Capítulo 13

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Llegaba la hora de cenar y mi madre no iba a volver a casa. Me aterrorizaba la idea de tener que cenar sola con Jungkook después de nuestro encuentro. Al fin y al cabo, le dejé con todas las ganas y la artillería lista para atacar.

El baño no me sirvió de nada, todavía me sentía sucia al recordar como Jungkook tocaba mi cuerpo sin ningún descaro. Me sentía una zorra por hacerle eso a Elena, encima que ella lo estaba pasando fatal, yo me dejé llevar por un tío que solo quería echarme un polvo.

Esas sensaciones que nacieron en mí, me hicieron pensar. Mi mente se repetía siempre lo mismo: "¿por qué?". No encontraba respuesta a tal cuestión.

Estuve mucho tiempo tumbada en mi cama dando vueltas pensando si en serle sincera a Len o callarme todo. Al fin y al cabo, solo habían sido tocamientos, no llegamos a más. Aunque... Mis mejillas se sonrojaron al recordar cómo Jungkook casi practicó sexo oral conmigo, una corriente recorrió mi cuerpo hasta mi feminidad. Era verdad que ambos teníamos muchas ganas de hacerlo.

Pero no, todavía no estaba segura a qué le pasaba a mi cuerpo. Preferí hacer una introspección psicológica a mi mente antes de hacer nada.

-A ver, __, recapacita.-Empecé a hablar conmigo misma tumbada boca arriba en mi cama mientras observaba el blanco techo.- Te has sentido atraída por un chico. Vale, ¿qué tiene de malo? Nada, eso que te quede claro. Pero ese chico es tu hermanastro, así que mal, muy mal.-Por un momento recapacité mis palabras.- Espera.-Me levanté de golpe.- ¿Acabo de aceptar que me he sentido atraída por un chico? No, no, no, no, no.-Me levanté exaltada.- No, eso es imposible. A mí me van las tetas, no las pollas.-Era una forma muy descarada de explicarme, pero era la verdad.- Eso tiene que ser solo con Jungkook, sí, sólo con él. Me gustan las chicas, y solo me gusta Jungkook. Ya está.-Pensé en lo que dije.- ¡NO!-Recapacité.- Me gustan las mujeres, y solamente me atrae el cuerpo de Jungkook, sí, eso.

Después de esa charla conmigo misma, me sentí como si me hubiera quitado un gran peso de encima. Noté menos presión en mi mente y podía respirar con más tranquilidad, pero todavía tenía una cuestión rondando por mi cabeza. ¿Realmente me atraían los hombres?

Pensé, pensé, y pensé, y la única manera que se me ocurrió para solucionar mis problemas de una vez por todas, fue con internet.

Hace bastante tiempo que empecé a ver películas para adultos, es decir, porno, pero sólo lésbico. Me animé para intentar ver porno normal, es decir, heterosexual. Me costó un poco decidir qué clip ver, pero elegí uno de los primeros que aparecieron en la lista. Obviamente me aseguré de llevar audífonos y de que la puerta estuviese cerrada. Apagué las luces que iluminaban toda mi habitación y dejé encendida una pequeña lámpara en una de mis mesitas de noche.

La película empezaba como casi todas las que había visto, pero mi cuerpo cambió de sensaciones al ver el miembro del hombre. Los actores realmente estaban disfrutando de sus gestos. Estaban llenos del mismo sudor frío que recorría mi cuerpo y el de Jungkook horas atrás.

-Así que así es como se ve.-Nunca tuve curiosidad de cómo era el sexo en personas de diferentes sexos, y ver a esa pareja en acción me resultó curioso y me dio una gran satisfacción.

Ambos cuerpos de los actores me atraían, es decir, me encantaban los pechos de la mujer pero los abdominales del hombre al verles daban ganas de rallar queso en ellos.

Volví a sentir lo mismo que en la cama con Jungkook. Un calor inundó mi cuerpo sin apenas percatarme. Mi mirada estaba realmente enfocada en cada píxel de la pantalla, no podía apartar la mirada aunque quisiera, que no era el caso.

Inconscientemente llevé mi mano a mi entrepierna. Noté cómo mi feminidad estaba mojada, realmente me excitaba ver cómo practicaban el acto sexual y escuchar sus gemidos al mismo tiempo, la diferencia tonalidad era cómo música para mis oídos.

sentimientos quiméricos » BTS (pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora