16. Sensible.

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-No me jodas. ¿Hasta con un chándal?

Agustín hizo una expresión graciosa.

-Sudada, y con unos shorts... y camisa... hum... - rodó los ojos. -sí, sí, definitivamente sí. - ella le desabrochó la camisa, hasta quitársela. Recorrió el cuerpo de él, con la manos, hasta llegar a la hebilla. Agustín la ayudó, quitándose los zapatos y los pantalones.

-Tengo frío. - musitó ella. Eso bastó para que Agustín apartara las sabanas y se metieran los dos debajo.

-Hum... así mejor... - dijo tapándolos a los dos. El calor emanaba de ambos cuerpos. Agustín la levantó un poco para quitarle el sujetador. -A pesar de llevar cuatro años juntos, me sigue fascinando verte desnuda... - dijo observándola. -eres... eres... espectacular. - Agustín le quitó las bragas de un tirón. Antes de volver a la altura de Carolina, le dejó un pequeño beso en el Monte de Venus. Carolina buscó el borde de su bóxer y lo bajó.

-Y dicen que el deseo entre una pareja de termina a los dos años de estar juntos... - musitó Carolina, mirando a Agustín a los ojos. Él se echó a reír.

-Pues te puedo asegurar que el nuestro no se apagará nunca.

-¿Ni a los ochenta?

-Ni a los ochenta, ni a los noventa. Llegaremos a los cien y seguiremos haciendo el amor como salvajes. - Carolina de rió a carcajadas. Agustín adoraba ese sonido... adoraba verla reír, simplemente, verla sonreír. Verla feliz, feliz a su lado.

-Nos dará un paro cardíaco.

-Pues que nos lo dé. Al menos nos agarra mientras nos queremos... - Carolina lo miró, emotiva de nuevo. -oh, veo que hoy estás sensible.

-Es que tú me pones sensible. - Agustín no dijo nada más, sólo la besó. Mientras buscaba la ya conocida entrada a su cuerpo, mientras la penetraba, tan suavemente, que la respuesta de ella fue un dulce gemido de su boca, contra la de Agustín. Él se movió, despacio, lentamente. Arriba, abajo. Las piernas de Carolina se entrelazaron con las de él. Los brazos se juntaron, terminando en un par de manos entrelazadas. Las bocas seguían moviéndose en ese juego erótico, en ese baile de amor. Y acompañado de pequeños mordiscos, más lametones. Agustín se movía tan suave, consecutivamente, dentro de ella. Como la primera vez. Y lo adoraba. Tanto, que le hizo perder la noción del tiempo. Llegar al séptimo cielo no era fácil. Pero con Agustín, todo era posible. Y ellos dos, ya habían sobrevolado hasta el duodécimo.










[🌹]

🍌¡Bananas!🍌

✨¿Como están?✨

Venía a informales tres cosas:

1. El maratón comienza a partir de la próxima actualización.

2. ¡"Protegeme" está nominada en la categoría de "Aguslina" y de "Mejor Adaptación" en los Roller Awards! ¿Pueden creerlo?😱💕 Y me haría muy feliz que votaran por esta historia.💕💕

3. Yo (Noy) estoy nominada a "IBF" y "Escritora del Año" igualmente, en los Roller Awards así que me haría muy feliz que también votaran💕

Vayan a mi actividad (la de mi perfil) y seguramente ahí les aparecerá que yo voté en los Roller Awards así que allí es donde pueden votar💚

Las amo bebés❤

-Noy💙💚

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