Capítulo 20

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Me estaciono frente a la puerta del imponente edificio que es el conservatorio superior. Es un edificio blanco entero, de unas seis plantas con muchas cristaleras. Encima de la puerta, en grandes letras se lee "Conservatorio profesional y superior de Danza Ward".

- Ya hemos llegado, te llamo esta noche - Sav asiente, se acerca para darme un beso, abre la puerta del copiloto y tras mirarme una vez más y lanzarme una sonrisa, sale del coche y corre hacia la entrada.

Hasta que no la pierdo de vista dentro del edificio no muevo el coche, y cuando ya no la veo arranco de nuevo y me dirijo al local donde ensayamos. Hoy viene un cámara a grabar parte de nuestro ensayo para añadir a nuestra película-documental por petición de nosotros mismos. La idea surgió en un ensayo, pensamos que así los acercaríamos más a lo que es nuestra vida como músicos.

En el trayecto hacia el local, pienso en la noche pasada. Ninguna de las chicas con las que me he acostado me ha hecho sentir lo que ella, era una conexión especial, intensa y que iba más allá de lo físico. Aunque ya sé y estoy seguro es que ella es la chica especial de la que mi madre siempre me ha hablado siempre, cuando era chico y hasta hace poco, pero no puedo evitar sentirme un poco asustado. Me da miedo cagarla y perderla, o que gente la gente entrometida que va por este mundo de la fama se meta. Eso sí, cualquiera que se atreva a hacerlo acabará muy mal. 

Confío en nosotros.

Antes de lo que yo esperaba me encuentro por la calle en la que está el local. Aparco en el primer hueco que veo y cojo mi guitarra y las partituras del maletero y ando unos metros hasta llegar. 

Los chicos ya están dentro, sacando los instrumentos y un equipo de cámaras está montado dentro.

El ensayo es casi como todos los que hacemos, sólo que nos piden algunos planos, y eso no influye mucho en este.

- La edición del vídeo estará en unos días, os avisaremos para que vengáis a verlos y quizá hablar sobre algunos contenidos - dice Ben, el director. Todos estamos de acuerdo, hablamos sobre fechas y finalmente se va.

- Está quedando muy chulo - comenta Connor. 

- Ya ves, lo van a flipar, igual que nosotros lo estamos haciendo - añade Seth.

Almorzamos todos juntos, y algún que otro paparazzi nos fotografía, pero no le damos mucha importancia.

- ¿Y qué tal con Savannah? - me pregunta Connor, mientras los demás hablan de fiestas.

- Bien, ¿por qué? - le digo, receloso por sus intenciones.

- Joder tío, somos amigos y estamos en una banda juntos, no te pongas así. Me ofendes que dudes que quiera algo con la chica que te trae loco - dice, enfadado. 

Es verdad, no tengo motivos así que me disculpo.

- Lo siento, es verdad, es que no puedo evitarlo cuando se trata de ella - me excuso.

- Vale, te entiendo, pero no es bueno, Jayden. Sabes a lo que me refiero.

Yo asiento, dándome cuenta de la verdad en sus palabras. No es bueno que desconfíe con todo lo referente a Savannah, sólo hasta un punto. Igual que sé que debo controlar mis celos, joder si hasta a veces me siento celoso de Will sabiendo que es gay.

- Oye, hoy fiesta, ¿no? - Seth, cómo no.

- Seeeeeh - dice un animado Jase.

Todos nos apuntamos a la fiesta de David Brown, el vocalista de otra banda muy conocida del Reiuno Unido: CrossOver.

Después de la comida me voy a casa, echo la siesta un poco y me preparo para la fiesta. Me pongo unos vaqueros rotos negros, mis botas moteras y una camiseta negra básica. Pongo mi mirada distraídamente en el calendario y veo un redondel en el día 23 de Diciembre. Con una letra redonda y perfecta veo puesto:


"Actuación de navidad Savie" 

Al lado ha dibujado un corazón y nuestras iniciales. Sonrío. No voy a faltar por nada del mundo. Quedan hoy justo 23 días.

En la fiesta decido no beber mucho, no me fío de mí mismo con alcohol en mi sistema y aún así resultar ser un fiestón. Llego a casa muy tarde y al ver la hora decido no llamar a Savie porque estará dormida.

Nada más pongo la cabeza sobre la almohada caigo dormido. 

Un sonido continuo me despierta. Están llamando una vez detrás de otra al timbre y casi me caigo corriendo para abrir la puerta. Me encuentro a mi madre con la cara descompuesta. En seguida me espabilo y pongo en funcionamiento mis cinco sentidos.

- Mamá, ¿qué pasa? - pregunto preocupado. Ella me abraza, y abrazo su pequeño cuerpo que está temblando un poco. 

Se separa de mí y le dejo que pase. Se sienta en el sofá y yo a su lado.

- Tu padre... - ante su mención todo mi cuerpo se tensa.

- Mi padre, ¿qué? - casi le obligo a continuar con mi tono. 

Ella me mira con los ojos lacrimosos.

- Me ha llamado, no sé cómo ha conseguido mi número - intento calmarme y no tirar todo lo que tengo delante ni romperlo.

- ¿Qué te ha dicho ese...? - me callo al ver su  mirada de advertencia. Le sigue defendiendo a pesar de todo el daño que nos ha hecho.

- No estaba borracho, parecía diferente. Me ha dicho que quiere vernos - dice. Yo me cabreo más. ¿Cómo se atreve siquiera a preguntarlo? ¿No sabe todo el daño que nos hizo? 

- Las personas no cambian. Y menos alguien cómo él - digo, recordando el miedo que le teníamos mi madre y yo cuando llegaba a las tantas de la noche y rompía todo lo que tenía a su paso bien por lo borracho que iba, o bien porque venía cabreado. Nunca nos tocó un pelo, pero las peleas y los gritos parecen repetirse en mi cabeza.

Él era diferente antes de perder su empresa, pero su socio le traicionó y le robó casi todo lo que tenía. A nosotros no, pero mi padre se encargó de ello. Nos echó de su vida, se fue y nos abandonó. 

- Pero parecía tan cambiado que yo... - escuchar eso me enfada.

- No, mamá. No le creo, ¿cuántas veces nos dijo que no nos fuéramos de su lado porque sino no podría seguir viviendo para que después se fuera él? ¿Cuántas? 

- Es verdad... 

Intento calmar su llanto. Sé que le sigue queriendo, y nunca ha estado con ningún hombre después de mi padre. Lo odio por todo el daño que nos hizo. 


**********************

Aquí tenéis una parte de la vida de Jayden. El padre parece que quiere volver, ¿le daríais una oportunidad?

Espero que os guste,

Nos leemos pronto

- HeartLetters- 

They Don't Know About UsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora