Capitulo 33

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(Titi)

Realmente no fuimos a recoger a Clary enseguida, sino que primero fuimos a la casa a por las cosas para ir a Montauk, Ray dijo que sería mejor tener el hotel reservado esta vez, así que lo reservó por dos noches. Aun así, sacó la tienda de campaña y los sleeping, solo para simular con Clary hasta que se durmiera, una vez dormida la llevaríamos al hotel, principalmente para tener privacidad por la parte del "embarazo".

—¿Linterna?
—Listo —contestó Ray.
—Pijama...
—Listo
—Muñeca...
—¿Tenemos que llevársela? —preguntó Ray abrumado.
—Sabes que le gusta dormir con esa muñeca.
—Pero parece de esas diabólicas que despertarán en la noche... ¿Cathalinna has visto sus ojos? Por donde sea que me mueva esa cosa me ve.
—No seas dramático —le dije tomando yo la muñeca— yo también la tenía en mi cuarto y nunca me pasó nada.
—Está bien —dijo aún con voz cautelosa.
—¿Comida?
—Solo llevo golosinas y los sándwiches que preparaste.
—Okey, es suficiente con ello —dije con un suspiro mientras mentalmente repasaba de nuevo la lista de cosas necesarias... yo había empacado ropa para todos, pero aun así no podía evitar la sensación de que no debíamos ir.

—Hey —dijo Ray tomándome por los hombros y mirándome a los ojos— te preocupas demasiado Princessa.

Tal vez tenía razón... y estaba siendo un poco paranoica, intenté relajarme un poco y lo abracé.

—Gracias Gordo —dije sin poder evitar una leve risa.
—¿Por qué la risa? —preguntó sin romper el abrazo.
—Porque es raro cómo siempre logras calmar mis nervios.
—Bueno, es solo que soy el mejor en todo... hasta en calmar nervios.
—Ese ego Rayrick... cuidado con él —dije de broma.

Subimos todo al auto y luego subimos nosotros, tomamos rumbo a la casa de Sam y David. Cuando llegamos Sam abrió contenta.

—Hola Cathy, Ray...
—Hola Sam ¿Cómo se portó mi niña? —le pregunté.
—Excelente, están en la cocina con David haciendo palomitas.
—¿Comió bien? —le pregunté de vuelta, Ray había ido a la cocina, Sam y yo estábamos en la sala.
—Si, claro que sí, resiste bien el chile, hice cochinita pibil y chilaquiles.
—Nunca había comido chilaquiles... —dije pensativa.
—Me imagino, no es fácil encontrar tortillas por aquí, pero de verdad extrañaba la comida de mi mamá, y Rodrigo trajo ahora que vino.
—Tendré contemplado en mis planes futuros llevar a Ray y Clary de vacaciones a México...
—¿Recuerdas la vez que fuimos todos? —dijo Sam riendo.

Claro que recordaba esa vez, reí con ella. ¿Cómo iba a olvidar ese viaje? La familia de Gemma y la mía habían decidido viajar por cuestiones de negocios y había comido tanta variedad de platillos, que había querido quedarme ahí por siempre, fue la única vez que Gemma y yo habíamos coincidido en algo ante todo el mundo... por lo tanto, nuestros sorprendidos padres habían cedido a quedarnos todas las vacaciones.

—No la olvidaría por nada.
—Esa vez de verdad que Gem y tú parecían amigas, rogando por lo mismo.

Los niños pasaron corriendo escaleras arriba y David gritó desde la cocina.

—No me abandonen niños —Sam y yo reímos.
—Pobre David —le dije a Sam.
—Es su culpa por confiar en ellos —dijo ella— ¿Mañana ve Clary a su amiguita?
—No Sam, hablé con Amanda y me dijo que tendrían que salir de la ciudad que si podíamos posponerlo... le dije que sí, que no se preocupara, así que Ray y yo aprovechamos para ir a Montauk.

—¿Le avisaste a Gemma?
—Oh.... cielos, no —dije poniendo cara de espantada.
—Va a matarte si se entera cuando estés allá.

Saqué mi celular rápidamente y mandé un mensaje a Gemma donde le informaba que iría a Montauk y que cuando regresara le actualizaba acerca de lo que había hablado con mis Hermanos y de cómo quedaría todo para lo de la "pérdida del bebé". Contestó enseguida que era una pésima amiga por avisarle todo a la mera hora y que estaba en una fiesta con Roxana y Victoria.

La Ilusión de una Verdad |ECAP 1|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora