Capítulo 43: Un nuevo maestro.

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Mayo 2 del 2016

Han pasado cinco meses después de la masacre de Hamex, las compañeras de Lemmy siguieron con su vida y reservaron el secreto. Daniel ingresó a la universidad y frecuentemente visitaba a Lemmy en su entrenamiento. Durante tres un tiempo de tres meses; Lemmy siguió entrenando muy duro con Mehmet, para que Lemmy no sufriera por el la partida de su madre, Mehmet lo sometió a otro entrenamiento especial.

Mehmet se encontraba viviendo en la casa de Lemmy y ayudaba en todos los factores económicos al chico, pero un día decidió tomar una decisión radical, que tomó por sorpresa a Lemmy.

-Lemmy tengo que hablar contigo, tengo algo importante para decirte -dijo Lemmy apareciendo en la habitación de Lemmy.

El chico estaba sentado en su ordenador jugando su videojuego favorito, al oír a Mehmet lo apagó enseguida.

-Como ordene maestro, voy escucharlo detenidamente -respondió Lemmy volteando a mirar a su mentor.

Mehmet ingresó a la habitación, sus movimientos eran lentos y estaba algo inseguro, se sentó en una silla al lado del ordenador de Lemmy.

-Ya no vas a pelear con Lindernain, cambio de planes -dijo Mehmet al mismo tiempo que se ponía cómodo en la silla.

-Ya era hora eso significa que voy a pelear de una vez por todas contra Klepton -contestó el chico avivando un sentimiento de euforia.

-No, aún no estás listo -refutó Mehmet con ademán de decepción-. Vas a luchar contra Mistain, en el desierto de Australia.

-No había escuchado de el antes, pero de todos modos lo mataré -respondió Lemmy apretando sus manos.

-Te dejaré mañana en la vieja casa donde se hospeda, yo iré a buscar a Pagun -dijo el demostrando miedo en sus ojos.

-¿Quién es Pagun? -preguntó Lemmy y examinó que su maestro estaba temblando un poco.

-Es el guerrero K-02, un guerrero Kepleriano muy poderoso al que te ayudaré a vencer -explicó el, pero no estaba inseguro, el miedo lo consumía.

-¡Maestro es muy peligroso! -Exclamó el chico levantándose de su asiento y haciéndole frente a su maestro.

-Eres sólo un clon, si peleas con todo tu poder vas a desaparecer, además es peligroso que el te eliminé maestro -espetó el.

Mehmet mantuvo la calma y respiró hondo para aliviar el nerviosismo que paralizada su cuerpo. Se levantó de su silla para explicarle su propósito a Lemmy.

-No lo hago por mi, es el destino de la tierra que esta en juego, no puedes con todos esos malditos solo, es hora de que te ayude, estamos más cerca de Klepton y mas apoyo necesitas -explicó él, con tono fuere y mucha firmeza. -Es más he vivido por más de seiscientos años, he tenido muchas fuentes de ingreso y he generado un patrimonio neto de más de ciento sesenta millones de dólares.

Lemmy quedó atónito al escuchar la cifra de todo la riqueza de Mehmet.

-Es obvio maestro, los sultanes era muy adinerados -Opinó Lemmy.

-Ya está echo la cuenta bancaria dónde está ese dinero será tuya -dijo Mehmet y de uno de sus bolsillos sacó una lujosa tarjeta débito que le entregó a Lemmy.

Lemmy quedó en silencio y fascinado por el detalle de su maestro, siguiente dinero para vivir diez mil años cómodamente.

-Maestro, esto ya es demasiado, me has dado poder, salud y ahora dinero. -Lemmy estiró la tarjeta para devolversela a Mehmet. Pero este no la recibió.

-Guardia esa falsa modestia para otra ocasión chico -reprochó el- solo no te dejes consumir, por la avaricia, la gula y la vanidad, si interpones primero la humildad, ese dinero será eterno.

Lemmy no respondió nada y queda fascinado por el regalo de Mehmet, ambos salieron de su casa para dirigirse a un cajero, Mehmet se enseñó la contraseña y lograron observar la millonaria suma en la pantalla del cajero. Durante esa la noche, Lemmy descansó en su habitación, mañana era un gran día que cambiaría el curso de la humanidad.

A la mañana del siguiente día, los dos partieron a el desierto de Australia muy temprano, gracias a teletransportación de Mehmet ambos llegaron a el desierto en cuestión de instantes, al llegar había una casa muy antigua en medio de todo el desierto, de madera muy rústica y de apenas un piso, ventanas rotas y un hombre sentado en una silla tocando un ukelele, Mehmet desapareció sin decir nada y dejó solo a Lemmy.

En la selva de Tasmania, un cazador comerciaba con cuernos de los rinocerontes, Pagun usaba su poder para extinguir al animal y solo dejar el cuerno, por culpa de este fenómeno ya quedan pocos rinocerontes en el mundo, Mehmet se apareció en frente de Pagun y este sonrió al verlo.

**

Mistain se encontraba sentado tocando el ukelele, tenía un sombrero de paja, una camisa blanca de manga corta y unos vaqueros rotos, ya se ha había percatado de la presencia de Lemmy pero no sé desconcentró mirándolo, sino que siguió tocando los acordes de una canción.

El calor agobiaba a Lemmy pero gracias a su elemento de agua podía refrescar su cuerpo sin que el calor infernal del desierto lo desidratara, caminó lentamente para acercarse a Mistain.

-Asi que tu eres Mistain -dijo Lemmy mantenimiento su distancia con el.

Mistain no lo miro, sólo siguió tocando su ukelele con más rapidez.

-¡Maldito responde! -Lemmy perdía rápido la paciencia al no escuchar respuesta de Mistain, el seguía ignorando al chico.

-No me dejas más opción maldito desgraciado, puedes escupir tus últimas palabras, primero una muerte rápida-. Lemmy se alejó un poco del la vieja cabaña y sin mucha dificultad se transformó de inmediato en sus cinco elementos. Estirando su mano derecha hacia el frente, concentró una gran cantidad de energía Kepleriana, ya bola de energía tenía la característica de ser morada, resultado de su entrenamiento y fusión de los cinco elementos.

Mistain seguía sin mirar al frente y tocaba el instrumento de manera más lenta y acordes bajos, creando una melodía triste y melancólica. La bola de energía de Lemmy era del tamaño de una pelota de baloncesto lo suficiente destructiva para dejar una onda expansiva a más de veinte metros a la redonda. Sin pensarlo dos veces la lanzó, esta viajó una velocidad supersónica al llegar muy cerca de Mistain. Mistain usó su ukelele como raqueta para lanzar la bola de Lemmy hacia el cielo en dirección del sol, no le presentó problema alguno. Después de lanzarla usó sus poderes de Hielo para congelar el noventa por ciento del cuerpo de Lemmy sólo le dejo la cabeza al descubierto, el chico perdió la transformación y no pudo reaccionar. Mistain se acercó caminado y observó los múltiples intentos fallidos de Lemmy por descongelarse.

-Aun eres muy débil chico, así no vencerás a Lord Klepton- espetó Mistain, sentándose en la arena para observar a Lemmy.

- ¿Qué me has hecho maldito? -preguntó Lemmy inerme ante la presencia Mistain.

-Solo te congelé chico, calma he hablado con Mehmet y descuida, yo seré tu nuevo maestro -respondió Mistain.

Continuará...

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