¿Cómo lograr que el trabajo de la mente sea sustentable al trabajo del cuerpo y del espíritu? Muy sencillo, la mente requiere ejercicio constante y refuerzo de conceptos. Mantenernos en control de nuestra mente es una lucha continua. A cada instante se presentan situaciones que desgastan nuestro cerebro, todo lo que pensamos nos quita energía, por eso es muy importante seleccionar cuidadosamente en lo que pensamos.
La mente sigue indicaciones, pero no sigue órdenes, por eso es tan difícil dejar una droga o el tabaco, porque nos ordenamos no fumar más, pero nunca nos indicamos no hacerlo. Porque en realidad cuando queremos dejar una droga lo hacemos desde lo emocional por el daño que nos está causando, pero nunca desde lo racional. Cualquier mensaje que el cerebro recibe es decodificado para más tarde ser interpretado. Esa interpretación es tu elección. La interpretación que hagas, disfrútala porque tú la elegiste. La mente no tiene sentido del humor, por lo tanto cuando hacemos bromas acerca de nosotros mismos, ese mensaje es recibido e interpretado como una realidad y el cerebro actúa en base a esa indicación. Y por último la mente no conoce la diferencia entre la realidad y la ficción, por eso lloramos o nos emocionamos cuando estamos viendo una película triste, aun sabiendo que son actores y que están cobrando una fortuna por ese trabajo. La mente es gobernada por el espíritu. Si la mente tuviera que elegir entre leer o mirar un programa de entretenimientos, elegiría siempre la segunda opción. Sin embargo, es nuestro espíritu quien la obliga y le exige ponerse a trabajar. La mente te obedece, pero solo si tú le das las indicaciones adecuadas, sino prefiere no hacer nada. Lidera tu mente y tu mente te convertirá en un líder.
Para aplicar la mentalidad líder es necesario establecer una serie de parámetros de pensamiento selectivo:
· Pensar solo en positivo, pensar que cualquier problema tiene solución y no que cualquier solución tiene un problema.
· Redireccionar los pensamientos, concentrarnos en el foco de la solución y no en el foco del problema.
· Interpretar: la mejor interpretación de la realidad está igual de cerca que la peor interpretación, lo único que las separa es tu decisión.
· Pensar en planear, no en pasar el rato.
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9 Principios fundamentales para lograrlo todo
DiversosEstamos atravesando la cultura del sufrimiento. Una cultura que revive nuestras facultades de victimizarnos por todo, estas sensaciones de culpa se transmiten de padres a hijos, de profesores a alumnos, entre amigos, compañeros y hasta la propia pa...
