10

1.1K 218 44
                                    

Recostando su cabeza en el abdomen del contrario cerró los ojos con una sonrisa en el rostro. En realidad extrañaba la pequeña pancita que tenía su amigo cuando estaban pequeños. Era sumamente cómoda, incluso competía con su almohada. Además, MinSeok le regalaba unas cuantas caricias haciéndole dormir en menos de un minuto. A pesar de no contar con la misma comodidad de antes, aún podía descansar sobre Minnie y disfrutar de sus caricias.

Tanto él como MinSeok habían estado recordando infinidad de cosas que hacían juntos años atrás, y la noche se hizo presente con rapidez ante tal conversación larguísima. Optó por ofrecerle pasar la noche y aunque MinSeok estaba consciente de que su novio se iba a enojar, aceptó. Una vez el trigueño se quedó profundamente dormido sobre su abdomen, sonrió acariciando su cabello con delicadeza. Y en verdad que extrañaba esos días en los cuales era tan feliz, junto a él. Puede que en cuanto supo que sentía algo más que amistad por JongDae, no se atrevió a decírselo. Pero los alejaron, hasta el punto de no verse más, por ello tomó como buena idea darle una oportunidad a ChanYeol. Y ahora, no podía creer que aún veía a JongDae con ojitos brillantes mientras tenía novio. Se sentía una mierda de persona, aunque también confundido.

— Min, ¿por qué no duermes? —se sorprendió al escuchar la voz de JongDae y sonrió al instante regresando las caricias en su cabello.

— No tengo sueño.

— Si quieres podemos ver una película o algo.

— No, no. Tú sigue durmiendo, te veías cansado.

— Tu celular ha estado vibrando —JongDae se acomodó a su lado en la cama abrazando una de las almohadas contra su pecho. Mirando al más bajo con un ojo entreabierto, éste sacó el móvil de su bolsillo para después maldecir—. ¿Pasa algo?

— ChanYeol me estuvo llamando... Creo que debería avisarle que estoy contigo. Aunque mejor me voy.

JongDae cerró sus ojos cubriéndose con la sábana—. Bien.

— Lo siento, p...

— Cierra la puerta, ¿sí?

Estaba molesto, molesto con él mismo por haber invitado a dormir a MinSeok. Era más que obvio que su novio estaría jodiendo y agradeció de cierta forma haberle hecho saber que lo estaban llamando, ya que tomó eso como una prueba y aunque le hiciera bastante daño, aceptó que MinSeok jamás lo vería diferente, con amor, así como veía a ChanYeol.

Todas sus esperanzas desapareciendo cuando escuchó la puerta cerrarse y se encontró completamente solo en su habitación. Planeaba dormir abrazando a MinSeok, como antes, aunque sabía que algo en él iba a despertar si eso sucedía. Y ese era el lado bueno de todo, no pasó vergüenza ¡Yay! Por favor, ¿a quién engañaba. Estaba echo una completa mierda sobre la cama que iba a compartir con él, y sí, podría mal interpretarse de muchas formas. Pero sólo quería tener al mayor cerca, abrazar su cuerpo, sentirlo pequeñito entre sus brazos y disfrutar de su dulce aroma.

Las cosas nunca saldrían como él desea, y estaba bien, de eso se aprende, ¿no?

Subiendo el volumen de una de las canciones en su lista de reproducción corta venas, entró al salón. Estaba por faltar ese día, si no fuera por JongIn, quien entró a su habitación y lo encontró despierto mirando a la nada, para después avisarle a su madre y ésta no tardó en obligarlo a asistir, porque Dae, no debes permitir que tus notas bajen.

Fue directo al asiento que señalaba BaekHyun a su lado y se sentó ocultando su rostro con ambas manos. Lo cual no pasó desapercibido por el chico a su lado.

— ChenChen, ¿qué sucede?

— No te importa —respondió de mala manera desviando su mirada.

— ¿Quién te crees? A mi no me hablas así, hijo de tu perra madre. Mírame y dime qué pasó con MinSeok anoche, porque seguro es eso —JongDae fue obligado a voltear hacia su amigo y  fingió una sonrisa. No quería recordar lo sucedido con MinSeok. Pero de BaekHyun no se salvaría—. Y bien, estoy esperando, Kim.

— Iba a quedarse en mi casa. Pero ChanYeol lo estuvo llamando y se fue.

— No entiendo porque te gusta tanto. Sabes, el amor no es nada importante para mi y verte sufrir por eso me deprime mucho... Y también me da mucha gracia.

— Sólo quiero que MinSeok me vea como algo más.

— ¿Por qué él, hm? Hay tantos chicos como chicas babeando por ti.

— P-pero.

— Pero nada —BaekHyun frunció el ceño y debido a que aún hacían falta unos cuantos minutos para que iniciara la clase se levantó llevando al trigueño con él—. Iremos a buscar buenos culos para ti y vas a sonreír, ¿entendido? —lo encontró rodando los ojos y pellizcó su brazo—. ¡¿Entendido?! —repitió.

— ¡Entendido!

Besos Robados [ChenMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora