Alone [Yoonmin] ©

2 - "Tiempo valioso"

Yoongi jugaba con sus dedos, nervioso, mientras esperaba a que su amigo Hoseok trajera el café que estaba preparando. Desde la noche anterior, no había podido dejar de pensar en Jimin.

Hoseok llegó a la sala y puso dos tazas sobre la mesa, brindándole a su amigo una cálida sonrisa.

—¿Qué es lo que tenías que decirme?

—Jimin no está pasando un buen momento.

—¿Qué? —lo miró, preocupado.

—Anoche lo encontré muy deprimido. Lo había visto llorar con una película triste, o de la risa, después de hacer algo torpe o de escuchar un chiste, pero nunca de esa forma. No era Jimin, no el que conocemos. Estaba tan deshecho... incluso se había medicado, yo-- —frotó su cara con ambas manos— estoy desesperado, Hobi. No sé qué tanto pasa por su cabeza. De hecho, hasta tengo miedo de haberlo dejado solo en casa.

—Eso es extraño. Se veía bien la semana pasada, cuando lo vi.

—Lo sé, yo no tenía idea de que sintiera tantas cosas malas por dentro —bebió un poco de café—. No sé qué hacer al respecto ¿Cómo se ayuda a alguien en ese estado?

—Bueno, en primer lugar, debemos hacerle saber que no está solo.

Yoongi lo miró tras la mención de aquella última palabra. Justamente, la soledad era lo que más le molestaba a Jimin.

—Eso ya lo hice. Le dije que estaría para él, que me puede contar todo lo que quiera —suspiró—. Él cree que es una molestia.

—Dios, desearía tener más tiempo entre los estudios y el trabajo para poder ir a verlo —mordió su labio inferior, nervioso—. Tal vez hoy vaya. Si tomo el autobús ni bien salgo de la universidad, podré pasar por tu casa y avisar que llegaré tarde al trabajo.

—¿No te meterás en problemas?

—Eso es lo que estuve haciendo hasta ahora para verlos a ustedes un rato, cada vez que podía —se encogió de hombros—. Ve con él, si quieres. Lo necesita. Después de todo, en unos minutos, debo ir a estudiar.

**************

Jimin despertó lentamente. Estiró su cuerpo y abrió sus ojos. Eran cerca de las diez de la mañana. Volteó en su colchón, y no encontró a Yoongi a su lado. Por un lado, le pareció extraño, ya que, normalmente, el mayor dormiría hasta pasadas las once en un día en el cual no tenía universidad. Por otro lado, lo veía venir. Él creía que lo que había sido visto por su amigo anteriormente le había disgustado, y que había huido al creer que podría ser de nuevo quien escuche todo lo que le estaba sucediendo.

Ante aquel pensamiento, Jimin se acurrucó entre sus sábanas y sintió sus ojos llenándose de lágrimas, sin querer dejar salir ninguna. Sin embargo, de pronto, se asustó al ver la puerta del cuarto abriéndose. Yoongi entró con una bandeja en sus manos y una pequeña sonrisa en sus labios.

—¡Buenos días, Jiminnie!

El mayor dejó todo sobre la cama y le dio un abrazo a su amigo. Lo ayudó a sentarse y colocó la bandeja sobre sus piernas. Luego, cerró la puerta de nuevo y se sentó a su lado.

—Hyung, ¿Qué--?

—Te preparé el desayuno ¿Te gusta?

—Sí, pero...

—¿"Pero..."?

—Nada.

Jimin comenzó a probar lo que Yoongi había preparado. Era la primera vez que le preparaba el desayuno. Normalmente, él se levantaba primero y lo preparaba para el mayor.