•Capítulo 19: Hermosa

6.2K 589 64
                                    


Después de una situación traumática comienzas a ver la vida de otra manera, a apreciar esos pequeños momentos y pequeños detalles.

Kate había tenido bastantes de esos, por desgracia todos la habían llevado a un momento de autodestrucción, todo cambia.

Para Kate el mundo entero cambió cuando despertó y comprendió que estaba viva y no sólo eso, que tenía por quien luchar, que su vida tenía un propósito, era madre. Enterarse de, que alguien allá arriba la había escuchado y protegido a su bebé, que había logrado tener un bebé, que había nacido sano y que aquel horrible momento no daño nada de ella, le hizo comprender lo bello de la vida, ese lado que nunca había podido entender.

Estiró la mano con delicadeza para poder tocarla, su bebé estaba dormida se veía tan delicada en aquel aparato, su pequeña bebé había nacido prematura, por dos meses y al parecer no había complicación alguna, sin embargo tendría que permanecer en la incubadora por alguno días.

Ya había podido cargarla, ella había despertado treinta y seis horas después de que se desmayara en brazos de Xing. La habían llevado inmediatamente a ver a su bebé, había podido cargarla y respirar su delicioso aroma.

A ella la habían dado de alta una semana después, ese mismo día, había ido a despedirse de su bebé, aunque sabía que estaría ahí a primera hora.

(...)

— ¿Cómo te sientes? — preguntó Katrina cuando la ayudo a subir al auto

— Me duele todo— y sí, había perdido mucha sangre, pero se ha ido recuperado satisfactoriamente en tiempo récord, por suerte el aborto no había provocado lesiones en su útero por lo que podría tener otro hijo.

— Se nota, te vez horrible— Kate fulminó con la mirada a Xing.

— ¿Ya has pensado en el nombre de esa ricura?

— Sí— contestó Kate— su nombre es Lia Victoria

Xing y Katrina sonrieron felices, a pesar de lo pálida y cansada que se veía se podía notar la felicidad en su rostro.

— Es un bonito nombre— Elogio Xing.

Cuando llegaron al apartamento los dos menores la llevaron directo a su habitación para que descansará.

Pero Kate tenía otros planes, no iba a seguir con esa farsa. Lo primero que hizo fue marcar el número de Thomas

No le sorprendió que saltará al buzón. Se quedó bastante tiempo mirando el teléfono antes de decidirse a llamar a su casa.

Hola estás llamando a mi hogar, ahora no estoy pero puedes dejar un mensaje

Su voz hizo estragos en ella.

— Thomas... soy yo, sí estás ahí por favor contesta, sé que debes odiarme por irme así, pero hay algo muy importante que tengo que hablar contigo, por favor.

Ya no la dejo seguir hablando, no podía decírselo de aquella forma.

Una última vez, decidió intentarlo una vez más, el teléfono comenzó a sonar, pero a los tres pitidos se fue a buzón directamente.

Iba a volver a llamar pero el cansancio se apoderó de ella y se quedó dormida. Era obvio que Thomas no quería hablar con ella, pues había colgado.

Pero no le sorprendía, era lo mínimo que se merecía, pero ahora cómo le diría que tenía una hermosa hija

(...)

Lo Duro de Olvidarte  [Tough 2°]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora