire y caen en el césped.
Una suave melodía llega a mis oídos, combinando con la linda decoración de varios colores.

No sé que decir, solo llevo mis manos a mi boca e intento no llorar de la emoción. Esta es mi primera fiesta sorpresa. Y, joder, es hermoso. Me siento genial.
Me aferro al ramo de flores y antes de que pueda intentar de decir algo, todos se acercan a darme un abrazo.

La familia de Yuta primero, luego Park, la mamá de Park, Ten, Jaehyun, Johnny -que me parece un poco sorprendente verlo acá, pero es un chico con tan buenas vibras que es imposible no alegrarse de verlo-. Y todos mis niños favoritos: Jaemin -quien me abraza de nuevo-, Jeno y Renjun; cada uno de llos diciendo algo lindo sobre mi. Más conmovida no puedo estar, más hermoso no puede ser esto.

No sé ni en que momento el arreglo de flores terminó en la mesa.
¿Cuándo pasó todo esto?

-Está sin palabras. -dice Jaehyun con una risa de burla.

-¡Oh, mirala, Yuta! Va a llorar, lograste lo que querías. -secunda Park.

-La verda-

-¡Y eso que aún no me ha visto!

Oh, joder. Esa voz.
Me giro de inmediato.

-¡Por acá, Rinny!

La sonrisa gigante de Doyoung me impacta, casi tanto como la bolsa gigante que trae consigo.

-¡Bunny! -extiende sus brazos y corro hacia él.

-A que soy tu mejor sorpresa. -dice dejando un beso en mi cabello.

-No, esa soy yo. -No hace falta girar para saber que quién me aparta de sus brazos antes de que siquiera pueda devolverle el abrazo de manera adecuada.

-No lo creo. -niega sonriente y toma mi mano. Puedo escuchar las risas de atrás.- Rinny, hablé con tu mamá. Va a llegar pronto.

-Era parte de la sorpresa, niño conejo. -una ve más soy alejada por Yuta, quien rueda los ojos con desdén.

-¿En serio? -mi corazón se alegra. Era justo lo que me faltaba para completar el cuadro perfecto. Mi cuadro perfecto.

-Si el dienton no lo hubiera arruinado, hubiera sido mejor. -dice Yuta con tono casual.

-Si, bueno, más respeto para el mejor amigo. -se retira un momento a dejar la bolsa en una silla, sin dejar de darle una mirada a la defensiva a Yuta.

-¿Ustedes de dónde se conocen? -es demasiado extraño la manera tan familiar que tienen de tratarse, teniendo en cuenta que nunca los presenté.

-De-

-Tenemos que hablar luego. -dice Doyoung, interrumpiendo a Yuta,  antes de que Momoka atraiga nuestra atención al entrar con un lindo pastel y dejarlo en la mesa del centro.