Be My Next Victim (Damon Salvatore's Fan Fic) | EDITANDO |

Capítulo 25

–Damon enserio? – pregunté molesto a lo que él respondió un irónico "¿Qué?".

–Cómo qué? Tienes a una chica encerrada ahí abajo! Y conociéndote, eres tan cruel que le estas drenando la sangre de a poco! –apelé verdaderamente irritado, odiaba que fuera así.

–Y que esperabas? Que me alimentara de animalitos? Que comiera ardillas y todo eso? Ay por favor Stefan, somos vampiros. – Dijo frunciendo el seño, como si fuera algo obvio.

Esa era su justificación para todos los horrores que cometía. Con mucho enojo, me dirigí hasta el sótano de la casa, donde se encontraba la celda y a medida que me acercaba, su olor se hacía más fuerte, el olor de su sangre, hasta se me hacía familiar...lo que era muy raro.

Damon dejó de seguirme, y subió a la planta superior indignado. Abrí la fuerte puerta de madera y hierro, encontrándome con una chica, una chica que hizo revivir muchas memorias en mi cabeza.- No puede ser- dije internamente, realmente no puede ser cierto...

Ella me miró con miedo y se removió un poco en su lugar. –Tranquila, no te haré daño si? Te ayudaré a salir de aquí– dije acercándome con cuidado y ayudándola a levantarse.

–P-Pero y Damon? –preguntó intranquila.

–No te preocupes por él, saldrás de aquí. –

Luego de esto, la ayudé a salir de la casa, y la acompañé hasta afuera. El sol aún estaba alto y Damon no podría salir sin su anillo. Ella estaba confusa, me lo decía su cara, solo intenté brindar confianza y tranquilidad, hasta que nos despedimos, y rápido, fugó lejos de aquí.

Me quedé en la puerta pensando unos minutos. ¿Cómo puede ser que sea idéntica a ella?

Volví mi vista a un punto a lo lejos, por donde ella había huido, y una pequeña sonrisa al igual que un rostro lleno de confusión e intriga se formaron en mi.

–Vaya, San Stefan llega para salvar el día, no hermanito? –Escuché desde adentro.

–Cómo es que puedes ser tan cínico? Acaso es que nunca cambiaras? Matas a personas inocentes por pura diversión, enserio eso te hace feliz? – Él solo rodó los ojos y volvió a mirarme.

–¿Ya tienes mi anillo? –preguntó evadiendo el tema. –Recuerda lo que pasará si no me lo devuelves. Tienes hasta el atardecer, luego de eso, atente a las consecuencias. –Advirtió y subió a su cuarto, a lo que yo solo negué con la cabeza.

Supongo que no tengo alternativa.

Damon:

¡No puedo creer que el idiota de Stefan la haya dejado ir! ¿¡Porque demonios tenía que venir!? La tenía, ¡Era mía! ¡Maldita sea!

Tiré uno de los antiguos adornos que había contra la pared, provocando un fuerte estruendo y que luego este callera en pedazos al piso. Agarré mi pelo con frustración y no paraba de pensar que ya no tenía a Tn, ella era especial, por eso no la maté. Es igual a ella, no podía permitir que volviera a huir de mí, y mucho menos por el imbécil de mi hermano.