Addicted To His Kisses - {DOS TEMPORADAS}

CAPITULO 31

Dani lo empuja, haciendo que David caiga al suelo de espaldas. Él se levanta enfurecido y se pone delante de Daniel, desafiandolo con la mirada.

Se empiezan a empujar mutuamente y mucha gente los rodea, dejándome fuera del círculo. Me intento hacer sitio para separarlos y cuando por fin lo hago, veo a Daniel con la mano levantada y la mano cerrada, ¡va a golpear a David!

Me pongo en medio de los dos y el golpe que iba dirijo a David lo recibo yo en la mejilla. Caigo al suelo y me tapo la cara dolorida.

-Lo siento Julia, no quería... No te vi, de verdad, fue sin querer -dice arrepentido con lágrimas en los ojos.

Lo miro con odio, con los ojos rojos y aguados. Me levanto y sin decir nada me marcho del círculo de gente y echó a correr hacia casa.

DANIEL

-¡Se acabó el espectáculo! -digo enfadado.

David se acerca a mí y me coge por la camiseta, me mira enfadado.

-La has pifiado chaval -sonríe chulo.

Le empujo y salgo de entre la multitud que se ha creado. Empiezo a caminar por la calle con las manos en los bolsillos y la mirada baja. Giro en una calle y en la esquina veo un bar, no me lo pienso dos veces, entro y me pido una cerveza.

JULIA

Voy por la calle camino a casa. Levanto la cabeza sin dejar de llorar y me paro en seco al ver a la persona que tengo delante, mirándome sorprendido.

-Jesús... -susurro.

-Ven -dice y me acerca a él para abrazarlo- ¿Qué ha pasado?

Le cuento todo lo que ha ocurrido sin dejar de abrazarle, y sin dejar de llorar.

-Tranquila, conociendo a mí hermano es imposible que lo hiciera queriendo,  lo hizo sin pensar.

-Pero lo hizo -digo molesta.

Nos separamos y empezamos a caminar hacia casa, dice que estará a mí lado hasta que esté mejor. Se lo agradezco mucho.

Mi móvil suena y en la pantalla sale un mensaje de Daniel.

"Ven a mi casa".

Lo desbloqueo cabreada y Jesús me lo quita antes de que conteste, lo apaga y me mira interrogante.

-¿Vas a ir?.

-No quiero -digo fría.

-Vas a ir -dice afirmandolo.

Ruedo los ojos y continúo caminando.

-Julia tienes que ir, te pedirá perdón y lo arreglareis. Hace casi dos días  que volviste y ¿Ya quieres tener  problemas? -dice gritando ya que lo he dejado atras.

Me paro en seco y me giro andando hacia él rápidamente. Me paro  delante suya y le cojo mi móvil de las manos.

-Gracias -digo girándome de nuevo.

-¿Pero irás? -pregunta otra vez.

No sé cómo  ha conseguido convencerme, pero aquí estoy, en la puerta  de casa de Daniel. Estoy muy nerviosa, ya no sé de lo que es capaz.

Respiro hondo y llamo al timbre. Sonrío amablemente, pero la sonrisa me dura bastante poco, ya que mis ojos visualizan a Sandra, con una camisa de Dani, el pelo alborotado y una sonrisa de oreja a oreja.

-¿Qué haces aquí? -digo borde- He quedado con Dani.

-Te he dicho yo que vinieras, desde el móvil de Dani. Sígueme -dice subiendo las escaleras.

Entro detrás de ella, cierro la puerta y subo con ella al piso de arriba, tengo mucho miedo de lo que me vaya a encontrar.