Prólogo

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- ¡Ganz! ¡Por favor! ¡No puedes dejarme aquí!- Undyne suplicaba mientras al otro lado de la puerta Ganz la escuchaba.

- ¿Quieres que te ayude después de que me abandonaras casi al borde de la muerte?- preguntó el esqueleto.

- Ganz, lo siento, sabes que debía despistarlos- la chica pez sangraba sin parar sintiendo su energía menguar rápidamente.

Ganz terminó por ceder y abrió la puerta encontrándose a la chica en el suelo sangrando. Sin dudarlo se acercó a ella cuando un ataque fue lanzado hacia ellos, esquivándolo rápidamente.

- Mierda, ya están aquí- gruñó Undyne mirando hacia el bosque, donde tres siluetas se acercaban, dejando ver a los segundos a tres perros de la guardia real.

Ganz ayudó a levantar a Undyne y como por reflejo, al sentir que otro ataque se dirigía a ellos, lanzó un ataque, alcanzando a uno de los perros y matandolo por accidente al instante mientras las líneas en su cráneo y su ojo izquierdo brillaban en un tono azul, apagándose de inmediato al ver al monstruo canino convertirse en polvo.

- Lo ha asesinado- comentó uno de los perros restantes mirando el polvo unos segundos para luego ver con odio a Ganz- el líder tenía razón- Ganz se hacía una idea de a quien se referían con "líder"- ¡Es un traidor!

- ¡Corre!- gritó Undyne tomando la mano de Ganz y corriendo a la puerta que estaba a penas a tres metros de ellos.

Ganz se dispuso a correr tambien, dando la espalda a los guardias y siguiendo a Undyne, pero los huesos de su mano resbalaron de la de Undyne al sentir como un ataque, como si unas garras hubieran atravesado su abrigo directo a su cuerpo le hubieran alcanzado, derribándolo en el suelo mientras sangre brotaba de él, observando como Undyne cruzaba la puerta y se giraba unos segundos a ver con horror la escena mientras Ganz utilizaba su magia para cerrar rápidamente la puerta de las ruinas, no podía permitir que nadie entrara.

- Parece que se nos ha escapado una, pero al menos hemos atrapado al otro traidor- una voz muy familiar se hacía presente, muy cerca de Ganz, dando a entender que era quien lo había atacado.

Ganz con dificultad se levantó del suelo y miró a cuánto estaba su vida.

- 0.5- se murmuró a si mismo.

- Tsk, Maldito traidor, solo muere- el dueño de la misma voz pateó a Ganz, tirándolo nuevamente al suelo.

Su vida bajó a 0.3HP, Ganz perdió el conocimiento en ese momento, escuchando como los perros que seguían con vida convencían al esqueleto más alto de que debían llevarlo ante el rey.

- Tsk, como sea, terminará por ordenar su ejecución- Papyrus miró con desprecio al esqueleto inconsciente en el suelo- y entonces ya no tendré que oír más el nombre de mi hermano

Papyrus estaba convencido de que el Rey Asgore ordenaría que ejecutaran a Ganz, lo que no esperó es lo que decretó en vez de eso.

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Nota: sé que Papyrus habla en mayúsculas, pero lo escribiré en minúsculas en esta historia, simplemente imaginen que está en mayúsculas y perdonen mi falta por ello.

Bien, terminé el prólogo, está historia sera fontcest del AU Gztale.

Decidí hacer la historia porque al buscar algunas para leer no vi nada que me gustara, así que decidí hacer algo a mi estilo.

Espero que disfruten de la historia y gracias por leerla, realmente estoy muy emocionada con ella, no se por qué xD

Advertencia: habrá contenido homosexual, algo de lenguaje grotesco, es posible que escenas sangrientas o de alta agresividad o no apta para gente sensible, en resumen, habrá contenido +18

Wasted [Fontcest]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora