Under the same Roof | Raura

VIII. Imbecil

Maratón 3/3

Ross

Laura se separa rápidamente de mi y yo suelto un suspiro. No quería que se separara...

— ¿Piensan responder? Yo preocupada por ti y tú besándote con esta zorra. — chilla mi chica.

— Laura no es una zorra. — la defiende Jade mirando mal a Courtney.

— Lo besé porque Jade me lo pidió... — murmura Laura. — No sabía que tenía novia, lo siento mucho. Solo soy una amiga de su hija.

Parece... Herida. Esto fue solo un beso, nada más. Me gustaba Courtney y Laura no iba a cambiar eso, no se sentía como besar a mi novia.

— Solo le seguía el capricho a Jade. Lo siento, amor... Gracias por haber venido.

— Estoy aquí desde que te ingresaron. — dice haciendo puchero y se acerca a mi empujando a Laura, quien rueda los ojos y se va. — Debió ser desagradable besarla, parece ser tan estúpida y fea.

Sonrío levemente y asiento mientras le acaricio la mejilla. Por supuesto que no pensaba aquello, pero decirselo solo empeoraría las cosas.

— Le está diciendo cosas horribles a la mujer que te salvó y estuvo contigo desde el momento en el que se enteró y tu solo asientes. Laura no se merece eso, papá. — me dice Jade mirándome enojada y decepcionada.

— Cariño... — comienzo a decir pero ella se baja de la camilla y se dirige a la puerta.

— La única tonta y fea eres tú, Courtney. Además de zorra.

— ¡Jade! — la reto enojado ante ese comportamiento.

— ¿Qué? Ella no es nadie para insultar a Laura, así que yo puedo insultarla. Si no defiendes a Laura, entonces tampoco la defiendas a ella. — me grita para después irse dando un portazo.

Jamás la había visto tan enojada conmigo... Era nuevo.

— Laura no es una buena influencia para ella, ¿no lo ves? Terminará alejandola de ti y se la quedará ella. — dice mi novia. — ¿Crees eso de que ella es pura dulzura, bondad y ternura? Solo quiere conseguir a tu hija, Ross. Lo está logrando.

— ¿Tú crees? No parece ser así... — murmuro.

— Conozco a ese tipo de mujeres. Quiero lo mejor para ti y para Jade, los adoro... Ella no es lo mejor para ustedes.

Tal vez tenía razón... — No puedo alejar a Jade de Laura, cariño... La ama.

— Pero empieza a guardar distancias, estás demasiado pegado a ella y terminará ganándose tu confianza para después arrebatarte a tu hija. No es tu amiga, Ross... Es tu enemiga.

— Pero parece ser tan buena, divertida y dulce... — susurro distraído mirando la puerta, por donde ella se fue tan de repente.

— Hazme caso. Es mejor así. ¿Y qué tal estás?

— No lo sé. Creo que tengo fracturada una pierna.

— Oh, entonces no habrá sexo para nosotros... Oye, debo irme. — dice y se dirige hacia la salida.

La miro confundido. — ¿Vendrás mañana?

— Tengo cosas para hacer. Tal vez venga unos minutos. Te quiero.

— Yo a ti... — murmuro sonriendo.

Luego de que se va Courtney, el médico entra y me hace un par de revisiones para verificar que esté todo en orden. Al parecer, tendría yeso por tres meses y luego comenzaría unas terapias para poder caminar normalmente.