Protégeme

33. Michael y Valentina.

Las nueve de la noche. Carolina no había bajado para hacer la cena.

—Cariño... —dijo Agustín, tocando a su puerta. —Baja a cenar, anda...

—No. —dijo desde adentro de su habitación.

—Pero si Mike es como de la familia, ¿Por qué te avergüenzas?

—Porque me vio desnuda, ¿quizás? Y delante de ti. Y su comentario... ¡y tú no le dijiste nada!

—Ya le dije un par de cosas. Pero él no tiene la culpa —rió Agustín. —Kope... baja a cenar. —la puerta se abrió lentamente. Carolina llevaba puesto un pijama de color azul cielo, y el cabello alborotado, aún mojado. Sin una gota de maquillaje y con las mejillas encendidas. Adorable. —Te besaría —dijo Agustín en la forma verbal del condicional. —si pudiera y no tuviera que perder la jodida apuesta.

—Entonces hazlo —sonrió Carolina, olvidándose de la vergüenza. —puedes acabar esto.

—Oh no. Si hay alguien que lo acabará, esa vas a ser tú.

—¿Quién lo dice? ¿El rey del sexo?

—¿Quién lo dice? —le repitió Agustín. —¿La diosa del Kamasutra? —y los dos se pusieron a reír. Ya que no podían besarse.

[...]

La puerta sonó por enésima vez, aquella noche del lunes.

—¡No se molesten! —dijo Michael que se había quedado quedado a cenar en una ‘autoinvitación' a la casa Bernasconi. —Abro yo.
—Dios... —Michael se quedó embobado, mirando los intensos y azules ojos de Valentina. —Hola bonita.

—Mm... ¿Y tú quién eres? —dijo la rubia pasando a la casa. —creo que aquí viven Carolina y Agustín, y no un chulo playa de Inglaterra.

—Oh bonita, no soy un chulo de playa —dijo cerrando la puerta y apoyándose en el marco de la entrada. Repasando el curvilíneo cuerpo de la joven. —y menos Inglaterra. Soy mexicano guapa.

—No piropees tanto —le espetó ella. —y bueno, aún peor. mexicano...vamos, un chamuyero o un asteroide.

—Qué casualidad, Carolina también dijo lo mismo de Agustín la primera vez que lo conoció. Y mira donde están ahora. —alzó la barbilla, hacia la pareja que bajaba las escaleras.

—Bueno, veo que ya se conocieron —sonrió Carolina. —Valu, él es Michael. —miró a su amiga. —Mik...

—Encantado Valija —se burló.

—Valu. No Valija —se quejó Valentina. —es mejor el verano que el otoño, ¿no crees? Oh bueno, olvidaba que los mexicanos tienden a ser aburridos.

—¿Sí? No creerías lo mismo si te metiera en mi cama.

—Apuesto a que ni se te levanta —Valentina se rió, Carolina también, no pudo evitarlo.

—Bueno —concluyó Michael. —quizás no contigo.

—¿Qué no? —dijo Valentina señalándose. —He visto esa mirada voraz en muchos. Solo eres una baboso más. —Michael fue a reprochar, cuando de pronto apareció Netan y se abrazó a la pierna de su padre.

—Papi...

—¿Qué pasa, cariño? —lo levantó y lo besó en la mejilla. Captó la atención de Valentina. —¿Te encuentras mal? ¿Quieres que vayamos ya a casa? —Michael se dirigió hacia el comedor de nuevo, con Netan en brazos. Valentina estupefacta, miró a Carolina.

—¿Es padre?

—Sí, y necesita ayuda. —suspiró Carolina. —Es muy buen hombre, pero aveces zopenco —miró a Agustín.

—A mí no me compares con Michael.

—Es que amor... aveces se parecen tanto —y mientras tanto, Valentina, seguía perdida en aquella imagen tierna, en la imagen paterna de Michael, en aquellos ojos mieles.

—¿Valu? —repitió Carolina. —¿Val? —pasó un mano por delante de su amiga.

—Em... ¿Qué?

—¿Qué querías, vida? —Valentina miró a Carolina.

—No me acuerdo... —rió. —Mm... yo...

—¿Tú...? —canturreo Carolina. —Lo que pasa es que Mike te ha gustado...—siguió diciendo en un tono gracioso. —Oye, ¿Sabes qué? Tengo una idea —ladeó la cabeza. —ahora toma nota tú. Deja al chico del chat y vete con uno que te haga feliz. —señaló a Michael con la barbilla. —al menos la pasarás bien una o dos noches...

—O de por vida —dijo Agustín.

[🎡]

🎠¡Hola!🎠

capítulo dedicado a; LaGueris♡
gracias por siempre apoyarme beba✨

uh, se conocieron este par ¿qué pasará?
¿vieron? yo les dije que iba a haber Michaentina😊✨

Un besoooo🌸

—noy💙💚